Felix, My Sunshine.

¿Lix?☀

4 años después.

-Estoy bien mamá, hoy termine mis prácticas y tengo que entregar mi papelería en la universidad, luego de eso iré a mi cita con el doctor.

-¿Estas segura que no quieres que te lleve?

-Estoy segura, deja de preocuparte tanto, ¿Te llamo más tarde?.. Okay, bye.

Han pasado 4 años desde que me despedí de Felix, jamás lo volví a ver, debo admitir que luego de salir del hospital la vida cambió para mi, en todos los sentidos, cuando tenía algún accidente, cuando me sentía triste o cuando alguna emoción negativa venía a mi, no podía evitar pensar que Felix regresaría, pero no era así.
Aún asisto a mis citas con el psicólogo como comúnmente y sigo mi tratamiento, mi relación con mi mamá mejoró mucho después de que ambas "sanamos" y aceptamos la muerte de papá, también entré en la universidad, ahora soy una futura dentista.

Hasta el día de hoy, nunca pude recordar cuando fue la primera vez que vi a Felix, pero sin duda se que ese momento marco un antes y un después en mi vida.

1 hora más tarde.

-¿Nunca volviste a escucharlo o verlo?-Negué ante la pregunta de mi psicólogo quien ha sido el mismo doctor durante todo este tiempo, sigo llamándolo Doctor Woo aunque se bien que ese no es su verdadero nombre.

-Nope, ni a el, ni a esa voz en mi cabeza.. Es como si se hubieran ido para siempre, ahora siento que me eh olvidado de Felix de poco a poco, antes solía recordarlo con pequeñas acciones, ahora creo que cada día que pasa, me olvido más de el.

-Eso es muy bueno Sunnie, eventualmente es algo que tenía que pasar, así como olvidaste a los amigos imaginarios que tenías de niña, olvidarías a este otro amigo imaginario. -Asentí sonriente ante el comentario del Doctor Woo, sabía que tenía razón. -Bien, pues.. Estoy feliz y triste de lo que te diré pero, hoy por fin, luego de casi 5 años, te daré el alta.-Sonreí.

-Sonará horrible, pero estoy feliz de no tener que verlo cada mes. -Le dije poniéndome de pie mientras estrechabamos nuestras manos sonrientemente.

-Aún así, sabes que tienes que regresar para tus chequeos -Asentí.- Si en algún punto de la vida necesitas ayuda puedes venir, estas por entrar a la vida adulta y no hay nadie más poco cuerdo que un adulto.-Dijo y yo asentí una vez más.

-Gracias Doctor Woo.

-Ten una gran vida Sunnie, una real.

Salí de su consultorio, estaba tranquila y feliz, mi mamá se alegraría de saber que por fin había sido "dada de alta".

Al salir del edificio tuve una gran idea, compraría un pastel para celebrar junto a mamá, así que crucé la calle.

Cuando estaba a punto de llegar al otro lado de la calle...

Lo vi.

¿Como era esto posible?

Me quede en shock.. ¿Qué estaba haciendo Felix al final de la calle?

Estaba a punto de caminar en mi dirección y empecé a entrar en pánico, así que regresé corriendo al edificio del Doctor Woo.

Corrí escaleras arriba hasta que llegué a su consultorio, con el corazón en la mano y a punto de tener un ataque de pánico.

Abrí la puerta sin preguntar, por suerte sólo estaba él.

-¡Lo vi! -Grite asustada.

-¿Me viste? -Preguntó confundido.

-¡No, lo vi! ¡Vi a Felix! -Dije, con los nervios de punta mientras caminaba de un lado a otro sintiendo mil y un emociones.

-¿Como que lo viste?

-¡Si! Salí de su consultorio y al cruzar la calle ¡el estaba ahí! Ahora con el cabello azul, tenía audífonos puestos y miles de carpetas en sus manos. -Hablaba de forma rapida.

-Sunnie, eso es imposible. -Se levantó para tomarme cuidadosamente por los hombros y ayudándome a sentarme en el sofá junto a su escritorio. -El solo es un producto de tu imaginación, no existe, nunca existió.

Hablaba en un tono bajo y tranquilo lo cual me hizo sentir un poco menos paranoica.

-Tal vez viste a algun chico que se le asemejaba físicamente, por eso creiste haberlo visto. -Me dijo y empecé a pensar en esa opción, tal vez tenía razon, sonaba muy lógico. -Además ¿No me dijiste que Felix tenía el cabello rubio?

-Cierto, completamente cierto ¡Ay dios, por un momento pensé que otra vez estaba loca! -Dije aliviada mientras me ponia otra vez de pie.

-"Loco" puede ser un termino muy ofensivo para algunas personas, para referirse a alguien con problemas mentales. -Asentí.- Puedes esperar aquí unos minutos más, así evitarás toparte al chico por la calle.

Volví a asentir ya un poco más aliviada.

De pronto, llamaron a la puerta del Doctor Woo, era su asistente.

-Doctor Lee, su hijo esta aquí, vino a traerle los archivos que olvidó en casa ¿Lo hago pasar?

-Claro, por favor, llevo todo el día esperándolo.

Su asistente asintió y luego la puerta se abrió más, dejando entrar a un chico estatura mediana, delgado, tez blanca, pecas y cabello.. Azul.