Estoy a una semana de entrar a la universidad, al final luego de pensarlo mucho decidí estudiar licenciatura en lenguas extranjeras porque después de todo me encantan los idiomas.
Estaba ayudando a mi tío a servir la comida que pedimos a domicilio mientras mi madre hablaba por teléfono,Jacob y Ari están jugando videojuegos.
- Chicos vengan ya la comida está lista--aviso mi tío.
Todos nos sentamos en la mesa y de inmediato mire a Ari, habíamos quedado que hablaríamos con la familia.
-Antes de comer quisiera decir algo primero- dijo Ari.
Jacob lo miro mal, al parecer tenía mucha hambre, si Miguel estuviera aquí le hubiese pegado por grosero luego llamaría a mi mejor amigo para contarle todo.
-¿No me digas que dejaste a Andrés embarazado?- exclamóel pelirrojo.
Le pegue por pendejo, mi madre miro con curiosidad a Ari
-Habla castaño-dijo mi madre tan dulcemente noten mi sarcasmo.
Ari cogió mi mano, no era como si fuera a pedirme matrimonio, aún no, tal vez cuando terminemos la universidad pero ahora hay un tema más importante.
-Quiero que Andrés se venga a vivir a mi apartamento, claro está que él vendrá los fines de semana y me encargaré que sus notas en la universidad sean las mejores-explico Ari.
Mi madre suspiro antes de mirar al tío Marco.
-Igual ya te la pasas más allá que acá así que está bien pero los fines de semana te quiero aquí compartiendo con la familia -dijo mi madre.
-Tanto drama para eso, ya voy a comer– se quejo Jacob.
Ese pelirrojo nunca va a cambiar.
Sólo sean responsables y respétense porque que vivir justos con lleva muchas cosas me recordó mi tío.
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Estábamos a punto de ver una película cuando el timbre del apartamento de Ari comenzó a sonar.
-Yo voy– avisé.
Mew me siguió así que decidí abrir la puerta y vaya sorpresa me lleve al ver a Loan frente a mí, a veces hablábamos por mensajes pero no nos habíamos visto desde aquella ves en el hospital.
- Ari ahora regreso-avise antes del salir del apartamento.
No se veía mal, se veía mejor que antes, estaba más corpulento y en sus ojos no había rastro de ojeras, su piel estaba un poco bronceada.
-Sé que no soy la mejor visita y es muy complicada nuestra relación pero quiero pedirte disculpas por colocarte una trampa para dañar tu relación con Ari,estaba celoso porque tú me estabas quitando lo que pensé que era lo único que tenía en mundo- no me esperaba que él se disculpara por eso- No soy buena persona y nunca lo seré, soy egoísta y envidioso, muchas cosas más están en la lista pero créeme que nunca seré como aquel hombre que se hace llamar nuestro padre, te estoy diciendo todo esto porque me voy, no soporto vivir en aquella casa, hay mucho recuerdos que me atormentan quiero comenzar desde cero en otro lado pero antes quiero tu perdón-dijo.
Tachar a alguien de malo es tan difícil si sabemos todos los problemas que lo rodean, él nunca tuvo la culpa.
-Todo está en el pasado, tranquilo no guardo ningún rencor después de todo el drama Ari sigue conmigo y eso es lo que me importa- dije.
– Sólo quería decirte eso, no decepciones a Ari porque entonces vendré y me quedaré con él-me advirtió.
Jamás te quedarás con él.
-Te detesto- claramente no lo hacía.
-Yo te detesto más– susurró antes de irse.
Tal vez no eran las palabras correctas pero ambos entendíamos que significaba estas. Regrese al apartamento y de inmediato me tire encima de mi novio.
- Hey eso dolió- se quejó Ari.
Me acomode en su brazos antes de pegar sus labios con los míos, el beso era lento pero apasionado, las manos de mi novio bajaron a mi trasero y se metieron debajo de mi pantalón para apretar mi trasero a su gusto.
-Me encantas - susurró.
Me separé de sus labios y me quite la camisa dejando ver mi abdomen adornado con una pequeña serpiente y una cicatriz.
-Tú me encantas más-exclamé.
Mi novio comenzó a pasar sus manos por mi pecho y se detuvo en aquella serpiente que me une con Miguel.
-Nunca lo dije pero me fijé en ti desde el primer día que llegaste, bajaste del auto de tu madre y parecía que estuvieras peleando con ella no sé porque pero desde ese día no pude quitar mis ojos de ti- confesó.
Estaba sorprendido ante sus palabras.
-Nunca olvidare aquel día de la cafetería que dijiste que nunca me liberaría de ti- continuo diciendo.
-Después de todo soy ese chicle viejo que estará pegado a ti toda la vida - dije con burla.
El negó de inmediato.
- No eres un chicle viejo, eres el amor de mi vida-–
Susurro.–Quién diría que el terror del instituto, aquella bestia temible este siendo tan cursi– me burle.
Una sonrisa apareció en el rostro de Ari.
-¿Quieres conocer a la bestia?-me cuestionó con
malicia.Yo negué y me levanté antes de salir corriendo.
-Cuando te atrapé te volveré un desastre-dijo este antes de perseguirme.
Cogí a Mew en mis brazos y lo utilice como escudo.
-Mew ataca-le pedí a aquel gato negro cuando el castaño se acercaba cada vez más a mí.
Aquel gato me traicionó y salió corriendo mientras me dejaba con aquella bestia que parecía que su deseo no se saciaba nunca. Pobre de mí está noche.
Me encerré en el baño y me asegure de que la puerta estuviera cerrada correctamente, me senté en el suelo tratando de recuperar la respiración, mire la pulsera que me regaló Miguel que por alguna extraña razón me hacía volver la mirada al inicio de todo.
La primera vez que vi aquellos ojos verdes, tenía tanta curiosidad por saber que escondía que no me di cuenta a dónde me llevaría mi curiosidad, reí y llore a tu lado y no cambiaría nada de lo que pasó porque tú eres mi pasado,presente y futuro.
Ari Coronel tu nunca fuiste el final de esta historia, aquí no hay cabida para el final feliz porque esto apenas comienza, nosotros estamos escribiendo el inicio de esta historia y solo nosotros sabremos cómo terminará esto.
Tú siempre serás mi caja de Pandora.
Fin
°•°—mo—°•°
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°•Enamorado del castigo•° |Spartor|
RomanceAmor, lealtad y amistad son tres palabras que definen a Andrés Saavedra toda su vida a tenido que cambiarse de casa por el trabajo de su madre pero esta vez su destino le deparará muchas cosas y entre ella conocerá a Ari Coronel, aquel chico que con...