━━𝗧𝗛𝗘 𝗞𝗜𝗡𝗚 ♡ 𝗦𝘂𝗻𝗴𝗷𝗮𝗸𝗲 ݈݇-

𖥻 𝐓𝐡𝐞 𝐥𝐨𝐬𝐭 𝐩𝐫𝐢𝐧𝐜𝐞𝐬𝐬 ݈݇-

POV'S NARRADORA

Había muchos cuentos sobre princesas y brujas, pero para Chaeyung había uno en específico que le causaba curiosidad y quería saber si era cierto. Según su padre, Hoseok, hace mucho tiempo había existido una princesa rebelde.

Una princesa que desafiaba a todos, se dice que un día había salido de su hogar para poder encontrar un lugar donde no la juzgaran por no tener el estatus de una princesa. Desde ese día nadie la ha buscado ni ha sabido de su paradero.

Chaeyung caminaba por el bosque tranquila, hace un rato la fiesta en el Palacio había iniciado y ella ya se estaba aburriendo de estar ahí. No le causaba diversión ver cómo príncipes de otros reinos querían con ella.

Llegó a un punto donde había un conejito, se acercó a él y comenzó a acariciarlo. Le resultaba extraño ver a un conejito como ese, era café y con manchas blancas. Normalmente su padre solo le comentaba sobre los conejitos blancos, ya que, según él, estos tenían un punto importante en su familia.

Mientras acariciaba al conejo, se dio cuenta de que tenía una patita vendada. Se entristeció al verlo posiblemente lastimado.

Chaeyung recordó las historias que su padre solía contarle sobre las leyendas de los conejos blancos en su familia, pero nunca había escuchado sobre uno con manchas café. Intrigada por la situación del conejito, decidió investigar más a fondo.

─¿Estás bien, pequeño? ─preguntó Chaeyung con ternura, acariciando suavemente al conejo mientras examinaba su pata vendada.

El conejito parecía mirarla con ojos llenos de gratitud, como si entendiera sus palabras. Chaeyung se sintió conmovida por la situación del animalito y decidió ayudarlo. Tomó un pañuelo de su bolsillo y lo usó para hacerle un vendaje provisional a la patita del conejo, procurando no causarle más dolor.

─Así estarás mejor por ahora ─susurró Chaeyung, ofreciendo unas hojitas verdes que había recogido en el camino como alimento para el conejito.

El animalito aceptó las hojas con entusiasmo, devorándolas con rapidez. Chaeyung sonrió ante la escena, sintiendo una conexión especial con el conejo herido. En ese momento, decidió llevarlo consigo de vuelta al Palacio para cuidarlo y asegurarse de que recibiera la atención médica adecuada.

Con el conejito en brazos, Chaeyung emprendió el camino de regreso al Palacio, pero cuando estaba a punto de levantarse para irse, escuchó el crujir de las hojas entre sí.

Alzó la mirada y no pudo ver absolutamente nada. Con el conejito entre sus brazos, se dio la vuelta, justo en ese momento escuchó una voz detrás de ella.

─¿Kessler, por qué te vas con ella? ─La voz sonó, haciendo que Chaeyung se detuviera de golpe.

La princesa giró lentamente, encontrándose con la presencia de una mujer. Tenía el pelo largo, negro y ondulado. Vestía un vestido verde oliva ajustado desde el busto hasta la cintura, y suelto el resto, que le llegaba a las rodillas, con un cinturón café en la cintura y un broche dorado. Llevaba un collar con un dije dorado en forma de ave y unas botas café con detalles. En su espalda, portaba un arco con flechas, y su rostro estaba limpio.

─Disculpa ─murmuró Chaeyung al percibir la presencia de la mujer.

La mujer se acercó a ella y, notando la diferencia, tomó de vuelta al conejo entre sus manos y comenzó a regañarlo.

─¿Por qué desapareciste de la nada ─inquirió, mirando al conejo. ─Responde.

La princesa estaba confundida. ¿Por qué le preguntaba eso a un conejo que no tenía voz?

─¡Porque me dejaste solo! ─respondió una voz.

Chaeyung se quedó paralizada. La voz provenía del conejo que estaba en los brazos de la mujer. Confundida, balbuceó:

─¡¿El conejo habló?!

─Sí, el verdadero problema es hacerlo callar.

La sorpresa de Chaeyung era palpable mientras observaba al conejo, sin poder creer lo que acababa de presenciar. La mujer, por otro lado, parecía acostumbrada a esta situación peculiar y le dedicó una mirada divertida a la princesa.

─Lo siento, él puede ser un poco parlanchín a veces ─explicó la mujer con una sonrisa.

─¿Quién eres tú? ─preguntó Chaeyung, aún asombrada por la situación.

La mujer se presentó con una inclinación elegante.

─Me llamo Mina. Soy una viajera que conoce los secretos del bosque y sus habitantes ─respondió con misterio en su tono de voz.

Chaeyung la miró con curiosidad, intrigada por la presencia de esta misteriosa mujer en el bosque.

"Mina... Me suena"

─Un gusto, soy Chaeyung ─respondió la princesa, extendiendo su mano en saludo.

Por un momento, ambas conectaron sus miradas en silencio. Chaeyung sintió como si la conociera de algún lugar.

─Eres... ─susurró Chaeyung, sus ojos se abrieron de par en par─. La princesa perdida.

Mina arqueó ligeramente una ceja ante el comentario de Chaeyung, mostrando una expresión de sorpresa. Un brillo de reconocimiento cruzó sus ojos antes de que asintiera con una sonrisa enigmática.

─Así es, soy la princesa perdida, como me conocen por estos lares ─confirmó Mina, manteniendo su misterio.

Chaeyung se sintió intrigada por la presencia de Mina y por la revelación de su identidad. Había escuchado historias sobre la princesa perdida desde que era niña, pero nunca imaginó encontrarse cara a cara con ella en el bosque.

─Bien, gracias por cuidar a mi Kessler, nos vemos pronto, princesa, y te devolveré el favor cuando lo necesites ─respondió Mina antes de girarse y alejarse de Chaeyung.

Chaeyung se quedó confundida. ¿Cómo podría devolverle el favor si apenas se conocían? No tenía idea de dónde vivía Mina, y parecía poco probable que se encontraran de nuevo. Sin embargo, las palabras de Mina resonaron en su mente, dejando una sensación de intriga en Chaeyung.

¿O quizás sí se encontrarían de nuevo, pero en circunstancias que no serían de su agrado?.