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Jake, aún no me ha dicho por qué lloraba. Aunque si he sido capaz de conducir la cuesta porque Jake no estaba en condiciones de conducir.

Aparco un poco mal, y cuando salgo veo la puerta de la casa aún abierta.

—Al menos podías haber trancado la puerta.—lo regaño porque podrían haber robado.

Jake sale con dificultad y lo ayudo a ponerse en pie. El aliento le huele a alcohol desde aquí y para eso que es una cabeza más que yo.

Jake suelta un sollozo cuando lo siento en el sofá que me pone un poco nerviosa.

No soporto ver llorar a la gente pero conozco a Jake y es él típico que se hace el fuerte.

—Ahora vuelvo, no te muevas.—le advierto.

Vuelvo a la cocina rápida y cojo el teléfono fijo y marco a Lena.

—¡Hola! ¡Hola!—saluda emocionada Lena.

—Necesito que vuelvas a casa.—aviso calmada.—Jake ha tomado alcohol y no deja de sollozar. Y no habla, no se qué hacer.

—¿Alcohol? Imposible.—dice Lena sin creerme.—Jake toma medicación.

¿Medicación?

—¿Qué?—digo sin entender.

—Ya vamos, aguanta media hora. Estamos lejos de casa.

Me dice eso y cuelga dejándome más confusa que antes. ¿Que medicación?

Sin pensar nada más, vuelvo al salón y cuando me quiero dar cuenta veo a Jake en el baño vomitando.

Me siento a su lado, evitando mirar el vómito oloroso que ha soltado.

—¿Necesitas algo?—pregunto cuando pasan algunos minutos.

—Morir, necesito morir.—me afirma, cogiéndose el estómago y poniendo mala cara.

—Lena ya viene, estate tranquilo.

Me acerco a él y le pongo la cabeza en el hombro. Noto como mira solamente a un punto fijo. No quiere hablar, al menos no conmigo.

Pasa el tiempo y Jake está mejor. Al menos no ha vomitado. Lena me acababa de mandar un mensaje, que decía que en cinco minutos venía, mientras recostaba a Jake en el sillón.

Sigo dándole vueltas a lo de la medicación. Es decir, Jake faltaba a veces a clase y muchas veces tenía cara de muerte.

La puerta de la entrada se abre dejándome ver a Lena histérica.

—Jacob Miller.—dice rabiosa.—¿Eres idiota?—le dice agachándose al pie del sofá.

Alex entra en pánico, muy al contrario que Lena. Alex, xoge el teléfono de Jake y marca un número.

—Doctor Philip, soy el amigo de Jacob. Necesitamos su ayuda.—comienza.—Jacob ha tomado alcohol teniendo el tratamiento encima.—hace una pausa, oyendo atentamente al doctor.—Si, Anemia aplásica. ¿Que podemos hacer?

Después de una larga charla, el doctor nos ha dicho que era muy importante ir al hospital. Lena coge a Jake por un brazo y lo obliga a levantarse. Jake, con mucho animo la sigue.

El Brillo Que Vi En Tí Donde viven las historias. Descúbrelo ahora