°•×{Cuando las estrellas rielen}ו°

40 7 37
                                    

--¿Puedo preguntar que hobbies tienes...? --Rosi tamborileó la mesa con su bolígrafo mientras que miraba a Sabo.

--Pues... Tengo varios. --dijo Sabo, dándole al hombre una sonrisa.

--Adelante.

--Bien, ehm... Juego béisbol, no sé si lo mencioné alguna vez. --dijo el chico, sacando los dedos de su manos para contar-- Me gusta cocinar.

--¿Lo haces a menudo?

--Sí. A veces Dadán no puede hacer las cenas o las comidas, así que las hago yo. --tras ver al médico tomar algunos apuntes, prosiguió-- Hace algunos años tocaba el piano.

--¿Enserio? --Rosi pareció ligeramente sorprendido-- ¿Qué pasa? ¿Ya no lo tocas?

--Es que... El último piano que tuve se quemó en mi antigua casa... Y, pues eso. --dijo Sabo, removiendose, incómodo, en la silla.

--Uhm... Ya veo.

--Y el alemán. Estoy estudiando alemán. Por cuenta propia. Conseguí el B2 en junio de este año.

--Anda. ¿Qué me dices? --eso si que era algo que Rosi no se esperaba-- Nicht viele Leute mögen es, aber ich denke, es ist eine urige Sprache. (A la gente no le gusta, pero creo que es un idioma pintoresco.)

Sabo abrío bastante los ojos. Aquello le pilló por sorpresa.

--¿Hablas alemán?

--Soy de Múnich.

--Vaya... No tenía ni idea.

Rosi rio ligeramente y miró a Sabo con una sonrisa.

--Mi hermano, Law y yo nos mudamos aquí hace unos 12 años.

Sabo abrío la boca ligeramente, formando una pequeña "o".

--¿Es bonito? Múnich, digo.

--Eso precioso. Es gris y tosco... Pero a mí me parece precioso.

Sabo rio ligeramente mientras que jugaba con los dedos de sus manos.

--Me encantaría ir a Alemania. Me da igual el sitio.

--Estoy seguro de que te encantaría... ¿Qué quieres estudiar, Sabo?

--Derecho. --respondió este casi automáticamente-- Quiero ser abogado.

--Vaya papelón. Apuntando alto, ¿eh? --Rosi levantó un pulgar para darle ánimos-- Seguro que lo consigues.

--Sí. Gracias.

Rosi hizo un ademán para restarle importancia al asunto. Miró unas frases rayadas en su libreta y aflojó un poco su sonrisa. Iba a probar algo fuerte.

--Bueno, Sabo. Solo hubo un día que me hablaste de esto, así qué... Wer ist Ace?

--Disculpa, ¿q-qué? --Sabo lo miró rápidamente, tragando la saliva que empezaba a acumularse en su boca.

--Wer ist Ace, Sabo? --Rosi le mantuvo la mirada-- Responde, por favor. Venga, puedes hacerlo.

Sabo bajó la mirada y apretó los puños sobre sus muslos. Tembló ligeramente y su voz salió trémula.

𝓤𝓷𝓪 𝓬𝓻𝓾𝓭𝓪 𝓻𝓮𝓪𝓵𝓲𝓭𝓪𝓭 (Sabo X Reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora