Draco y T/n llevaban unos 9 meses de relación, y, todos en Hogwarts sabían que Draco tenía completamente embobada a la chica, y como no tenerla de esa forma? al fin y al cabo, estamos hablando de Draco Malfoy.
A Draco le encantaba mostrarse como un chico rudo al cual no le importa nada más que si mismo, pero a decir verdad, en la intimidad con su novia, era bastante inseguro. Y por inseguro me refiero, a que si veía a su chica siquiera mirando a otro hombre, montaba un gran show de celos. Y justo eso, es lo que estaba ocurriendo ahora mismo en su habitación.
-A ver, preciosa, explícame nuevamente por qué carajos Pottah tenía sus putas manos en tú cintura? -Se notaba lo exaltado que estaba, pues pasaba repetidamente las manos por su cabello.
-Ya te lo dije amor, solo estábamos practicando para el baile, la profesora McGonagall nos puso juntos
Dijo T/n con su típica voz suave. Ella estaba sentada en el borde de la cama. Al escuchar eso, Draco se arrodilló frente a ella y puso sus manos en los muslos de la chica, apretando estos con bastante fuerza.
-Y por qué mierda no cambiaste de compañero? Eh? Acaso querías que él te toque? -Su mirada desbordaba ira.
-Draco no, de verdad, tú sabes como es la profesora -Puso sus manos sobre la de él intentando que deje de apretar sus muslos, que por cierto, ya estaban marcados.
-Me molesta que toquen lo que es mío -Dijo apartándose de ella, aún sentado en el suelo.
-No volverá a pasar, si? Lo prometo -Dijo incoándose frente a él y sosteniendo su rostro con ambas manos.
-Bien -La miró a los ojos, ella sonrió levemente. Él puso una de sus manos en el muslo de la chica y lo tocó con suavidad, esa era su forma de pedir disculpas. Ella lo besó, dando a entender que todo estaba bien.