ᴋᴏᴋᴜꜱʜɪʙᴏ x ꜰᴇᴍ ʀᴇᴀᴅᴇʀ
¿Esto es amor?, ¿Verdaderamente es lo que sienten ambas partes al estar en constante contacto?
La atracción es algo que nos mueve, algo que usualmente sentimos al ver a alguien más. Sin embargo, tal vez lo que sienten no solo...
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Ya ha pasado una semana desde aquel incidente, tu cuerpo se encontraba mejor desde aquella noche, habías tomado mucho reposo y cuidaban de ti constantemente, así que gracias al cuidado riguroso del personal, pudiste recuperarte rápidamente.
Pero tu madre no tenía tiempo que perder, pues un día conversó contigo acerca de las parejas, dijo que estabas entrando en tu edad más fértil, por lo que debías de desposar a un caballero y formar una hermosa familia y eso fue lo que más te asustó, tú ni siquiera estás preparada para tener una pareja, ¿Cómo sería posible cuidar de un hijo y de un esposo?
Para tu buena suerte, tu madre y tu padre tenían que asistir a una importante junta, por lo que tardarían aproximadamente una o dos semanas en volver, puesto que el viaje de ida y de regreso era largo, así que por lo mientras te quedabas a cargo de varias cosas. Por lo que un día antes, por la noche, tu madre te mandó a llamar.
- Kaori, querida, en un día más nos tendremos que ir a arreglar asuntos con el negocio de tu padre. Estando ahí, aprovecharé para buscar el mejor pretendiente para ti, recuerda que es tu deber casarte para conservar el orgullo de la familia y que mejor que lo hagas con alguien de nuestro mismo nivel económico. ¿No te parece fabuloso? -dijo tu madre con evidente emoción, ella creía que eso es lo que tú quería, pero verdaderamente no-
- Lo es madre, espero que puedas encontrar al mejor candidato para mi -le dijiste mientras le sonreías, era evidente tu molestia-
- Cariño, sé que es peor hacerlo que pensarlo, pero te aseguro que te conseguiré al mejor marido, él te cuidará como tu padre me cuida a mi. Y tendrán muchos hijos, te lo aseguro, tienes un cuerpo y facciones hermosas, estoy segura que más de un hombre querrán tener hijos contigo.
- ¡Mamá! -dijiste mientras la veías avergonzada, hablar de estas cosas con tu madre aún se te hacían bastante extrañas, más sabiendo que si de repente llegas a tener un hijo, estarás atada para siempre-
-Ella simplemente se rio, es tan elegante incluso cuando se ríe, no creías poder llegar a ser de esa misma forma cuando seas mayor- Es solamente la verdad cariño, tienes 20 años, estás apunto de cumplir tu siguiente año para entrar en tu etapa más fértil, necesita ser ahora o morirás sola.
- Lo sé madre, pero me temo que debo hacer algunas cosas antes de que el sol se ponga, con tu permiso -dijiste mientras daba una reverencia para irte de ahí, no soportabas más tener que estar hablando de eso con tu madre-
Te dirigiste directamente a la salida de la casa, querías ir a la ciudad, hace mucho que no salías, así que sin el permiso de tus padres, fuiste con el cochero para que te llevara de favor a la ciudad, tal vez podías despejar esos pensamientos. Una vez ahí, agradeciste la amabilidad del cochero y le pediste de favor que no comentara nada a tus padres, si llegaran a saber que te escapaste tendrías que ir con ellos al viaje.
