Dark Melody

9

Donghae

Después de despedirme de Heechul,
estaba estremecido. Se sentía
como algo más que una despedida
temporal. Siempre habíamos
vivido en ciudades separadas,
pero esto era diferente.
Ahora era parte de la Camorra.
Si la tregua no duraba, y por lo
que había oído no duraría mucho,
jamás lo volvería a ver.

Pero eso no era lo unico que
habia convertido mi estómago en
un pozo de serpientes. Hasta el
momento, Hyukjae había sido más
amable de lo esperado. ¿Y si
esto era parte del plan? ¿Y si
su máscara agradable resbalaba
al momento en que estuviéramos
en Jeju? Ese era su territorio.
Ahí era donde podían hacer lo
que quisieran. No era como si
pudiera regresar a Busan si las
cosas no funcionaban, y mucho
menos ahora que todos sabían lo
que Dae me había hecho.

Las miradas tristes habían sido
casi demasiado difíciles de
soportar, pero las miradas de
evaluación ocasionales fueron
incluso peores. Era como si la
gente se preguntaba si había
sido el que me había provocado
esto.

Junhan y yo caminamos adelante
con los hermanos y Jungsu detrás
de nosotros.

Me dio una mirada vacilante. No
habíamos hablado mucho hasta
ahora, pero parecía agradable,
y no podía ver ningún juicio
en sus ojos, incluso ahora que
sabía de mi pasado.

Subimos al jet privado y
me detuve, sin saber dónde
sentarme. Junhan sonrió.

-¿Por qué no te sientas conmigo
de modo que podamos conocernos
mejor?

Aliviado por su oferta, lo seguí
hacia atrás y nos sentamos
uno frente al otro. Hyukjae, sus
hermanos y Jungsu se acomodaron
en asientos cercanos entre si en
el otro extremo del avión.

A Hyukjae no pareció importarle que
no hubiera elegido sentarme a su
lado Este matrimonio era un mal
necesario para él. Un medio para
un fin.

-Entonces, ¿estás casado con
Jungsu? -pregunté a Junhan.

Junhan se sonrojó y eso hizo que
sus pecas se destacaran aún más.
Sus ojos se dirigieron al hombre
rubio.

-Oh... no... no estamos casados.
No hemos estado juntos por mucho
tiempo.

-¿Y tu familia te permite estar
con él antes del matrimonio?

Junhan soltó una carcajada.

-No soy parte de la Camorra. Soy
de afuera.

Mis ojos se abrieron con
sorpresa.

-Oh. No estaba seguro por tu
nombre. ¿Permiten eso en Jeju?

Junhan frunció los labios.

-No estoy seguro que sea algo
que esté permitido, pero
Christopher lo permitió por Jungsu.

Supe de inmediato que Junhan era
tan cauteloso con el Capo de la
Camorra como yo. Todos, excepto
sus hermanos, probablemente
desconfiaban de él.

-Entonces, ¿creciste en una
familia normal? -No había tenido
mucho contacto con personas
ajenas a nuestro mundo
que encontré su compañía
emocionante.

Junhan hizo una mueca.

-Bueno, no llamaría "normal" a
mi familia por los estándares
promedio. Mis padres son
adictos. Quiero decir, eran...
mi madre todavía lo es. -Respiró
hondo.

-¿Qué me dices de tu padre?

-Jungsu lo mató.

Me congelé, mis ojos
desplazándose hacia su novio.
Y como si pudiera sentir mi
mirada, sus ojos azules se
posaron en mí antes de dirigirse
hacia Junhan y calentarse.