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Donghae






Estaba completamente exhausto después de hacer el amor y no me moví incluso cuando Hyukjae salió de mí.

-Podría comer algo. ¿Qué tal tú?

Sonreí.

-Podría comer.-Me moví para ponerme de pie, pero Hyukjae sacudió la cabeza y salió de la cama.

-Quédate. Nos conseguiré algo, y luego podemos planear nuestra caminata
de mañana.

Me estiré sobre mi espalda, sintiendo como si cada músculo de mi cuerpo se hubiera convertido en goma.

-Suena bien.

Hyukjae se puso calzoncillos, y entonces, sus ojos recorrieron toda la longitud de
mi cuerpo desnudo en apreciación, y los dedos de mis pies se curvaron en deleite.
Salió de la habitación y me senté, amando el delicioso dolor entre mis piernas. Una
sonrisa alzó mis labios y no pude contenerla. Nunca había sido tan feliz en mi vida.

Me limpié en el baño y agarré la guía de senderismo para el área de Jeju y luego esperé a Hyukjae. Pasaron treinta minutos
todavía no había regresado.

Confundido, consideré ir tras él, pero no quería parecer una mamá gallina así que ocupé mi mente leyendo las páginas del libro.

Pasó casi una hora antes de que Hyukjae regresara con una bandeja llena de uvas,
cubitos de queso y pan. Lo dejó a mi lado en la cama. Pero podía decir que algo
había sucedido. Alcanzando una uva, esperé a que dijera algo. Se dejó caer a mi lado
y tomó un trozo de pan.

-¿Has decidido qué sendero te gustaría probar?

-En realidad, no. Estás más familiarizado con el área- dije- ¿Por qué te fuiste tanto tiempo?

Ver un rastro de vacilación en la cara de Hyukjae fue más que preocupante.

-Me crucé con Chris.

-¿Y?

Los dedos de Hyukjae se curvaron alrededor de mi muñeca.

-Tuvo relaciones sexuales con Hyunjin. -Me quedé helado-. El lo quiso -agregó Hyukjae.

Sacudí mi cabeza, incapaz de creerlo.

-Ahora que él se ha llevado su virginidad, su prometido no lo querrá de
vuelta. Será rechazada. A menos que logre ocultar el hecho de alguna manera,
pero...

-Chris acaba de enviarles las sábanas ensangrentadas para burlarse de ellos
con la tradición de la Famiglia.

Aparté mi muñeca del agarre de Hyukjae y me sali de la cama, demasiado agitado
para estar sentada. Hyukjae sacó las piernas y también se puso de pie como si pensara
que iría en busca de otra confrontación con Christopher.

-¿Qué demonios le pasa?

Hyukjae me alcanzó. Pero estaba tan enojado que aparté su mano de un manotazo. Bajó el brazo sorprendido.

-Lo siento -dije-. No debí habete golpeado.

-Está bien, Hae. Prefiero tu ira al terror.

-Aun así, no quiero lastimarte.

Hyukjae sonrió levemente.

-No puedes, créeme. -Se acercó a mí otra vez y esta vez le permití tocar mi cintura.

-¿Hyunjin está bien? ¿Necesita tratamiento médico?

Hyukjae frunció el ceño.

-Ya te lo dije, el quería el sexo.

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