Bi curiosa desmasiado curiosa

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Después del segundo beso, Nayeon se alejó diciendo que tenía que ir al baño. Esto le dio a Jeongyeon tiempo para pensar y siempre le dolía cuando pensaba demasiado. Nayeon regresó después de un rato con el pijama puesto.

-¿Crees que debería operarme los senos?- preguntó mirándose al espejo, como si nada hubiera pasado antes. -Los viste, ¿verdad?

-No.- Jeongyeon entró en pánico.

-La imagen.

-Ah, sí, no he visto mucho.

Nayeon levantó su camisa sin previo aviso y la arrojó al suelo, dejándola sin nada para cubrir el área de su pecho, ni siquiera un sostén.

-¿Qué piensas al respecto?

-Creo que debes hacer con tu cuerpo lo que sientes.

-Ni siquiera me estás mirando. Mírame.

Jeongyeon odiaba esas situaciones, eran vergonzosas. Miró rápidamente hacia arriba y luego inmediatamente hacia abajo. Ni siquiera había visto nada.

-Están bien así, pero si no te gustan...

Nayeon se acercó y levantó la barbilla, obligándola a mirar su pecho.

-Necesito la opinión de alguien a quien le gusten las tetas. ¿Te follarías a alguien con unas tetas así?

-Bueno... Yo... También miro otras cosas...

Nayeon puso los ojos en blanco. ¿Era tan difícil?

-Jeongyeon, solo respóndeme, ¿te gustaría tocar un par de tetas?

-No lo sé...

Nayeon sabía que la respuesta era sí. Ella tomó sus manos y las colocó sobre sus sensibles senos, haciendo que sus pezones se endurecieran más. La morena amó y odió ese momento. Nayeon cerró los ojos y dejó escapar un gemido. Jeonngyeon estaba avergonzada pero también fascinada por todo, y si Nayeon continuaba tomando la iniciativa, no se contendría. Ambas estaban excitadas y las cosas se estaban yendo de las manos. Jeongyeon había estado sufriendo de depresión y no había podido excitarse durante meses, pero parecía que el cuerpo de Nayeon era su antídoto contra uno de los síntomas de su depresión.

-Jeong...- gimió Nayeon. Se quitó las manos de los pechos y se sentó en el regazo de la chica más joven. -Creo que soy bi curiosa.

-Yo también lo dije. Es la fase antes de admitir que eres bisexual.

-No me importa lo que soy.

-Dije que era bi curiosa demasiado curiosa.

Nayeon se rió. -Lo que sé es que estoy excitada. ¿Tú también?

La morena no supo de dónde sacó fuerzas para asentir. Ese simple movimiento de cabeza fue un gran logro para su timidez.

Nayeon empujó a Jeongyeon hacia atrás. -Acuéstate con la cabeza sobre la almohada.

Mientras tanto la pelinegra apagó la luz y se acostó junto a ella, de cara a su amiga.

-Lo que pasa aquí, aquí se queda.- le susurró.

Luego se acercó a ella y le dio otro beso, que Jeongyeon intentó devolver, fingiendo ser un experto. Nayeon, tuvo que admitir, quería ir más allá, mucho más allá, pero un momento de racionalidad la golpeó y se alejó.

-Te quiero, mi amiga.- le susurró.

-Yo también.- dijo Jeongyeon, pero casi parecía que necesitaba decir algo más.

-Lo siento.- continuó susurrándole.

Jeongyeon permaneció en silencio ante eso. ¿Qué debería haber respondido? ¿Que ella lamentaba que dejaran de hacer esto?

𝑰 𝒘𝒊𝒔𝒉 𝒊𝒕 𝒘𝒂𝒔 𝒓𝒆𝒂𝒍|2YEON|ESPDonde viven las historias. Descúbrelo ahora