𝑰 𝒘𝒊𝒔𝒉 𝒊𝒕 𝒘𝒂𝒔 𝒓𝒆𝒂𝒍|2YEON|ESP

El descubrimiento

Jeongyeon no podía esperar a que terminara de escribir la tesis para poder descubrir qué pasaría entre ellas. Estaba impaciente y esa tesis no le interesaba en absoluto. Pero lo mismo ocurrió con Nayeon.

-Suficiente por hoy. Me siento realmente realizada, escribimos mucho. ¿Qué haría sin ti? - preguntó la pelinegra apoyando su cabeza en el hombro de Jeongyeon.

La más alto sonrió. -Y entonces... ¿Qué hacemos?

-Hablemos un poco. El juego de ayer estuvo divertido, ¿no?

Seguramente Jeongyeon no podía negarlo.

-¿A qué te gustaría jugar?

-Yo nunca.

-Ah, okey. ¿Pero cómo? Sabes que no bebo.

-Lo sé, lo sé. Nos impondremos penitencias unas a otras.

-Bueno, juguemos.

-Entonces yo empezaré. Diría que nunca he besado a una chica pero ahora mentiría.- Se rió. -Nunca he estado en la cama con nadie desde que te conocí.

-Simple, sabes que no lo he hecho en los últimos veintitrés años.

-Verdad, verdad. Ve, es tu turno.

-Nunca he tenido sentimientos por una chica en la vida real.

-¿Oh no?- Tuvo que admitirlo, estaba un poco decepcionada. -¿Sólo para esas cantantes? Estoy casi celosa de ellas. ¿Tienes a tu lado a la chica soñada de todos y no te enamoras de ella?

-Qué puedo hacer... Tengo buen gusto.

Las dos sabían que se estaban burlando la una de la otra, así que no se enojaron.

-De todos modos, hay que decidirse por una penitencia.

-Pero dije "chicas".

-Aún tienes que obligarme a hacer penitencia.

-¿Quien? ¿Quién es?

-No dije que me gusta alguien, solo que la encuentro linda.

-¿Quien?

-Una que he visto un par de veces en el centro.- Mentira.

-Ah. ¿Por qué no me lo dijiste antes?

-Porque no me gusta. Soy hetero, ¿no te acuerdas?

-¿Jihyo lo sabe?

-Siempre te digo las cosas a ti primero.

Jeongyeon sonrió. Recordó el dolor de descubrir que Seulgi le había contado un secreto primero a su nueva amiga y luego a ella. ¿Por qué esa amistad la había lastimado tanto?

-No sé qué penitencia proponer...

-Algo extremo, cualquier cosa me parece bien.

-Si pero yo-

-Olvida que eres Jeongyeon. Sé tu verdadera yo. Sé que hay ideas ahí que quieren salir a la luz.

-Está bien... Entonces... ¿Puedes enseñarme a besar?

Nayeon sonrió. -¿En realidad?

-No, estoy bromeando. ¿Seguimos?

Pero Nayeon no quiso seguir adelante después de tal petición. Se acercó a la morena y se empujó violentamente sobre sus labios, besándola como la noche anterior. Jeongyeon recordó cómo hacerlo bien y le gustó, por supuesto que le gustó. La chica azabache inmediatamente insertó su lengua, primero acariciando las paredes de las mejillas de Jeongyeon, luego provocando la lengua de la otra, quien no sabía muy bien qué hacer y la movía sin un principio preciso, olvidándose por primera vez de preocuparse por no estar bien. Cuando se separaron, Nayeon se alejó un poco.

-Bien, ahora es mi turno. Nunca dejé que mi mamá descubriera que tengo lencería.

-¿Como hiciste? ¿No la lavas?

-Lo hago a casa de Jihyo.

-Ah... Yo no tengo.

-Tengo una más, tal vez te la puedo prestar. Apuesto a que serías muy sexy.

-Yo... Yo nunca me he tocado.- Iban ahora en esa dirección, hacia ese tipo de confesiones.

-¿A qué te refieres?- preguntó Nayeon confundida.

-En ese sentido.

-¿En veintitrés años?

-Sí.

-¿Como hiciste?

-No es que no quisiera pero... Al principio no pensé en eso, luego escuché a algunas personas hablar de eso y me sentí culpable con solo pensarlo. Lo intenté pero no creo que sea capaz de hacerlo.

-Soy culpable. Vamos con la penitencia.

-¿Otro beso?

-¿Te estás acostumbrando?

Jeongyeon se sonrojó violentamente y Nayeon lo encontró simplemente adorable. Se inclinó de nuevo y comenzó a besarla tan ferozmente como antes, metiendo su lengua en la boca opuesta. Las chicas se estaban dejando llevar demasiado.

-¿Sabes qué?- preguntó Nayeon apoyando su frente contra la de la menor. -Yo me toco pensando en alguien que conozco.

-¿Un chico que conociste en línea?

-No, nos conocemos en persona. Y siento la necesidad de hacerlo ahora mismo.

-Entonces iré al baño.

-Lo siento, hoy es más fuerte que yo. Normalmente me reprimo, pero hoy es muy molesto.

-No te preocupes.

-Yo iré al baño, tú quédate aquí. Mi madre aún no ha regresado.

Entonces Jeongyeon se quedó sola, preguntándose quién fue el que le causó esto a su amiga. ¿Qué lo sabes? ¿Por qué Nayeon no le dijo ciertas cosas? ¿Quizás no confió lo suficiente? ¿Era otra Joy o Seulgi más en su vida?

-¡Jeongyeon! ¿Está Nayeon en el baño?- preguntó la madre de Nayeon.

-Sí.- dijo Jeongyeon casi palideciendo.

-Entonces esperaré a que salga.

Su madre había regresado y Nayeon probablemente necesitaba ser notificada. La señora Im bajó las escaleras para guardar la compra, mientras Jeongyeon salió de la habitación y fue al baño para contárselo a su amiga.

-Jeong...

Jeongyeon estaba a punto de responder cuando se dio cuenta de que tal vez ella no la estaba llamando. La forma en que lo dijo... No era posible.

-Jeongyeon...

No necesitábamos esa situación. ¿Cómo se lo diría ahora? No quería que Nayeon supiera que la escuchó. Pero tuvo que avisarle que su madre estaba allí. Esperó un momento de silencio y se armó de valor para llamar. Nayeon abrió sintiéndose frustrada por no haber terminado.

-Nay... Tu madre ha vuelto.

-Mi*rda.

¿Tenía que quedarse en casa? Nayeon quería estar sola besándose con su amiga sin temor a que la descubrieran. Se arregló los pantalones, se lavó las manos y se fue.

-Vamos a la habitación a ver una película. Hoy yo lo elijo.

Cuando Jeongyeon se encontró frente a una película erótica, no pudo mirar a su amiga a los ojos. La señora Im había vuelto a salir y esto había hecho que su hija sospechara un poco, pero al menos podía estar a solas con Jeongyeon.

-Más interesante que tus películas, ¿no?

-Tal vez.

-¿Te gustaría ser arriba o abajo?- preguntó Nayeon con los ojos fijos en la escena erótica de la película.

-No lo sé... ¿Switch?

-Mh... Me gusta. Yo también.

Estoy preocupada por Nayeon. Si se revelara su relación, no sé qué pasaría con su acosador :\