Capítulo 7

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Se siente atraído por Itadori Yuji como un imán.

Siempre le sigue como un perro a un hueso, se aferra a él y no le importan los límites personales. ¿Pero a Yuji le importa? ¡No! No le importa. De hecho, parece muy encantado con Gojo Satoru, no le molesta lo más mínimo su descarada personalidad o reputación.

Para disgusto de Fushiguro, el hombre de pelo blanco siempre se une a ellos durante los descansos. Le quieran o no.

"Oye, ¿no estás sentado demasiado cerca de él? Prácticamente está sentado en tus piernas". Kugisaki señaló.

"¿Lo está? Pues bien!" Satoru levantó a Yuji de la silla ("¡wow!", exclama Yuji) y lo sentó en su regazo.

"¿En serio?" murmuró Megumi.

"Ya está, ahora podemos leerlo juntos" Satoru hace ademán de ignorar a los otros tres y apoya la barbilla en el hombro de Yuji, leyendo por encima de su hombro.

¿Cuánto hace que se conocen? ¿Tres o cuatro semanas? Y Gojo ya está actuando como si estuviera más cerca de Yuji que nadie, ¡y Yuji no hace nada al respecto! ¿De verdad no le importa en absoluto? ¿Sobre la forma en que este tipo odioso se comporta a su alrededor?

¿O es que es tonto?

Fushiguro no se ve a sí mismo dejando entrar a alguien tan rápidamente. Todavía está aprendiendo a dejar que Itadori y Kugisaki, y ahora incluso Junpei, entren en su vida.

Observa a los dos leyendo manga, con Satoru rodeando al chico de pelo rosa y Yuji cómodamente apoyado en su pecho. Fushiguro no sabía si compadecerse de su amigo o alabarlo por haber atraído al mayor, el más peligroso y problemático delincuente de su escuela.

Y además tener a ese delincuente problemático enroscado en su dedo meñique y tirando de él como de una marioneta. Se pregunta cuánto tiempo tardará Itadori en darse cuenta por fin el privilegio especial de Gojo.

"¡Uhhh-d-disculpa! Itadori-kun!" Una chica se paró junto a la puerta con una caja de bento en la mano.

Itadori se despegó de Gojo (que se resistía a dejarle marchar) y se acercó a la sonrojada chica. "¿Sí?"

"E-ehhh... ¡bento!" Le puso la caja de bento en el pecho. "¡Lo he hecho para ti!" Chilló, con la cara completamente roja.

"¡Ahh, gracias!" Yuji le sonrió, haciendo que saliera vapor de la cabeza de la chica.

"Espero que lo disfrutes" susurró.

"¿Cómo te llamas?"

"M-Mitarashi Ito" se presentó ella.

"Mitarashi-san, gracias por el bento, ¡seguro que lo disfrutaré!". Yuji le dio las gracias una vez más, mostrándole una gran sonrisa. La pobre chica no tuvo nada en contra de esa sonrisa, la sangre le subió a la cara y el vapor se le escapó por las orejas y salió corriendo de allí.

"¿Qué, qué he dicho?" Pregunta Yuji con una mirada confusa antes de volver con sus amigos.

"¿Qué tienes ahí Yuji?" Gojo pregunta, mirando la caja en sus manos.

"Ah, la chica quería darme esto. Dijo que lo había hecho para mí", explicó Yuji, quitando la tapa. Se le hizo la boca agua al ver la comida cuidadosamente preparada. Preparada sólo para él.

Sin embargo, antes de que Yuji pudiera hincarle el diente, Gojo le detuvo: "Maah~ ¿En serio no vas a compartir? Yo también tengo hambre"

"¡Oh, bueno, aquí tienes, senpai!" Yuji empujó la caja hacia él antes de tomar asiento junto a su senpai.

Nobara resopló, Junpei se mordió el labio, mientras que Fushiguro simplemente parecía molesto.

Cielos Azules y Rayos de Sol - GoyuuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora