One Shots | Railo

Ups

POV RAI

El ser testigo de como aquella chica se le arrimaba a mi chica solo por un "abrazo", me encandiló. Simplemente soy humana, y no puedo soportar semejante cosa ante mis ojos. Por lo tanto, una vez la amiguita se fue, esta vez me le arrimé yo a Alondra, empotrándola contra la puerta de metal de La Choza.

Ella simplemente me miró sorprendida, y colocó sus manos en mis hombros para ejercer presión al intentar alejarme. Pero al ver que yo no la dejaba, su respiración se agitó notablemente y yo acerqué mi rostro al suyo.

—Rai, ¿qué haces?

Suspiré.

—Te dejo saber lo mucho que me encabrona el hecho de que permitas que pase lo que acaba de pasar justo en mi cara.

Ella me miró extrañada, y dejó de ejercer presión en mis hombros.

—¿El qué, según tu?

—Esa imbécil se te pegó como una lapa, es imposible que no lo hayas notado. A menos, que te haya gustado.

Mis manos apretaron su cintura con posesividad, mientras mis ojos le dedicaban una mirada de superioridad. Ella sabe que me gusta, y sabe que me prende de sobremanera el hecho de que se deje manosear frente a mi. Pero como no es nada mío, no puedo opinar. Pero eso se acabó.

—Rai, eso no es problema tuyo.

—Sí que lo es, no te hagas la estúpida.

Pegué mi rostro aún más, y solo cuando estuve a punto de rozar sus labios, cambié la dirección hacia su cuello y comencé a lamerlo, deslizando mis manos por sus muslos al deleitarme con su piel morena.

—Rai..

—Dime.

Dejé una leve mordida en su cuello y luego chupé, provocándole un pequeño gemido. Envolvió sus manos en mi cuello y apretó levemente.

Continúe dejando besos a lo largo de su cuello, trazando el camino a su boca hasta llegar a la comisura de sus labios.

¿Debería besarla? No. La dejaré con las ganas.

Subí mis manos a su cintura de nuevo, apreté, y dejé un beso en su mejilla.

—Ups, como no es problema mío, mejor no me hago responsable.

Me dedicó una mirada indescifrable al ver que me alejé, yo reí bajito y me encerré en el baño.