~LENA~
Todo estaba listo, el viaje fue tranquilo y en casa todo estaba listo. Pedí que una habitación estuviera como si fuera de un bebé.
- Ven veamos tu habitación.


- Es muy hermosa. Dice Kara con un brillo en sus ojos. La abrazo por la espalda y besó su cabello.- Solo lo mejor para mi bebé. Digo.
- Len. Kara deja de ver todo y tienes los ojos con lagrimas.
- Tenía mis dudas de todo esto, pero viendo esta habitación fue como si no pudiera recordar que fue eso tan malo que me paso, y solo quisiera acostarme en esa cama tan cómoda. Dice Kara con lágrimas pero con ese brillo que tenía tiempo sin verlo esta volviendo.
- Ven te doy un baño y te cambio, es hora que mi beba Kara tenga un año. Digo y ella me abraza sonriendo.
El baño fue rápido en la tina, toque su cuerpo pero no para que se excitara, le puse sus ropita de bebe y se veía tan adorable.
- Dios, mi bebé es lo más hermoso que han visto mis ojos. Le hablo con voz chillona como si fuera de verdad un bebe. Kara ríe.
Todo el día la pase en mis brazos mirándola y hablándole como un bebé. Le di su mamila y se durmió la cargue y la acosté en su cuna. Puse música de bebé y fui a preparar nuestra comida.
Escuche un llanto y me preocupe corrí y mi a mi kara con los ojos rojos.
- Kara ya no tienes un año, tienes 25 digo ella me abraza.
- Te amo Len. Escuchar su voz me encanta. Ambas salimos de la habitación y vamos a la cocina. Kara se sienta a verme terminar la comida.
- ¿Como te sentíste?.
- Me gusto mucho. Dice y la besó.
- ¿Quieres continuar mañana con 2 años ?. Pregunto y ella asistente.
- ¿Quieres que te la comida?. Pregunto al ver que juega con la comida.
- Ya no tengo 1 año. Dice con un puchero y le sonrió.
- Pero a mi me gusta darle la comida a mi novia de 25. Le quito el tenedor y comienzo a dar su comida.
- Cuando regresemos lo único que voy a extrañar es que me des la comida. Dice y le sonrió.
- Podemos hacerlo siempre que quieras, no solo aquí.
- ¿Crees que después de todo esto podamos tener una relación normal?. Pregunta.
- Amor, no hay relaciones " Normales" todos somos diferentes, el que me guste tratarte como bebé no quiere decir que nuestra relación no sea normal. Digo y ella sonríe.
-¿ Recuerdas esa vez que me caí manejando bicicleta?. Pregunta y asiento.
- Yo te lo había dicho, pero no me escuchaste. Digo como si fuera un regaño.
- Pero sé sentía muy bien, a medida que aumentaba la velocidad sentía como todos mis sentidos se alternaban. Dice con una gran sonrisa.
- Hasta que chocaste con un árbol. Digo sería.
- Pequeñeces. Dice como quitando preocupación.
- Una fractura de brazo no es pequeñeces. Digo.
- Pero desde ese día te volviste mi enfermera particular, no me dejabas hacer nada. Dice con un puchero.
- Fue orden del doctor, descanso y mucho cuidado. Digo.
- Creo que desde ese episodio esta ese afán tuyo de cuidarme. Dice con la mano en la barbilla.
-Kara fue muy traumatico ver tu brazo de esa forma, pensé que no podrías volver a usarlo. Digo con escalofríos recordando ese momento.
- Pero durante 8 meses no dejaste que usará mis brazos, me dabas la comida, me llevabas mi bolso, hacías mi tarea, me ayudaban a cambiarme en la escuela. Dice con una sonrisa.
- Tu eras muy difícil de ayudar, querías hacer todo sola. Digo abrazándola. Recordar ese accidente me genera aún una gran angustia.
- Creo que no quería que me quitaran el yeso, era muy lindo tenerte a todas horas a mi lado. Dice y me da un beso.
-A mi me gusto mucho cuidarte, pero no vuelvas a lastimarte, prefiero cuidarte así como estas ahora. Digo y ella sonríe.
- Termina de darme la comida, quiero salir a conocer este lugar. Dice y la miro con u a sonrisa.
- Ya esta regresando mi Kara mandona.
- Amas a todas las karas. Dice y le doy la razón. Termino de darle la comida y vamos salimos a conocer nuestra nueva casa.
- Podríamos nadar más tarde. Digo viendo la piscina.
- O jugar un partido de tenis. Dice viendo la cancha. Caminamos todo y es realmente hermoso.
- Siento como si solo fuéramos tu y yo, que nada puede lastimarme aquí contigo. Dice nostálgica.
- No voy a dejar que nada te vuelva a suceder, primero deben pasar por mi para llegar a ti. Digo dejando un beso en su mejilla.
- ¿Quieres que traiga una copa de vino y nos senté a ver el atardecer.?. Digo y ella asiente.
- Busco dos copas y llevo la botella sin alcohol que pedí. Me siento es una silla de piscina y Kara se siente sobre mi. Ambas miramos el atardecer.
- No se cuentas veces te lo he dicho, pero gracias por todo esto Lena, sin ti no se como estuviera ahora. Dice y la abrazo más fuerte.
- Yo sin ti no podría vivir, estos años lejos fueron años más tristes y sin sentido que he vivido. Le confieso.
- Pensé que eras feliz, subias todos los fines de semana fotos donde se te veía de fiesta con Andrea. Dice con duda.
- Solo hacia lo que se suponía que debía hacer, salir de fiesta, tomar alcohol, acostarme con alguien, era lo que todos hacían y yo quería olvidarme de ti. Digo con tristeza.
- Cada foto donde estabas sonriendo era lo que me motivaba a continuar con mi vida, las cosas con tu hermano se volvieron repetitiva, no me gustaba salir de fiesta con él, y solo nos veíamos en eventos sociales. Dice y ahora soy yo la que recuerda todas esas foros que subían la parecida feliz.
- Yo también pensé que eras feliz con él, que lo mejor era seguir lejos para no arruinar tu felicidad. Le confieso.
- Mi felicidad eres tu, desde la primera vez que nos vimos hasta hoy, siempre fuiste tu. Dice y se voltea a verme. Le sonrió y la besó con suavidad.