Capitulo lll: La duda

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Pov:Ariadne

"QUE" fue lo único que pude pensar cuando el médico pronunció esas palabras. Me sentí impactada, asombrada por la noticia de que había un pequeño ser creciendo dentro de mí. Este diminuto ser tenía el poder de alterar el destino de Alfonso en cualquier momento, ya que aún no había asegurado su posición en el trono. En este instante, Alfonso es lo único en lo que puedo concentrarme. Lo conozco lo suficiente como para estar segura de que no dudaría en renunciar a todo por mantenernos a salvo, incluso a su propia vida...

Pov: Alfonso

Las últimas palabras que escuché seguían resonando en mi cabeza: "está embarazada", "está embarazada". No podía creerlo. Ibamos a tener un hijo. Una gran alegría inundó todo mi ser y, sin pensar, instintivamente besé a Ariadne.

Fue un dulce beso al que Ariadne respondió. Después de separar sus labios, ella, que había recuperado por completo el conocimiento, habló con voz conmocionada y un toque de preocupación.

-Alfonso.-Dijo.-¿Podemos hablar en privado por favor?"

Los pocos sirvientes que estaban en la habitación salieron de inmediato.

"Sancha, ven aquí un momento, por favor", indicó Ariadne.

La pequeña chica pelirroja se acercó feliz a su señora.

-Felicidades, señorita.- Dijo emocionada Sancha.

-Gracias-. Agradeció Ariadne con una sonrisa, aunque su tono de voz era algo apagado. -Sancha, por favor, asegúrate de que la noticia no se difunda.

Alfonso, al escuchar las indicaciones de Ariadne a Sancha, se quedó confundido. "¿Por qué Ari no quiere que se difunda la noticia del embarazo?"

-Claro, señorita.-Respondió Sancha antes de salir de la habitación y dejar a la pareja sola.

-Ari... ¿Por qué no quieres que se sepa de tu embarazo?- Pregunto Alfonso.

-Alfonso, este bebé representa un riesgo para ti en este momento-. Expresó Ariadne con preocupación. -Rubina está tratando de convencer a tu padre de que Cesare debería ser nombrado como el heredero al trono estrusco. Además, ahora que Isabella es la amante del rey, hará todo lo posible por eliminarnos del tablero.

-¿Entonces tu preocupación radica en que este bebé pueda afectarme tanto como para perder la corona? Si es así, no te preocupes por eso. En cuanto a Isabella, no permitiré que nos haga daño a ti ni a nuestro bebé.- Respondió Alfonso intentando calmarla.

-Pero Alfonso...

Alfonso soltó a Ariadne y descendió de la cama para arrodillarse frente a ella en el suelo, tomando sus manos con ternura.

-Si esa situación te preocupa, haré hasta lo imposible para asegurar el trono y ponerlos a Salvo a ti y a mi hijo.- Dijo Alfonso. "Aunque eso signifique sacrificar mi propia vida" pensó Alfonso.

Nota de la autora: Las actualizaciones de capitulos trataré de subirlas diariamente, y las sugerencias que an hecho se tomaran en cuenta en los siguientes capítulos

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Nota de la autora: Las actualizaciones de capitulos trataré de subirlas diariamente, y las sugerencias que an hecho se tomaran en cuenta en los siguientes capítulos.❤️

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