Tres años después....
Wangji se levantaba temprano, sus crías se levantaban con el al menos los varones, por qué las féminas sacaron la pereza de su esposo por dormir hasta tarde, cuando no había trabajo o cosas importantes que hacer, por lo tanto los dejaban seguir babeando la almohada por lo menos hasta las 10 de la mañana, después de esa hora si aun no despertaban los conejitos se metían debajo de las sábanas para hacerles cosquillas en los pies.
Los gritos de las niñas y su flojo padre le anunciaban a las cocineras que ya debían servir la comida, Wangji sólo se reía disimuladamente por las acciones de sus hijos, ellos adoraban a su padre y su padre lógicamente tanbien los tenía como su prioridad, su luz y su mundo entero, después de un loco despertar , la familia desayunaba entre risas, caricias y mucho amor fraterna, Ying consentía a sus bebés, les ayudaba a cortar sus vegetales, a seleccionar las mejores semillas y a beber de su vaso sin derramar.
Después de desayuno iban al jardín, de paseo o jugaban hasta quedar agotados, la siesta de los niños dependía de la actividad que realizaban en la mañana, al medio día el almuerzo era toda una odisea pues las cocineras preparaban algo de carne, alimentos de origen animal o proteínas, cosa que para los conejitos era muy difícil de ingerir por su naturaleza hervibora.
Ying era un padre paciente, delicado y amoroso, sus bebes podía tirar la comida en sus manos, piernas o pecho el solo limpiaba con cariño la boquita de sus hijos, les daba agüita fresca para que que se enjuagarse, con amor los animaba a intentar de nuevo hasta que los niños ingerian lo mínimo que debían tener en su cuerpo para no descompesar su salud.
Después del almuerzo por lo regular llegaban las visitas, Jiang Cheng traía a sus hijos para que jugarán con sus primitos, Quirent llegaba con sus hijos menores que pronto serían ubicados en algunas familias de renombre, pero ahora por elección propia, pues gracias al apoyo de Wei Ying con la manutención de estos la familia ya no estaba en necesidad de vender a sus mienbros híbridos.
Al despedir a las visitas los niños muchas veces se aferraban tanto a sus tios y abuelo que estos perdian a sus padres los dejaran llevalos a casa por algun fin de semana, una noche o unas horas mas si aun era temprano para que siguieran conviviendo con sua primos, en casa de Cheng, Quirent o el tío Zixuan los chicos tenían lo suficiente como para estar con los primos por varios días, papá Ying les había acondicionado un espacio en cada hogar con las comodidades que sus retoños super consentidos merecían por ser sus amados príncipes y princesas.
La cena por lo regular se tomaba en el jardín con toda la familia que se acumulará,
cuando no se salian con la suya eran aseados y preparados para dormir, en los brazos de papa y mama, cansados de jugar todo el día, se quedaban dormidos casi después de tocar la almohada, era entonces que Ying arrastraba a Wangji por algunos espacios para retozar a gusto, vaya que se calentaban las cosas en las noches pero los empleados y vigilantes ya sabían donde no mirar, a donde no oír.Para Wangji era la experiencia más deliciosa del mundo, amaba a sus hijos, adoraba su vida familiar, le encantaba la convivencia que tenía con sus amigos, sobrinos y metiches pero lo que más le gustaba de su nueva vida eran....
Sus días felices.... su gran familia feliz y su amado esposo que hacía de su vida una experiencia feliz...
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Mi lindo esposo
NouvellesNadie tiene derecho siquiera a mirarte...eres solo mio mi lindo esposo...