Kim BeomGyu nació de forma atroz y dolorosa, a su vez, siendo la mayor felicidad para su familia.
BeomGyu había resultado ser la mezcla perfecta entre la agonía y manías de su papi SeokJin y el desinterés y persistencia de su papá TaeHyung. Por otro...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
BeomGyu terminó se cenar rápidamente para subir de nuevo a su habitación a velar por SeungMin, no quería que dsspertara y no lo viera allí junto a él. Sin embargo, subiendo las escaleras, se dio cuenta que había dejado su teléfono en la mesa de la cocina. Al volver, sigiloso al ir descalzo, escuchó a sus padres hablar.
-Me ha removido el alma ver a BeomGyu así. -Decía SeokJin. -Era... No lo puedo ni decir.
-Amor. -Rio ligero TaeHyung, tratando de calmar a su Omega. -No sería el fin del mundo.
-Podría serlo. -Aseguró el mayor. -Yo me enamoré de ti y, que aceptaras a Kookie como tu hijo, me hizo increíblemente dichoso y feliz. -El rumbo de la conversación dejó helado a BeomGyu. -Pero no sabemos cómo podría ser que el lobo de Gyu acepte a SeungMin como su cachorro.
Eso no era posible. Él no sentía tal cosa. Él solo adoraba a ese niño. Él solo creía morirse esa tarde cuando lo vio enfermo, solo quería arrancarle la cabeza al ama de llaves cuando lo hizo entrar en pánico, solo quería verlo sonreír, quería que le viera a los ojos, que le pintara con rotuladores sus tatuajes, que siguiera entrelazando sus meñiques de por vida... De por vida.
BeomGyu quería, egoístamente, que solo dejara que él lo tocara, que él lo abrazara, que solo lo viera a él a los ojos, que solo le hablara a él, que llegara el día en que le dijera...
-Papá. -El Omega corrió escaleras arriba, encontrando al cachorro sentado y desorientado en su cama.
-Hola, MinMin. -Sonrió con lágrimas en los ojos. -Papá estará a punto de llegar. -El menor asintió y salió de entre las mantas para abrazarse a él, BeomGyu lo envolvió con una pequeña manta de lana y bajó de nuevo las escaleras. -Si tu padre se entera de que lo acabas de llamar, le da un infarto. -Bromeó para sí mismo, apartando a la fuerza los pensamientos intrusivos. -Sí, tu papá sería el Alfa más feliz del mundo y me gustaría ver eso... -Se calló él mismo.
¿Estaba próximo a su celo o que mierda le estaba pasando? ¿Por qué de repente ahora tenía la brillante idea de ver a TaeHyun reír feliz junto a SeungMin diciéndole papá mientras ambos lo esperaban de brazos abiertos?
-Tu jefe. -BeomGyu alzó la mirada hacia el salón. Su papá estaba serio señalando a su espalda, su jefe en el marco de la puerta impasible como siempre. SeokJin y BeomGyu cruzaron miradas como si estuvieran viendo doble, con la única diferencia que uno llevaba sudadera negra y tenía tatuajes y el otro llevaba un traje, negro también, y el cabello perfectamente peinado impoluto.
-Muchas gracias por cuidar de mi hijo. -SeungMin se retorció en sus brazos al escuchar la voz de su padre.
-Ha sido un placer. -Sonrió SeokJin. -Tienes un cachorro adorable. -TaeHyun volvió a ofrecer una reverencia y esperó en el marco de la puerta a que BeomGyu se acercara con el cachorro. Irrumpir en la morada de otro Alfa dominante como lo era TaeHyung no estaba en sus planes de respeto a quienes habían cuidado de su hijo.
