Capítulo 15~No soy un niño

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Con el corazón acelerado, como si estuviera luchando por mantener el cuerpo vivo y en pie, TaeHyun trató de relajar inútilmente el enfado de su animal interior. Su Alfa, el lobo en él, parecía reprocharle con constancia y gran furia el acto cometido. Y no, no le reñía por haber besado al Omega producto de sus deseos más pecaminosos y oscuros, sino que lo odiaba por haberlo dejado solo y no haber acabado lo que había empezado.

Aún cuando su erección había bajado al escuchar la edad de BeomGyu, sabía que si seguía pensando en su dulce boca, ardiente cuando succionaba su lengua, o en la bella carita de ángel que se cargaba el menor, siendo sornojada... Por la Luna, si ver sus mejillas se piel pálida rojas y marcadas por su propia escasa barba al besarse, no le había provocado la necesidad de dejar un chupetón donde sus labios se pasaran.

BeomGyu era, sin duda, el fruto prohibido de TaeHyun. El pecado de la lujuria personificada solo para él y sus gustos. Su cuerpo esvelto, cabello largo y su delicioso aroma a melocotón con el que llevaba obsesionado más de cinco años.

Tal vez sería más fácil si solo fuera algo físico, algo carnal, como se obligó a creer, de nuevo, cuando entró media hora después al cuarto se su hijo y se encontró la adorable escena. BeomGyu estaba sentado en la cama de SeungMin, con este en brazos, y me daba el jarabe para el resfriado con una jeringuilla de plástico en la boca. SeungMin se retorció, pero lo tragó cuando BeomGyu le cerró la boca a propósito y besó su nariz con dulzura.

Aún así SeungMin comenzó a llorar, se encontraría mal hasta que la medicación volviera a hacer efecto, pero TaeHyun lo achacó a su presencia en el cuarto. Era inevitable después de tanto tiempo en el que su hijo autista lo había rechazado.

-Hueles bien. -Escuchó a BeomGyu sususrrar, sin si quiera verlo, como si pufiera percibir su incomodidad y leerlo fácilmente. -Hueles a ti. -Afirmó buscando la mirada del cachorro en sus brazos. -MinMin, mira, papá está aquí.

El Alfa dudó, mas sí se acercó. BeomGyu no dudó ni un segundo en dejar al menor en brazos de su padre. La manera adorable en la que SeungMin se abrazó a su papá y buscó su aroma en la glándula de su cuello removió cada ápice paternal en el Omega.

Con un gran suspiro cansado y rendido, BeomGyu abrió la cama ridículamente grande del menor para la familia Kang. Una vez los arropó a ambos, negándose a ver nada más que las acciones de sus manos, se dijo a sí mismo que debía irse. Él no era nadie allí.

Las sábanas se movieron, una gran y varonil mano se envolvió en su muñeca pequeña. Al elevar la vista pudo ver el arrepentimiento en TaeHyun, siendo confirmado cuando le pidió con un rápido movimiento de ojos que se tumbara con ellos en la cama.

Con la furia sumergida bajo su piel, callada y siendo así más peligrosa que si la gritaba a los cuatro vientos, BeomGyu se tumbó a la espalda de SeungMin siendo este el divisor de los mayores. El cachorro seguía escondido, esta vez en el pecho de su padre, dejando que ambos adultos se vieran de frente al estar apoyados en las almohadas. La tenue luz de la mesita de noche dejaba ver el cansancio en las ojeras de Kang, lo mismo pero por otros motivos en BeomGyu.

-No soy un niño, TaeHyun. -Escupió al fin BeomGyu, grava rasgada su tono de voz mostrando su enfado contenido.

-Lo sé. -Murmuró. -Joder, lo sé. -Cerró sus ojos con fuerza antes de conectar su mirar con el del Omega. -Esto va a acabar conmigo.

-Hagámoslo, veamos lo que podemos ser. -Propuso inocente, sincero, esperanzado con acabar con el tira y afloja entre ellos. -Solo te pido una cosa. -Su mano libre, de estar bajo la almohada, se coló entre el estómago de TaeHyun y el pequeño pecho de SeungMin para, así, darle un pequeño cariño al menor. -Sea lo que sea, seamos lo que seamos, no me alejes de SeungMin.

El jefe de mi sobrina (TaeGyu ~ Kang TaeHyun y Choi BeomGyu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora