Cap 39

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POV Catra

Mis padres y los generales de alto rango estaban vueltos locos, un enorme número de cruceros de batalla Eternos estaban trayendo grandes batallones de guerra, caballería, lanceros, infantería, arqueros, cañones, pistolas, rifles, metralletas y armas pesadas que no logré reconocer, estábamos siendo invadidos y no podíamos hacer nada para evitarlo por ahora, la barrera de fuego que mi tonta esposa había creado aún ardía con intensidad, separando al enemigo de nosotros y los ejércitos de los clanes no alcanzarían a llegar

-¡¡CATRA!!

-... ¿Que? - Me había mantenido ensimismada 

-¿Que piensas? - Preguntó mi papá con voz suave

-No sé... No... Hagan lo que quiera

-Tal vez la princesa deba tomar un descanso - Opinó uno de los guardias y tenía razón

Me levanté y salí, de la sala, realmente no podía concentrarme en otra cosa, más que en el grupo de magos que se mantenían rodeando a mi esposa, quién lentamente era reducida y aprisionada en algo que parecía ser una esfera

Los guardias que custodiaban mi habitación estaban en el piso, inconscientes, mis hijos estaban dentro, saqué mi espada y abrí la puerta lentamente, esperando no encontrarme con una espeluznante escena, pero escuché las voces de mis cachorros, no parecían pedir ayuda ni se encontraban asustados

-Entra, Catra

Esa voz y ese aroma... ¿Mi suegro? Mi corazón comenzó a latir con rapidez con tan solo recordar por qué Adora no le presentó a su padre, sus cachorros, se los comería, así que tomé valor y entré cerrando la puerta a mi espalda

Un hombre muy apuesto con ropas extrañas, pero elegantes y una cadena de oro en su cuello jugaba con mis cachorros en el sofá con unas esferitas plateadas que hacían un ruido extraño pero agradable al moverlas y en mi cama, la niñera sumergida en un profundo sueño - Buena tarde

-¿Crees que es buena? - Preguntó con frialdad

-No, realmente no, solo fue cortesía  - Aquella aura dominante y poderosa aún podía sentirse, aunque tuviera esa forma indefensa

De  la nada, Finnick se lanzó en contra de su abuelo a modo de juego y le mordió la oreja y me alisté para atacar en el caso de que aquel dragón se molestara e intentara acabar con mi hijo, sin embargo, él solo sonrió y quitó a su nieto, Fred sacó un pequeño ratón medio muerto debajo de la alfombra y se lo dio, devorándolo enseguida mientras Liz se dejaba rascar detrás de las orejitas - Son maravillosos en verdad... Pero acércate, no voy a comerte - Caminó hasta el balcón

Decidí confiar en él, pero si me come, espero hacerle daño y que su estómago no esté sano por meses

-¿Que hace aquí? 

-Mi hija está siendo aprisionada por 50 magos de Trolla ¿Dónde más podría estar?

-No sé, la última vez que sucedió ¿Donde estaba usted? Además, son 48 magos, derribamos a 2

Él golpeó con fuerza la baranda - ELLA ESCAPÓ DE MÍ... Se aseguró de que no supiera donde estaba, pero esta vez, pagarán por su ofensa, sin embargo, no puedo contra 50 magos, sustituyeron a los caídos obviamente

-No eres tan poderoso entonces

El me miró con soberbia y ganas de tragarme viva - Trolla ha cazado a mi especie durante eones, en el cual han aprisionado a 6 dragones, así de la misma manera que intentan aprisionar a Leviatán, fácilmente puedo aniquilarlos, pero planeo hacerlos sufrir por sus ofensas

-¿Por qué ella no...?

-PORQUE SOLO ES UNA NIÑA... Si comparamos edades, ella apenas tendría si acaso 12 años, pero es fuerte, si no han podido completar el conjuro, es porque ella se resiste ¿A caso no te has preguntado porque esa pared de fuego continúa?

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