M de Meliodas

13. Estrés + Frustración = Meliodas.

13. Estrés + Frustración = Meliodas.
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Estrés es una palabra, Meliodas la definición.

Y es que a Meliodas le pareció gracioso hacer dos cursos a la vez que hacía una carrera y tenía un trabajo de medio tiempo, creyó que sería divertido, que lograría mantener los tiempos en orden, en su momento se sintió todo una mente maestra cuando lo decidió, y al principio fue así, sumamente fácil; Solo era levantarse y dejar los desayunos de sus hermanos listos, cada curso lo veía una vez a la semana y tenía clases en la universidad solo tres días presenciales y los demás virtuales, y su trabajo era por las noches, así que todo iba bien.

Iba.

A Meliodas se le había olvidado que podía tener un exceso de tareas que se le acumularian y se volverían todo un dolor de cabeza, y en el trabajo no podía estudiar, el trabajaba en un bar, por lo que tiempo no tenía, debía estar al cien con lo que estaba haciendo o sería despedido y no quería eso.

Ahora, sentado en el borde del techo del gran edificio que era su universidad, Meliodas estaba pensando en lo muy tentadora que era la idea de lanzarse de allí. No tareas, no trabajo, no cansancio, simplemente descendiendo del mundo terrenal hacia los cielos. Tal vez allí si pueda relajarse, no como ahora, que incluso sentado allí queriendo admirar el hermoso atardecer que se estaba presentando tenía que estudiar para el examen que tendría al día siguiente.

Miró hacia abajo, intentando calcular cuanto le dolería la caída.

—O muero ahora, o muero el día de mañana de un ataque al corazón de tanto de estrés.

Si la llamada de Estarrosa hubiera entrado unos quince segundos después, ya Meliodas se habría lanzado, pero antes de que realmente lo hiciera entró la llamada y tuvo que atender.

—Si es para decirme que incendiaron la casa más les vale desaparecer o les voy a cortar la cabeza a ambos con una cuchara oxidada.

—Ok, nos vemos en dieciséis años.

Meliodas quizo poder arrancarse el mismo la cabeza con una cuchara cuando lo escuchó colgar, y se hubiera lanzado del tejado en ese mismo momento si no supiera que entonces sus padres lo iban a revivir solo para reparar los gastos y luego volverlo a regresar a la tumba vivo.

...

Él de verdad había creído que su hermano estaba exagerando cuando le colgó, hasta que vio a los bomberos y a la policía frente a su casa ahora de color negro. Para su desgracia ambos hermanos estaba sanos y salvos, al menos habría deseado que se les quemara el cabello para que que no volvieran a cometer la estupidez que sea que hayan cometido. Y Estarrosa y Zeldris supieron qué hubieran estado mejor de haber quedado atrapados en el incendio cuando vieron a su hermano mayor con sus ojeras marcadas, los cuadernos bajo el brazos y la mirada furiosa ir hacia ellos.

—¿Se puede saber cómo carajos lograron quemar la casa?

—En nuestra defensa —Habló Zeldris—, solo encendimos la estufa para calentar el almuerzo.

Cada uno se llevó un golpe en la cabeza con el cuaderno.

—Ahora nuestros padres nos van a matar a los tres —Se quejó mientras los otros dos bajaban la cabeza, osea la verdad ninguno se arrepentía, pero debían hacer como si sí—. El primero en morir seré yo, y ya no sé si es premio o castigo.

—¿Premio o premio? —Se burlo Estarrosa, hasta que Meliodas lo fulmino con la mirada— Okay, entiendo, solo tú tienes derecho a bromear sobre la situación justo ahora.

Después de despedir a la policía y a los bomberos, los tres se quedaron dentro de la casa, en la oscuridad, sentados en el suelo, pensando en que podían hacer, qué era más viable: ¿Huir a Latam y llevar una nueva vida, o decir la verdad a sus padres? Meliodas sabía que debían decir la verdad, Estarrosa ya estaba pensando en alguien que le podía conseguir documentos falsos para escapar y Zeldris estaba pensando en si podrían dejar la casa como estaba antes de que sus padres llegarán en media hora.

Meliodas se estaba arrepintiendo de no haber saltado cuando pudo del edificio.

Sobre todo cuando tres de sus profesores de la carrera pasaron por los grupos más tarea para entregar esa semana y su jefe del bar le escribió exigiendo su presencia en el trabajo porque habían muchas personas y necesitaba de su ayuda. Y creyó que nada podía ir peor hasta que sus padres le avisaron que llegaban en diez minutos.

La suerte lo perseguía, pero él era más rápido.

Estrés, frustración, depresión, cansancio. Meliodas era todo eso hecho en una persona en ese momento.

¿Lo peor? A penas era lunes, ¿Qué le esperaría para el resto de la semana?

*
Te entiendo Meliodas, yo también pensé que sería capaz de sobrellevar un curso y una carrera al mismo tiempo kskjsjs pero aquí vamos, dándolo todo, por que si se puede :D

Algo corto, pero divertido, porque se me ocurrió al momento y decidí subirlo.

Hace unos días estaba frustrada para escribir, ya tenía los capítulos que iba subir en otro fanfic y estaba adelantando otros, pero de repente voy saliendo de la uni y se me apagó el teléfono y cuando al fin una amiga lo logró encender me había eliminado un par de aplicaciones, entre ellas la que uso para escribir, por suerte cuando la volví a descargar mágicamente estaba todo allí, por desgracia no lo nuevo que había escrito y eso me frustró 🫠

Pero aquí estoy, dándolo todo para reescribir lo que perdí, quiero actualizar al menos una vez al mes.

Por cierto les tengo otra noticia.

LittleStar.