Capítulo 13|Fuerte ventisca.

2.7K 333 91
                                    

13

Era alrededor de la tres de la madrugada, Jungkook pudo deducirlo por la oscuridad que rodeaba el exterior.

Luego de que el alfa lo castigara de aquella manera tan cruel y horrible, Jungkook no lograba conciliar el sueño. Su entrada seguía húmeda, caliente y necesitada, Taehyung fue sumamente cruel al provocar tales reacciones en su cuerpo y no permitirle finalizar su liberación.

Su cuerpo se sentía caliente, su pecho seguía subiendo y bajando con rapidez, el espeso aroma del alfa que rondaba por cada rincón de la habitación empeoraba su estado.

Un gemido estrangulado escapó de sus labios.

La necesidad de ser llenado era inigualable, maldijo internamente los instintos primitivos que comenzaban a dominarlo, era absurdo sentir tal deseo por un alfa tan despreciable como ese... Pero, sentía tan inútil el intentar controlarlo, el luchar contra su lobo libidinoso era imposible, lo confirmó cuando sintió cada fibra de su cuerpo comenzar a quemar las sabanas debajo de su cuerpo. —No, Helios, por favor, ahora no. —Suplicó en un murmulloa su lobo, pero fue en vano.

Sus manos ardientes siguieron quemando las sábanas, con las pocas fuerzas que recolectó se arrastró hasta caer de bruces al suelo.

El fuerte rugir de las ventanas de su balcón captaron su atención, levantó su mirada percatándose de la fuerte ventisca que había en el exterior, con pocas fuerzas se levantó del suelo, completamente sudado y jadeante caminó hacia las puertas de sus aposentos, recordaba que Taehyung le había pedido a los guardias que custodiaban sus aposentos que se retiraran por hoy. Por lo tanto, logró salir de sus aposentos sin ojos espectantes que pudiesen detallar aquel brillo fogoso que destellaba de su cuerpo. Sus pasos quemaban el suelo que pisaba, su mano se vio envuelta en una llama ardiente como el sol, el pánico comenzaba a asaltarlo.

Necesitaba llegar afuera antes de perder el control por completo de su lobo.

El jardín trasero se sentía sumamente lejos a pesar de recordarlo mucho más cerca de sus aposentos, el camino se hacia sumamente eterno a sus ojos.

Cuando finalmente tocó el césped mojado del jardín soltó un suspiro lleno de alivio, las frías gotas de la lluvia bañaron su fogoso cuerpo al instante. Acariciaban cada fibra de su ser con gentileza a la luz de la luna llena, sus dorados ojos la miraron con fijeza mientras en sus labios se dibujaba una gentil sonrisa, Jungkook pudo jurar que era la mejor sensación del mundo.

Estaba tan inmerso en su alivio y relajación que ni el fuerte tirón en su brazo logro sacarlo de su trance.

—Jungkook, ¿Que haces... Aquí? —La última palabra salió en un murmullo lleno de desconcierto por parte de Hwasa. Repentinamente la mano que reposaba en el brazo del pelinegro comenzó a arder, inmediatamente la castaña la alejó soltando un pequeño quejido. —Pero, que... —El desconcierto crecía conforme sus ojos cafés miraban los dorados del contrario.

Hwasa tragó duramente saliva, esto no era normal.

Un extraño escalofrío recorrió su espina dorsal del pelinegro obligándolo a darse vuelta y mirar fijamente hacia el balcón del emperador. Sintiendo su respiración detenerse al toparse con un par de ojos dorados destellantes que lo observaban con intensidad desde dicho lugar.

La sonrisa en su rostro se extendió, estiró su brazo hacia el alfa y una pequeña llama se encendió en la palma de su mano.

—Mi luna. —Murmuró el omega.

•• ╬══════• •✠• ♛ •✠ • •═════╬

El alfa se sentó repentinamente en la cama mientras transpiraba debido a aquel extraño sueño. Miró cada rincón de la habitación como si buscará algo o quizás a alguien, rápidamente se levantó de su cama, se colocó su bata bordada y sin importarle su desaliñada apariencia se dirigió directo a los aposentos de aquel omega.

Se ganó algunas miradas curiosas, pues era sumamente extraño ver a su emperador en tal estado.

Sin embargo, el alfa estaba tan absorto en el familiar cosquilleo en su pecho que ignoraba su alrededor, ese cosquilleo lo inquietaba.

Aceleró su paso, siendo seguido por sus guardias.

Al llegar a su destino abrió las puertas de aquellos aposentos de par en par, encontrándose con el omega de cabellera pelinegra sentado frente a su tocador mientras era peinado por Hwasa.

Sus ojos y los del omega se conectaron a través del espejo. Fueron largos minutos en los que ambos se observaron mutuamente en silencio.

El cosquilleo en su pecho creció, y una extraña e inquietante sensación se apoderó de su cuerpo.

¿Siempre fueron tan profundos aquellos ojos negros? Se preguntó.

—Todos... ¡Largo! —Ordenó. Inmediatamente todos en la habitación, exceptúando a Jungkook, salieron despavoridos debido al escalofriante tono que empleó el alfa de cabellos dorados.

El omega estaba sumamente sereno, lentamente se levantó de su asiento y se acercó al alfa. —¿Sucede algo, su majestad?

La respiración del alfa era agitada, su compostura se encontraba agrietada por aquel extraño sueño.

Sintió una cálida caricia en su brazo y pudo jurar que aquel omega jugaba con su lucidez. —¿Qué estás haciendo? —Casi balbuceó consternado.

La caricia de Jungkook no se detuvo por aquellas confusas palabras. —Estás liberando muchas feromonas, por favor, tranquilízate. —El ceño del alfa se frunció levemente.

De un rápido movimiento se alejó de aquel cálido tacto. —Alejate de mí. —Aquellas palabras fueron escupidas con cierto asco y podría decirse que hasta tenían una pizca de miedo impregnado en ellas. —El alfa retrocedió y abandonó la habitación.

Jungkook miró la mano con la que lo había acariciado, una extraña punzada se instaló en su pecho al recordar aquellas palabras.

¿Acaso el alfa ya sabía que era un omega defectuoso?

—Jungkook. —La suave voz de Hwasa captó su atención.

—¿Si?

—¿Por qué estás llorando?

La pregunta lo tomó por sorpresa, inmediatamente llevó sus manos a sus mejillas topándose con la humedad de sus propias lágrimas. —N-no lo sé. —Un pequeño murmullo inseguro que logro que la omega castaña lo rodeará con sus brazos.

Él no se sintió mejor con ese abrazo, al contrario, sentía que había perdido algo importante solo por un par de palabras de aquel odioso alfa.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 20 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

The Royals Kim || TaekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora