Dos vidas diferentes-Cheryl y Toni

T2 Cap3

Toni golpeó la puerta de Cheryl con determinación, esperando que su ex novia estuviera dispuesta a hablar. Cuando Cheryl abrió la puerta, la sorpresa se reflejó en su rostro, pero aun así, la invitó a entrar.

Cheryl: [sorprendida] Toni, ¿qué haces aquí?

Toni: [seria] Necesitamos hablar, Cheryl.

Cheryl: [asintiendo y dejándola entrar] Está bien, pasa.

Una vez dentro, Toni no pudo contener su enfado.

Toni: [frunciendo el ceño] ¿Por qué no me contaste sobre Reggie?

Cheryl: [defendiéndose] Tenía miedo de que te metieras en problemas por mi culpa. No quería que te enfrentaras a él y terminaras lastimada.

Toni: [exasperada] Pero Cheryl, ¿cómo esperabas que no me enterara? Estás en peligro, y necesito saberlo para poder ayudarte.

Cheryl: [bajando la mirada] Lo sé, lo siento. Solo... no quería arrastrarte a esto.

Toni: [frustrada] No puedes manejarlo todo sola, Cheryl. Necesitas dejarme estar ahí para ti.

Cheryl: [mirándola a los ojos] Lo entiendo, lo siento mucho, Toni.

La discusión entre Cheryl y Toni continuaba, pero a pesar del enojo de Toni, había un atisbo de preocupación y afecto en sus palabras.

Toni: [aún frustrada] Cheryl, entiende que no puedo simplemente ignorar lo que está pasando. Necesito estar ahí para ti, incluso si eso significa enfrentarme a Reggie.

Cheryl: [mirándola con gratitud] Lo sé, Toni. Y realmente lo aprecio. No sabes cuánto significa para mí.

Toni: [suspirando] Solo quiero que entiendas que te importo, Cheryl. A pesar de todo lo que ha pasado entre nosotros, siempre estaré aquí para ti.

Cheryl: [con sinceridad] Y yo para ti, Toni. Nunca te he olvidado, nunca he dejado de quererte.

Las palabras de Cheryl sorprendieron a Toni, pero también le trajeron un cierto alivio. A pesar de su enfado y frustración, todavía había amor entre ellas. Con ese entendimiento, las tensiones comenzaron a disiparse, y el deseo se encendió.

Cheryl: [acercándose a Toni] ¿Puedo demostrarte cuánto te necesito ahora mismo?

Toni: [con una sonrisa] Por supuesto, Cheryl.

Ambas se dirigieron al baño, donde la pasión y el deseo se liberaron en una explosión de intimidad. En ese momento, las preocupaciones y los problemas se desvanecieron, dejando solo el amor y la conexión entre Cheryl y Toni.

Cheryl cerró la puerta detrás de ellas con un golpe suave, su corazón latiendo con fuerza en su pecho. La tensión en el aire era palpable mientras se miraban fijamente, sus ojos oscuros centelleando con deseo. Sin decir una palabra, Toni se acercó a Cheryl, su cuerpo vibrando con anticipación.

Las manos de Toni buscaron la piel de Cheryl con ansias, deslizándose por su espalda con una urgencia desenfrenada. Cheryl dejó escapar un suspiro de placer cuando los labios de Toni encontraron los suyos en un beso ardiente y hambriento. Se fundieron en una danza apasionada, explorando cada rincón y cada recoveco con una intensidad desbordante.
El calor entre ellas se volvió abrasador mientras se despojaban de sus ropas con impaciencia, dejando al descubierto sus cuerpos desnudos y ansiosos. Cada caricia, cada roce, encendía una chispa de deseo más intensa que la anterior. Las manos de Cheryl se deslizaron por los músculos de Toni con un toque experto, mientras que los labios de Toni trazaban un sendero de besos abrasadores por el cuello y los hombros de Cheryl.
Cheryl: ¡Oh, Toni, sí! ¡Más fuerte!

Toni: Cheryl, eres todo para mí. Te deseo tanto...

Cheryl: ¡Sí, así es! ¡Hazme tuya!

Toni: Cheryl, eres mi todo. No puedo resistirme a ti...

El agua caliente de la ducha caía sobre ellas, envolviéndolas en un velo de vapor y sensación. Se movían juntas con una sincronización perfecta, explorando los límites del placer y la pasión. Los gemidos y susurros llenaban el pequeño espacio, mezclándose con el sonido del agua que caía en cascada.

Cada caricia, cada beso, llevaba a Cheryl y Toni más cerca del borde, hasta que finalmente sucumbieron al éxtasis juntas, entregándose completamente una a la otra en un acto de amor y conexión pura.

Cuando finalmente recuperaron el aliento, se quedaron abrazadas en la cálida agua, sintiendo la paz y la plenitud que solo el amor verdadero puede traer.

Más tarde,Toni fue a trabajar al White Whyrm y Cheryl quiso ir a verla para estar con ella aunque fuera un rato más,pero en el camino se encontró con alguien.

Reggie se encuentra con Cheryl en un callejón oscuro detrás del White Wyrm. Está furioso y su mirada desborda rabia contenida.

Cheryl lo mira con una mezcla de nerviosismo y desafío, manteniendo la compostura a pesar de la tensión palpable en el aire.

Reggie: ¿Qué demonios crees que estás haciendo, Cheryl?

Cheryl: ¿Qué quieres decir, Reggie? No tengo tiempo para tus juegos.

Reggie se acerca, haciendo que Cheryl retroceda instintivamente, pero ella se mantiene firme.

Reggie: No finjas conmigo. Sé lo que estás tramando con ese serpiente. No me hagas recordarte quién soy.

Cheryl: (frunciendo el ceño) No tienes ningún derecho a decirme qué hacer, Reggie. Y no te atrevas a amenazarme.

Reggie: (sacando algo de su chaqueta) Creo que necesitas un recordatorio de quién tiene el control aquí.

Cheryl: (alarmada) Reggie, detente. Esto no es necesario.

Reggie: (con una sonrisa despiadada) Oh, pero lo es, Cheryl. Es hora de que aprendas quién manda en Riverdale.

Antes de que Cheryl pueda reaccionar, Reggie saca un objeto metálico reluciente y lo sostiene amenazadoramente frente a ella.

Toni sale al callejón del White Whyrm con una bolsa de basura en la mano, inconsciente de lo que le espera en la oscuridad. Cuando la luz parpadeante revela la figura de Reggie, su corazón se acelera con la advertencia de peligro.

Toni: (alerta) ¿Qué estás haciendo aquí, Reggie?

Reggie se vuelve hacia ella, con una sonrisa maliciosa en el rostro, mientras Cheryl permanece detrás de él, con la mirada llena de furia y preocupación.

Reggie: (burlón) Solo estoy teniendo una pequeña charla con mi chica aquí.

Toni frunce el ceño, preparada para intervenir, pero antes de que pueda hacer algo, Reggie da un paso adelante, sacando un cuchillo oxidado de su chaqueta.

Reggie: (con malicia) Y parece que a Cheryl le gustaría enseñarme algunos movimientos.

Toni tensa los músculos, lista para defenderse, cuando el destello del metal del cuchillo brilla en el aire. Cheryl mira con horror, incapaz de detener lo que está a punto de suceder.

Cheryl: (desesperada) ¡Reggie, no!

Pero es demasiado tarde. El cuchillo corta el aire y se hunde en el costado de Toni, quien grita de dolor mientras cae al suelo.

Toni: (gritando de dolor) ¡Cheryl!

Cheryl retrocede, horrorizada por lo que ha sucedido, mientras Reggie aprovecha la oportunidad para escapar de la escena. Toni se agarra la herida, sintiendo cómo la sangre empapa sus dedos temblorosos.

Cheryl: (angustiada) ¡Toni, lo siento! ¡Nunca quise que esto pasara!