Capitulo 19:Errores

14 2 0
                                    

En el café Pop's, la tensión entre Betty y Veronica se eleva a un nivel insoportable mientras discuten sobre el beso que compartieron.

Betty: (con voz temblorosa) "No puedo creer que lo estés minimizando como si fuera solo un error, Veronica. Fue una traición, y tú lo sabes."

Veronica: (frunciendo el ceño) "Lo siento, Betty, pero no puedes negar que fue un impulso, un momento de debilidad. No significa nada más que eso."

Betty: (levantando la voz) "¡No me digas lo que significa! ¡Lo siento, pero no puedes decidir cómo me siento al respecto!"

La discusión se intensifica rápidamente, con ambas chicas intercambiando palabras afiladas y miradas llenas de furia. Cada acusación golpea como un puñal, haciendo añicos la confianza y la amistad que una vez compartieron.

Betty: (con voz temblorosa) "¿Cómo puedes ser tan egoísta, Veronica? ¡No entiendes cómo me siento!"

Veronica: (frunciendo el ceño) "¡No seas hipócrita, Betty! ¡Tú también estás confundida, pero prefieres echarme la culpa a mí!"

La discusión se prolonga durante horas, con Betty y Veronica lanzándose acusaciones, reproches y lágrimas. La tensión en el aire es palpable, como una cuerda tirante a punto de romperse.

Betty: (con la voz entrecortada) "¡Ya no te reconozco, Veronica! Solíamos ser amigas, ¿qué pasó?"

Veronica: (con voz firme) "Lo que pasó es que estás cegada por tu propio dolor, Betty. No puedes ver más allá de tus propios sentimientos."

Tabitha: (interviniendo una vez más) "¡Basta ya! Las dos necesitan calmarse."

La mirada de Tabitha se desliza entre Betty y Veronica, exasperada por la intensidad del conflicto. A pesar de sus intentos por detener la pelea, las dos chicas continúan discutiendo sin cesar, incapaces de encontrar una solución a su conflicto.

La discusión continúa, cada palabra cortante y cada acusación aumentando la distancia entre ellas. Finalmente, exhaustas y llenas de dolor, Veronica se levanta de la mesa y se marcha del pop's , dejando atrás la tensión no resuelta entre ellas. La distancia entre Betty y Veronica se hace palpable mientras se alejan, cada una sumida en sus propios pensamientos y emociones, sin una solución a la vista.

Betty, con el corazón aún latiendo fuerte por la discusión, se levanta de la mesa y apresura sus pasos para alcanzar a Veronica, quien ya se aleja del café. Con determinación en su mirada, Betty se acerca a su amiga, sintiendo que la conversación aún no ha llegado a su fin.

Betty: (llamando a Veronica) "¡Veronica, espera!"

Veronica se detiene y se gira para enfrentar a Betty, su expresión mezcla de frustración y agotamiento.

Veronica: (suspirando) "¿Qué más quieres, Betty? ¿No es suficiente ya?"

Betty: (con voz firme) "No, no lo es. Necesitamos hablar sobre esto, Veronica. No podemos seguir así."

Veronica: (frunciendo el ceño) "¿Y qué más hay que hablar, Betty? ¡Ya dijimos todo lo que había que decir!"

Betty: (elevando la voz) "¡No, Veronica, todavía no lo hemos resuelto! No puedo simplemente olvidar lo que pasó."

Veronica: (frustrada) "¡Pues yo ya he dicho todo lo que tenía que decir! ¡Lo siento si eso no es suficiente para ti!"

La discusión entre las dos amigas continúa, cada una defendiendo su posición con ferocidad. Las palabras cortantes y los reproches vuelan en el aire, haciendo que la tensión entre ellas crezca con cada segundo que pasa.

Betty: (con la mandíbula tensa) "¡No puedo creer que seas tan terca, Veronica! ¿Por qué no puedes entender cómo me siento?"

Veronica: (con los puños apretados) "¡Y no puedo creer que seas tan insistente, Betty! ¡No puedo cambiar lo que pasó!"

La tensión entre Betty y Veronica alcanza su punto máximo mientras continúan su discusión, ambas heridas por la revelación de sus sentimientos y las barreras que las impiden expresarlos completamente.

Betty: (con la voz temblorosa) "Veronica, sé que esto es difícil, pero tenemos que hablar sobre lo que realmente está sucediendo entre nosotras."

Veronica: (frunciendo el ceño) "¿Y qué es lo que está sucediendo, Betty? ¿Quieres que admita que me siento confundida? ¿Que no puedo dejar de pensar en ti incluso cuando estoy con Archie?"

Betty: (tragando saliva) "Veronica, lo siento, pero sí, necesitamos enfrentar esto. No podemos seguir evitando lo evidente."

Veronica: (con los ojos brillantes) "¿Y qué hay de ti, Betty? ¿Vas a admitir que también sientes algo por mí? ¿Que te duele verme con Archie porque secretamente deseas estar conmigo?"

Betty: (bajando la mirada) "Lo admito, Veronica. Me duele verte con Archie, pero no solo por mí, sino por ti también. Sé que no puedes ser honesta con él sobre tus sentimientos hacia mí, y eso te está haciendo daño."

La confesión de Betty corta el aire como un cuchillo afilado, dejando a ambas chicas vulnerables y expuestas. El silencio pesado se cierne sobre ellas, lleno de emociones no expresadas y verdades incómodas.

Veronica: (susurrando) "No puedo... no puedo hacerlo, Betty. No puedo lastimar a Archie de esa manera."

Betty: (con tristeza en sus ojos) "Lo entiendo, Veronica, pero ¿cuánto tiempo más podemos seguir así? No podemos ignorar lo que sentimos para siempre."

La conversación se estanca en un impasse doloroso, ninguna de las dos seguras de cómo seguir adelante. La tensión entre ellas es palpable, cargada con la angustia de lo que podría haber sido y el miedo a lo desconocido.

El día siguiente en Riverdale High llega cargado de una tensión palpable que pesa sobre los hombros de cada uno de los amigos. En los pasillos, se percibe un silencio incómodo y una distancia palpable entre ellos. Jughead, con la mandíbula tensa y la mirada fija en el suelo, evita cualquier contacto visual con Veronica y Betty, su expresión reflejando una mezcla de ira y decepción.

Archie, por su parte, camina con determinación pero con la mirada perdida, su mente atormentada por las revelaciones de esa noche. Evita cruzarse con las chicas, su corazón lleno de confusión y dolor por la traición percibida de Veronica y la revelación de los sentimientos de Betty.

Las chicas, por otro lado, mantienen una distancia fría entre ellas, su comunicación reducida a miradas esquivas y susurros cortantes. Cada una sumida en sus propios pensamientos y emociones, incapaces de abordar la complejidad de la situación que las rodea.

En el aula, el ambiente es aún más tenso, con el peso del silencio aplastando cualquier intento de conversación. Los amigos, que solían compartir risas y confidencias, ahora se sientan en silencio, separados por una brecha invisible de desconfianza y dolor.

A medida que avanza el día, la sensación de incomodidad persiste, envolviendo a Riverdale High en una atmósfera sombría y cargada de emociones no resueltas. Los secretos y las revelaciones del pasado han dejado su huella en el grupo de amigos, y nadie sabe cuál será el siguiente paso en esta saga de dolor y traición.

Dos vidas diferentes-Cheryl y Toni Donde viven las historias. Descúbrelo ahora