Dos vidas diferentes-Cheryl y Toni

T2 Cap4

Con el dolor agudo palpitando en su costado y la sangre manchando su ropa, Toni lucha por mantenerse consciente. Mientras Cheryl se arrodilla a su lado, los ojos llenos de lágrimas y el corazón lleno de remordimiento, Toni siente un torbellino de emociones arrastrándola.

Toni: (con voz entrecortada por el dolor) Cheryl...

Cheryl levanta la mirada, sus ojos llenos de angustia al ver el estado de Toni.

Cheryl: (angustiada) Toni, lo siento tanto...

Toni lucha por mantenerse despierta, sabiendo que cada segundo cuenta. Con un esfuerzo, toma la mano de Cheryl en la suya, sintiendo su calor y su apoyo en medio de la oscuridad.

Toni: (con determinación) Escúchame, Cheryl... No sé si voy a salir de esto.

Cheryl se tensa, negando con la cabeza mientras las lágrimas ruedan por sus mejillas.

Cheryl: (desesperada) No digas eso, Toni... Por favor, no...

Toni aprieta su mano con fuerza, tratando de transmitirle su serenidad.

Toni: (con voz suave) Solo necesito que sepas... que siempre he querido formar una familia contigo. Si no puedo estar aquí para verlo... solo quiero que seas feliz, Cheryl. Con o sin mí.

Cheryl se aferra a sus palabras, sintiendo el peso de su amor y su sacrificio en cada sílaba.

Cheryl: (entre sollozos) No... No puedo perderte, Toni...

Toni sonríe débilmente, luchando contra la oscuridad que amenaza con envolverla.

Toni: (con voz temblorosa) Siempre estaré contigo, Cheryl... Siempre...

Con esas palabras, Toni cierra los ojos, dejando que la oscuridad la envuelva mientras Cheryl llora desconsoladamente a su lado, sin saber si alguna vez volverá a abrirlos.

Cheryl llega al hospital con Toni en brazos, el corazón latiéndole con fuerza en el pecho mientras grita pidiendo ayuda. Los médicos y enfermeras acuden de inmediato, llevándola rápidamente a una camilla y comenzando a evaluar su estado.

Médico: (tranquilizador) ¿Qué pasó?

Cheryl: (agitada) Fue Reggie... Lo siento, no sé cómo...

El médico asiente comprensivamente, mientras el equipo médico se apresura a estabilizar a Toni. Cheryl se queda de pie al lado de la camilla, observando con ansiedad cada movimiento, cada indicio de que Toni está siendo atendida.

Cheryl se encuentra sola en la sala de espera, el tiempo parece haberse detenido mientras espera ansiosamente noticias sobre la condición de Toni. Sus pensamientos están llenos de temor y angustia, incapaz de apartar de su mente la posibilidad de perder a la persona que ama.

Finalmente, el médico sale de la sala de operaciones, su expresión seria y preocupada envía un escalofrío por la espalda de Cheryl. Se levanta de un salto de su asiento, sus manos temblando ligeramente mientras espera desesperadamente cualquier indicio de esperanza.

Médico: (serio) Cheryl, necesito hablar contigo.

Cheryl siente un nudo en la garganta mientras se acerca al médico, su corazón latiendo con fuerza en su pecho.

Cheryl: (temblorosa) ¿Qué pasa con Toni? ¿Cómo está?

El médico exhala lentamente, preparándose para darle las noticias difíciles.

Médico: (serio) La cirugía fue complicada y, lamentablemente, hubo complicaciones. La condición de Toni es crítica y no podemos garantizar su recuperación. Hicimos todo lo posible, pero...

Las palabras del médico golpean a Cheryl como un puñetazo en el estómago. Su mundo se desmorona ante ella mientras lucha por asimilar la gravedad de la situación. Las lágrimas amenazan con desbordarse de sus ojos, pero se obliga a mantener la compostura.

Cheryl: (con voz temblorosa) ¿Qué significa eso? ¿Estás diciendo que...?

Médico: (compasivo) Estamos haciendo todo lo posible por ella, Cheryl. Pero debes prepararte para lo peor.

Cheryl se siente abrumada por una oleada de desesperación y tristeza. Su pecho se aprieta con dolor mientras lucha por contener el torrente de emociones que amenaza con consumirla por completo.

Cheryl: (en un susurro) No puedo perderla... no puedo...

El médico la rodea con compasión, ofreciendo un apoyo silencioso en su momento de desesperación. Cheryl se aferra a él con fuerza, encontrando un pequeño consuelo en el abrazo reconfortante mientras enfrenta la posibilidad abrumadora de perder a la persona que más ama en el mundo.

Cheryl marca frenéticamente el número de Betty, con las manos temblorosas y el corazón latiendo con fuerza en su pecho. Después de unos segundos que le parecen una eternidad, Betty finalmente responde al teléfono.

Cheryl: (con voz temblorosa) ¡Betty! Necesito que vengas al hospital, es sobre Toni...

Betty puede escuchar la angustia en la voz de Cheryl y se pone seria de inmediato.

Betty: (preocupada) ¿Qué ha pasado? ¿Está bien Toni?

Cheryl: (con la voz entrecortada) No... no está bien. Ha habido complicaciones en la cirugía y... el médico dice que podría no sobrevivir.

Betty siente un nudo en el estómago al escuchar las palabras de Cheryl.

Betty: (consternada) Estaré allí enseguida. ¿Quieres que avise a Veronica?

Cheryl asiente, aunque Betty no puede verla a través del teléfono.

Cheryl: (con voz temblorosa) Sí, por favor. Necesitamos llamar a los familiares de Toni... por si acaso.

Betty: (compasiva) Lo haré. Intenta mantener la calma, Cheryl. Estaremos contigo en cuanto lleguemos.

Después de colgar, Cheryl marca el número de Veronica, tratando de mantener la compostura mientras repite la trágica noticia.

Cheryl: (con voz temblorosa) Veronica, necesito que vengas al hospital. Es sobre Toni...

El tono de Cheryl revela toda la angustia que siente en ese momento, y Veronica promete ir de inmediato para apoyar a su amiga en este momento de desesperación.

Betty y Veronica llegan al hospital con prisa, ansiosas por ver a Cheryl y obtener más información sobre el estado de Toni. Al entrar en la sala de espera, encuentran a Cheryl sentada en una silla, con los ojos enrojecidos por el llanto y la mirada perdida en el vacío. Se apresuran hacia ella y la abrazan con fuerza, sintiendo su angustia y su dolor.

Betty: (con voz suave) Cheryl, estamos aquí. ¿Cómo está Toni?

Cheryl se aparta del abrazo y se lleva una mano temblorosa a los labios, tratando de contener el llanto.

Cheryl: (con voz entrecortada) El médico... el médico dijo que las cosas no van bien. Hay complicaciones, y... no están seguros de si sobrevivirá.

Veronica: (con preocupación) Oh, Cheryl... Lo siento mucho.

Las tres se sientan juntas en la sala de espera, compartiendo su preocupación y su miedo por el destino de Toni. Se abrazan en silencio, encontrando consuelo en la presencia de las demás mientras esperan noticias del médico.