Resentimiento - Sakusa Kiyoomi.

05

Podía sentir como sus dedos jugaban con su cabello. Ninguno de los dos había caído rendido aún. Sus cuerpos estaban sudados y exhaustos después de un buen rato de pasión, pero ninguno se había dormido aún. Ella tenía su cabeza recostada en el pecho de el pecho de el, mientras el jugaba con su cabello viendo al techo. 

—"Ya, ¿En qué piensas?" le pregunto al verlo ido. Iwaizumi le miro a los ojos y dejo de jugar con su cabello para pasar su brazos por sobre ella y apegarla más a él.

—"En las posiciones de los soldados en mi próxima misión. Me faltan algunos. La mayoría está de descanso porque la semana pasada ya hubieron misiones que necesito de bastante gente y los demás con otros deberes." explicó. Volviendo a ver el techo, Sadashi podía ver los engranajes de su cerebro maquinando muy rápido y soltó una risita por eso.

—"Yo estoy libre. Puedo ir."

—"¿Estás bromeando? Hace dos días llegaste de una misión de casi un mes, en tres días sale esta. No podras—"

—"Claro que sí."

—"Sadashi, no."

—"Que si, vamos. He estado en misiones peores, en esta todo marchó de acuerdo al plan... O bueno, casi todo. Pero fue un éxito y en tres días habré recuperado fuerzas." le dijo.

—"No creo que sea buena idea irte a los extremos. ¿No tienes deberes pendientes aquí que hacer?"— Iwaizumi le miraba serio, con el entrecejo fruncido.

—"Algunos, pero puedo acabarlos rápido."

Y ahí estaba, esa sonrisa condena vidas. Sadashi era una mujer fuerte y que mayormente mostraba un rostro serio, pero Iwaizumi había estado lo suficiente a su lado en la intimidad que había descubierto un par de rasgos de ella que sorprenderían a cualquiera. El primero, era que tenía una gata blanca llamada Maki —que justo ahora dormía en sus pies— y era, en palabras de ella "su vida". La segunda cosa, era cuando sonreía con malicia. Sus ojos parecían brillar incluso estuviera a oscuras.

Sintió una punzada en su vientre bajo. Su amigo empezaba a despertar de nuevo.

—"Entonces, dime qué si" le dijo Sadashi, subiéndose en su cuerpo con las piernas rodeándolo, las sábanas dejándole ver el cuerpo de ella.

«Esta chica me rechazó.» pensó con cierta pena.

Iwaizumi: 0.

Sadashi: 1.

~•~•~•~•~•~•~•~•~•

—"¿Mm? Nishinoya-san"— se le escapó inconscientemente mientras veía al de baja estatura. Esté, que estaba recargando un arma, se volteo al escuchar su apellido y le sonrió al verla.

—"¡Dashi-san!" exclamó y ella estuvo a nada de sonrojarse ante el tono en que uso el apodo. Le miro con el ceño fruncido.