—Mentira, eso lo hiciste tú no yo, bueno ya me voy, ahí en la noche guapa— Dijo Minji dirigiéndose a su salón.
Hanni aún no comenzaba su clase así que se la pasó platicando, ningún maestro llegó y no hicieron nada lo que restaba de clase. Por otra parte, Minji llegó tarde por estar platicando con Hanni y la regañaron por andar en salones que no debe.
—Bueno al menos no fue tan malo— Habló Minji. —Aja, que te hayan regañado varias veces ¿No es malo?, nonono, estas mal tú—
—Te recuerdo que fue tu culpa por seguir la conversación—
—Que no, aparte mejor ya vamos a acomodar muebles que no hay tiempo—
—No, era mentira eso, ni siquiera vamos a acomodar muebles tonta—
—Ahora ya no te ayudo, menos te doy mi noche, ahí nos vemos luego, chao—
—Que era broma Hanni, perdón—
—Qui eri bromi Hanni, perdin, no, no te perdonó a menos que me des toda la noche hasta que no puedas más, o sea, hasta el amanecer que sino no acepto perdones—
—Ush, aceptó tu trato solo porque quiero ver como sería, así que vamos a mi casa—
Minji agarro la mano de Hanni y la llevo a su casa que estaba cerca de la escuela, no tardaron ni mucho ya que estaba cruzando la calle de el colegio y después doblaron a un callejón.
—Ya, aquí es, entra—
—Me da miedo tu casa, aparte tú callejón esta bien raro—
—Ush, calla y tú solo entra te dije—
Las dos entraron a la casa y Minji subió a su habitación a Hanni. —Te dije que la noche te la iba a dar yo, pero bueno, dale con todo, hasta que te canses— Dijo Hanni dejándose hacer lo que Minji le hacía. —Sisi ya cállate que me desconcentras, aparte yo se que te gusta por eso dices que siga—
—Para que miento pues, si me gusta, pero ni le haces bien, mensa—
—Mensa será OTRA, pero yaya, ahora si lo hago bien pues—
—Yaya, espérate que me duele, aparte con el uniforme, mejor no, préstame ropa y ahí tu dirás si la quieres ensuciar o no—
—No que no lo hacía bien pues, que el uniforme no importa si se ensucia yo lo lavó después y te duermes sin uniforme de todos modos no te va a dar frío, más bien calor—
—Bueno, si lo haces bien pues, bueno pero lo lavas bien, tienes razón mejor me lo quitó ya y así me quedo, tengo hambre—
—Oke, lo aceptaste pues, sisis de una así quédate que te ves mejor que con uniforme puesto, te ves tan... No sé, tan hermosa, esas curvas, a veces me pregunto como es que tengo a la mujer más hermosa que hasta lo hace jodidamente rico, bueno tú siempre tienes hambre, ahorita ya no vas a tener—
—Pues si, ni modo que no, ¿Y tú cómo sabes que lo hago jodidamente rico? Nunca lo has probado, bueno, al menos comeré algo rico—
—No sé, ya lo estoy probando, ¿No qué no? Pues si, obviamente algo demasiado delicioso—
—¿Mucho? QUE TE DIJE QUE TE ESPERES QUE ME DUELE, no mejor sigue, ahora si bésame pues, no nada más te quedes ahí—
—Sí, demasiado, USH, que soy desesperada, aparte te dije que te iba a dar y no consejos, bueno, así me gusta, ahora déjate, ush ya pues ya te beso—
ESTÁS LEYENDO
Dejarlo todo por amor. | Daerin
RomanceChicas de diferentes cursos el cuál no sé conocían hasta que hablaron de una de ellas y de lo guapa que era.