Cuando tomaron la decisión de ser padres, ya sabían que iba a ser un proceso difícil, sin embargo, no creyeron que tanto. Llevaban cerca de dos años intentando, hablando, pasando papeles, cartas, y haciendo un montón de entrevistas para ser aceptado...
La cuestión con su "pequeña" familia es que la mayoría de ellos cumplen en la segunda mitad del año, y con relativa cercanía. Por eso, a apenas un mes del cumpleaños de Namjoon cae el de Jimin, un domingo 13 de octubre.
Al igual que con los anteriores decidieron hacer una pequeña celebración casera, con un pastel hecho en casa y regalitos hechos por cada uno de sus hermanos.
No es una celebración sorpresa, principalmente porque Taehyung soltó la sopa tres días antes del cumpleaños sin poder aguantar más las preguntas de su mellizo, pero al menos sería una celebración en familia.
Querían despertar al cumpleañero con la canción del cumpleaños y el pastel, pero todo salió un poco mal pues el cumpleañero fue el primero en despertar de toda la casa.
Pero igual le cantaron al desayunar con una hermosa torta decorada con pollitos de crema.
Jimin estaba tan emocionado, nunca lo habían visto sonreir tantísimo.
-¿Vamos por los regalos, niños? - preguntó Namjoon, y no dieron respuesta ni Hoseok ni Taehyung antes de salir corriendo. Yoongi, por otro lado, tomó la mano de Jungkook para llevarlo con él a buscar el regalo que habían hecho.
-¡Yo entrego el mío primero! - gritó Taehyung bajando las escaleras, tan rápido que antes de que SeokJin pudiera advertirle, el niño ya se había ido de boca contra el suelo tras el último escalón.
-¡Tae! - gritaron cuatro personas, dos adultos, el cumpleañero y el pelirrojo que también venía bajando.
-¡Estoy bien! - fue la respuesta, tan rápido como se cayó se levantó, agarró de vuelta el regalo en su bolsita y corrió a dárselo a Jimin que lo miraba con preocupación.
-¿Estás bien?
-Estoy bien - afirmó, con una sonrisa, sin embargo Jin tomó la decisión de revisarlo enterito para confirmar. Cuando hubo visto que no había pasado nada y que no nacería más que un pequeño morado en la pierna, lo dejó ser feliz y explicarle a Jimin su regalo - Es... es... ¿Cómo se llamaba, appa?
-Caja Músical
-Una, no, dos, no, espera... - Taehyung empezó a hacer cuentas con sus deditos - ¡Si, una caja, con dos canciones! - explicó, insistiendo para que Jimin abriera la bolsa y sacó la cajita amarilla con un manivel a un lado - Si giras aca - le explico, tomando la mano de su hermano para enseñarle -, va a sonar después - y así fue, se abrió repentinamente sonando una bella y suave canción que había visto bailar al rubio pues la escuchaba en sus clases.
Jimin no dijo palabra, pero sus ojitos brillaron de forma tan hermosa, se quedó ensimismado en la forma en la que un pequeño patito con tutu giraba mientras la canción sonaba. Cuando acabó, no tardó en volverla a girar al menos dos veces más para ver como giraba.
El plan original de SeokJin y Namjoon era ayudar a hacer pequeñas manualidades a sus hijos para regalarle a Jimin, sin embargo, parece que sus pequeños artistas estaban tomando vuelo y salieron con ideas grandes a las que no pudieron decir que no, por ejemplo, aquella caja músical horriblemente difícil de ensamblar.
-¿Puedo darle mi regalo ahora? - pregunto Hoseok, no sabiendo si interrumpir o no.
-¡No! ¡Yo! - interrumpió Jungkook, sin miramientos, empujando su propio regalo al regazo de Jimin para que soltara la caja músical.
Aquel arrebato sorprendió mucho a todos, pero terminó por hacerlos reír. Últimamente el pequeño empezaba a mostrar los dientes, caprichoso y consentido, queriendo tener la atención de todos en todo momento.
-¿Qué es? - preguntó Jimin, sacando una hoja con mucha escarcha de la bolsita con una especie de ¿dibujo? algo amorfo.
-Mimi - señaló Jungkook, como si fuera obvio -, y Koo - señaló otra parte del dibujo.
-Oh, está hermoso, gracias Koo.
Hoseok tomó el siguiente turno, de la bolsa salió una especie de... no sabe, pero de lana, y dos pulseritas de cuentas.
-Umm, está algo raro, en clase de la tarde estamos aprendiendo a tejer, es un gorrito - explico, tratando de mostrarle la forma del gorrito blanco. Era extraño, no estaba muy bien hecho pero le quedaba en la cabeza, el hecho de que le hubiera hecho pulseritas y un gorrito igual lo hizo muy feliz, así que agradeció con una sonrisa.
-Lo mio no es mucho, las manualidades no se me dan mucho - explicó Yoongi - pero dibujar sale mejor, así que... me ayudaron un poco a hacer esto - Le entregó una libreta a su hermano, pero no cualquiera, la portada era un hermoso dibujo de la familia. No era el mejor dibujo pero está muy bien hecho.
-Y nosotros tenemos esto - entrego SeokJin a Jimin, quien sacó de la bolsa algo que lo hizo abrir su boca en grande.
-¡Son los patines que quería! - Y si, gritó, con mucha emoción, pues sus padres habían conseguido unos patines blancos con dos dibujos de patitos que vieron en una vitrina hace días para hielo.
Y fue tan feliz, porque aparte de los regalos todo el día se encargaron de hacerlo feliz.
El mejor cumpleaños del mundo.
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No, no abandone está historia, es que soy universitaria de una universidad en colapso.
Espero les guste, gracias por leer en serio, perdón por lo cortito.
