burdel 𐙚 kookmin.

Extra O5: para siempre

Flashback del casamiento de Jungkook y Jimin.

20 de septiembre.

Luego de meses de preparación en donde Jungkook prácticamente fue vuelto loco por Jimin con respecto a la boda, el día tan esperado había, al fin, llegado.

Demás está decir que por más que su omega lo volviera loco, amaba con locura de igual manera a su chico, pero por momentos trataba de lograr que Jimin bajara el nivel de estrés que conllevaba una fiesta y festejo como lo es un casamiento.

Daehyun ya había cumplido los dos años, y era un terremoto andante. Devoto de sus padres, por supuesto, pero aún así con su personalidad fuerte y protectora, sobre todo para sus dos pequeños hermanos, Junghee y Jungho. Los mellizos tenían ahora poco más de seis meses, tiempo que le tomó a Jimin volver a —su figura— después del embarazo de sus hijo.

No mal interpreten a Jimin, ama con locura a sus hijos y no hay momento en que se arrepienta de tenerlos pero también quiere verse bien para día más importante, el casamiento con su amado esposo Jungkook. Su alfa.

Todo el incidente con Park SeoJoon quedó enterrado ya hace más de dos años ahora, y era un capítulo totalmente cerrado en la vida de Jimin y después de un largo tiempo de terapia, el omega al fin puede mirar hacia adelante, donde sólo están su amado —y pronto a ser esposo— alfa y sus hijo, la luz de sus ojos.

Y Jungkook siendo Jungkook, quería darle lo mejor a su omega, así que lo que Jimin pedía, Jimin tenía. Sin embargo, la elección de la locación dónde se llevaría a cabo la ceremonia estuvo a cargo del alfa. Sería una completa sorpresa para el menor.

En cada detalle, Jimin estuvo, menos en aquel. Aunque se hacía muy difícil estar en todo con tres niños en casa, por suerte Jungkook era el mejor alfa que podía desear y se había tomado tiempo libre del trabajo para estar presente con la organización de todo también.

Al principio no fue nada fácil, Daehyun era solo un bebé cuando se convirtió en hermano mayor y también demandaba tiempo de sus padres quienes por supuesto se hacían de él para no dejar de lado a su hijito más grande. Pero así como tan pronto llegaron ambos bebés a la casa, Daehyun se enamoró de ellos y no dejaba que nadie más que sus padres se acerquen a ellos. Con el correr de las semanas, se acomodaron a los horarios, las noches de dormir una hora de corrido para ser despertados por llantos ya casi se habían terminado a ese punto.

Tres días antes del día D, la familia de cinco se dirigieron al lugar donde sería la recepción y fiesta, donde ya la familia de Jungkook y Jimin estaban esperando ahí, ambas madres y el padre del alfa, y toda la dotación de hermanas y hermano, pues el lugar era muy grande y había suficientes habitaciones para todos.

—No puedo creer que no sepa dónde será mi propio casamiento —murmuraba Jimin, molesto.

Cada vez que le preguntaba a su alfa, éste solamente le decía que le gustaría. Mucho. Pero que no iba a decir una sola palabra.

Jimin intentaba persuadir a Jungkook por todos los medios, porque la curiosidad era inmensa. Cenas especiales y sexo, hasta falta de éste pero nada hacía al alfa soltar un sólo indicio, hasta que al final se rindió. Tenía que confiar en las palabras y el gusto del mayor en cuanto a esto, aunque no iba por el lado de desconfiar que fuera un lugar que no le guste, sino las ansias de saber.

—¿Una pequeña pista? —había preguntado, solo cuando faltaba un par de kilómetros para llegar al lugar.

—No, nada, omega —Jungkook se rió por el enojo de Jimin, que murmuró por lo bajo un 'maldito alfa' pero sabía que realmente no estaba molesto, solo un poco ansioso.