𝓓𝗼 𝘆𝗼𝘂 𝗵𝗮𝘃𝗲 𝗽𝘂𝘀𝘀𝘆?

18

Verlos juntos era algo que realmente me fastidiaba, y más después de lo que Yushi me había contado de ese idiota.

Más eran mis sospechas de que aquel idiota, ahora conocido como Sunwoo, estaba más que interesado en Wonbin.

Como les dije, jamás lo dejaba, incluso menos ahora que estábamos en el entrenamiento, estaba pegado a el, ni siquiera lo dejaba respirar y eso me enojaba.

–Bien muchachos, como hoy en verdad no quiero enseñarles nada, nos dividiremos en seis equipos de seis, jugaremos un poco, hagan los equipos como quieran no me importa. –dijo entrenador Do mientras estaba sentado en las gradas bebiendo una soda y se podía notar que se mensajeaba con alguien, seguramente era su esposa.

Y así como dijo el señor Do, todos comenzaron a ponerse en equipos, sabía que seguramente nadie me escogería, pues era obvio el perdedor siempre se quedaba en un equipo al que era metido a la fuerza porque era el único que sobraba

Pero en eso vi a Min caminando hacia a mi con una sonrisa, tan linda como siempre.

–Oye Shotaro, ¿quieres venirte a mi equipo? Puedes decirle a Park que venga igualmente para que no te sientas solo. –me pregunto tomando mi mano, regalandome una tierna sonrisa, esperando por mi respuesta.

Me alegraba que me hubiera invitado, pues pensaba que no lo iba a hacer y que haría equipo con las demás chicas.

Habia otras tres chicas que estaban atrás de Minjeong mirándonos, seguramente ellas habían sugerido la idea de que Wonbin se uniera, pues esperaban ansiosas por mi respuesta.

–Y-Yo si quiero pero no creo que él quiera... –pero en eso escuché unos pasos detrás de mi.

–Lo haré, igual no quería juntarme con alguien en específico. –era Wonbin quien estaba parado a un lado de mi.

Yo lo miré, sorprendido por lo que había dicho.

¿Por qué había aceptado? ¿Habrá sido por mi? No creo... Hace semanas me ignora, talvez sea por coquetear con las demás chicas.

–¿¡Enserio!? Me pone muy feliz que tú digo que ustedes hayan aceptado. –Minjeong nos abrazó a los dos y después nos tomó de las manos para llevarnos con las otras tres chicas que nos esperaban.

Estaba contento por esto, tendría una oportunidad de poder hablarle aunque sea un poco, sin su guardaespaldas cerca.

–¡Espera park! –hablando del rey de roma.

Ahí se acercaba aquel imbécil hasta donde nosotros, especialmente hacia donde estaba Wonbin.

Por un momento sentí miedo, pues temía que por estar muy cerca de Wonbin, ese idiota lo tomaría mal.

–¿Qué pasa Sunwoo? –por el como le contestó Wonbin, este parecía algo ¿desinteresado?

–Oye... Pensé que estaríamos juntos, incluso armé un equipo con las mejores, ¿por qué te vas con ellas? En especial con este rarito. –la mirada de odio de el era horrible, sabia que me odiaba, pero lo bueno es que este odio era mutuo.