Traiciones Y Redenciones: La Historia Del Escuadrón MKIV

Adiós, Paraíso Infernal

Al amanecer del día siguiente, Nykka llega al campamento donde se encuentran DMT, Fraxx y Jachako. El sol se filtra entre las hojas de los árboles, creando un ambiente cálido y sereno. Nykka sonríe al ver al equipo reunido y les informa que el barco está listo para partir. Se forma una atmósfera de despedida mientras Nykka expresa su gratitud y los tres agradecen sinceramente por la hospitalidad recibida. La conversación es emotiva pero llena de esperanza para el futuro mientras se preparan para partir.

Nykka: ¡Buenos días, compañeros de aventura! ¿Listos para partir?

DMT: ¡Buenos días, Nykka! Sí, estamos listos. Pero antes que nada, quiero agradecerte por todo lo que has hecho por nosotros.

Fraxx: Sí, gracias por acogernos en tu tribu y por ayudarnos en nuestra misión. Realmente apreciamos tu hospitalidad.

Jachako: Definitivamente, nos has mostrado un lado completamente nuevo de México. Estaremos eternamente agradecidos. Y también gracias por no habernos matado cuando tus arqueros nos vieron ahí en la playa sin nada en mano. JAJAJA.

Nykka: No hay de qué, amigos. Fue un honor tenerlos aquí. Y recuerden, siempre serán bienvenidos en nuestras tierras. Ahora, ¿están listos para zarpar hacia nuevos horizontes?

Los tres asienten con determinación mientras se preparan para embarcarse en su próxima aventura.

Fraxx: Llevamos todo, cierto?

DMT: Si, llevamos todo. Las bolsas, sables de luz, armas nuevas. Sip!

Jachako: Creo que extrañaré hacer conversa con los arqueros de aquí.

Fraxx y Jachako suben al barco, listos para zarpar hacia nuevos horizontes. Mientras tanto, DMT se acerca a Nykka con una expresión de seriedad en su rostro.

DMT: *saca tres lingotes de oro de su bolsa de atracos* Nykka, necesito hablar contigo.

Nykka lo mira con curiosidad mientras examina los lingotes de oro.

Nykka: ¿Qué es esto, DMT?

DMT: Es oro, Nykka. Quiero que sepas la verdad. Nosotros... somos ladrones. Robamos para vivir.

Nykka frunce el ceño, sorprendido por la confesión de DMT.

Nykka: Entiendo... pero a pesar de eso, ustedes nos ayudaron, nos salvaron a mí y a mi tribu.

DMT: Lo sé, Nykka. Pero quiero que sepas que valoramos mucho tu amistad y tu ayuda. Gracias por todo. Por favor, tómalo como agradecimiento.

Nykka asiente con comprensión y aceptación.

Nykka: Todos cometemos errores, DMT. Lo importante es aprender de ellos y seguir adelante. Te deseo lo mejor en tu viaje.

Los dos se estrechan las manos en un gesto de respeto mutuo antes de que DMT se una a Fraxx y Jachako en el barco.

En ése pequeño acto de bondad, DMT subió al barco como si fuese una persona nueva, tratando de redimirse después de una vida llena de errores.

Fraxx, Jachako y DMT se reúnen en la cubierta del barco mientras comienza a zarpar, disfrutando de la brisa marina y el sonido de las olas.

Fraxx: Bueno, chicos, parece que nos estamos despidiendo de México.

Jachako: Sí, es extraño pensar que estuvimos atrapados en una isla hace solo unos días.

DMT: Sí, pero ahora estamos en camino de regreso a casa. Sin embargo, no puedo dejar de pensar en Cristolio. ¿Qué creen que esté haciendo ahora?

Fraxx: Probablemente ya esté planeando nuestra próxima aventura. Ese tipo nunca se detiene.