𝐇𝐢𝐚𝐭𝐮𝐬 -» [𝐌𝐚𝐫𝐤𝐇𝐲𝐮𝐜𝐤]

16

Decir que nadie pudo dormir bien era verdad, todos estaban ansiosos por la llegada de Donghyuck, aparte de que todos lo extrañaron un montón.

Ya iba en el auto camino a casa, había viajado bien temprano con la esperanza que Mark durmiera hasta tarde y poder respirar un poco antes de hablar.

Porque ya lo había decidido, conocía a su Makku, él jamás querría hablar por cuenta propia, lo obligaría.

Incluso si la única opción era encerrarlo en una habitación hasta que hable, lo haría, así que Jisung sí tuvo una gran idea.

Cuando llegó a su casa no había alma alguna despierta, algo bueno de llegar a las 7.30 am, así que entró con cuidado para no despertar a nadie.

Subió las escaleras con sus dos maletas, que en su mente no había despertado a nadie, y entró a su habitación encontrándose con un pequeño Jisung sentado en su cama con sus piernitas temblando.

— Sungie... — Susurró Donghyuck dejando las maletas a un lado y corriendo a abrazarlo.

— Te extrañé mucho hyung, no vuelvas a dejarme así. — Le respondió dándole besitos en la mejilla.

Con una gran sonrisa el mayor recibía el cariño, no creyó que lo extrañarían tanto, se sentía querido.

— Hyung... mmmm... he estado muy nervioso y...

— Haremos que hable pequeño, si no, lo obligamos. — Le susurró Donghyuck sabiendo perfectamente a lo que se refería.

— ¡Yo les dije a los chicos lo de obligarlo y encerrarlos en una habitación pero no me hicieron caso!

Ambos se rieron por eso y se quedaron en la habitación conversando, Donghyuck estaba feliz de que haya sido Jisung el primero con el que se encontraba.

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Jeno y Jaemin claro que habían escuchado llegar al chico, porque ellos tampoco habían podido dormir bien.

Jeno hasta escuchó la puerta principal abrirse, así que sabía que el menor estaba en la habitación de alado, y al escuchar las risas desde allá, se tranquilizó un poco.

— Hyuuuuung... necesito cariñitos y amor. — Le dijo Jaemin con los brazos abiertos.

Jeno con una tierna sonrisa se levantó de su cama y fue a acostarse con Jaemin, que lo abrazó subiendo sus piernas encima.

De vez en cuando se daban besitos por todo el rostro y en los labios, necesitaban calmarse mutuamente.

— Mi chico bonito, todo saldrá bien, créeme. — Le decía Jeno tratando de calmarlo.

Aunque también era para calmarse a sí mismo, él estaba más nervioso incluso que el menor.

— ¿No podemos quedarnos así todo el día y esperar a que pase todo?.

— Créeme que es lo que quiero, pero los nervios no me dejarán hacerlo, aunque si nos quedaremos toda la mañana así. — Jeno se acomodó dejando al menor ahora encima de él.

Le empezó a acariciar la espalda con una mano y el cabello con la otra, esa era su posición favorita con cualquiera de sus dos chicos.

— ¿Y Renjunnie? — Susurró Jaemin ya extrañándolo.

— En cualquier momento va a entrar por la puerta y saltar a la cama bebé, no dudes de eso.

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Chenle y Mark eran los únicos de esa casa que dormían profundamente, y era porque ellos de verdad que no habían dormido ni un minuto la noche anterior.

Hablaron y hablaron de todo lo que sentía Mark, el chino menor fue la última esperanza de todos para que convenciera al canadiense de confesarse.

Y al parecer si lo había logrado, pero como no, si le lloró por horas diciéndole lo mal que se sentía con lo que pasaba.

Le había llorado a Mark diciéndole que se soltara con Donghyuck, que le dijera lo que sentía, que no lo pensara mucho, que solo le saliera lo que pensara en ese momento.

Y por el momento, le había dicho que lo haría, que trataría de explicarle cómo se siente, si, eso era lo que tenía que hacer, decirle a Donghyuck cómo se siente.

Renjun, que ya estaba despierto, miraba feo a los dos chicos, por culpa de ellos se había despertado varias veces en la noche.

Porque hablaban y hablaban sin pensar en él y que quería dormir, rodaba los ojos y miraba por la ventana, aún era muy temprano.

Así que simplemente se levantó de su cama, se fue de su habitación y caminó hasta el lugar en donde sabía si lo iban a tratar con amor.

— Jeno... Jaeminnie... — Susurró el mayor esperando que estuvieran despiertos.

— Te estábamos esperando amor. — Le dijo Jeno con una gran sonrisa estirando uno de sus brazos.

Y así, Renjun corrió hasta la cama y saltó encima de sus dos chicos, exactamente como dijo Jeno que pasaría.

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La horas pasaron y ya siendo las 9 am la mayoría de los chicos estaban abajo desayunando, menos Chenle y Mark.

— Ni los menciones, ¡Te juro que los veo y los mato! No me dejaron dormir en toda la maldita noche. — Se quejó Renjun.

Jaemin solo se reía mientras abrazaba a su mayor y le daba besos en la mejilla de consuelo.

— No lo mates aún, espera a que hable con hyung primero. — Dijo riendo Jisung, que era el único que sabía del plan de Donghyuck y que no estaba tan mal.

Por eso, recibió un golpe por parte de Jeno en el hombro, pero fue calmado por Donghyuck.

— Tranquilo Jeno, estoy bien con eso, ya hablamos con Jisung, si no quiere hablar haremos el plan B que tienen.

Todos lo miraron sorprendidos, no se esperaban eso, la verdad creían que estaría deprimido y triste por querer hablar con el líder.

Siguieron con el desayuno y Donghyuck les contaba todo lo que hizo en la semana en su casa, haciendo reír a los demás.

Escucharon unos pasos por la escalera y todos se quedaron quietos, hasta respirar daba miedo en esos momentos.

Mark apareció por las escaleras y nadie se atrevía a mirarlo, ni si quiera Donghyuck que comía y comía sus cereales en forma de calmar los nervios.

— Mmmm buenos días chicos, yo... Donghyuck, ¿Podemos hablar ahora?.

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