Prejuicios

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Algún día se me haría una úlcera en el estómago de seguro. Vivir aterrorizado no podía ser nada sano. Y en realidad ni siquiera tenía sentido pasar por tanto miedo, después de todo era obvio que Victor no se había rendido ni lo haría jamás, pero tenía que admitir que el regreso de Edythe y el rechazo de Julie habían hecho que me olvidara un poco del asunto, al menos lo suficiente como para no pensar en eso a menudo. Pero ahora volvía a sentirme totalmente alerta y me costaba dormir, incluso con Edythe montando guardia a mi lado.

Faltaban pocas semanas para la graduación y decidí que mi deseo de que fuera Edythe quien me convirtiera no valía tanto la pena, lo mejor era volver al plan original y dejar que fuera Carine quien me quitara el blanco que tenía en la espalda. No había ninguna razón para seguir siendo mortal y frágil, casi era un juguete para el vampiro sádico que me quería cazar desde hace meses. Sobre todo, con mi muy mencionada mala suerte, pero Edythe no quiso siquiera oír hablar del tema. Tuve que ir hasta su casa el viernes después de clases a hablar con su familia al respecto mientras ella sólo ponía los ojos en blanco por la frustración.

—No hay de qué preocuparse, Beau. Somos siete y además Archie está siempre vigilante —dijo Carine con la voz cargada de confianza —. Por el bien de Charlie es mejor que sigas con el Plan B y esperes el año que ya tenías pactado con Edythe.

—No dejaremos que se te acerque, hijo, no hay razón para estar nervioso — añadió Earnest poniendo una mano en mi hombro de forma paternal.

Eleanor me dirigió una mirada cariñosa.

—Estoy tan contenta de que Edy no te haya matado al fin de cuentas, todo es más divertido desde que estás aquí...

—Gracias, Eleanor —contesté con todo el sarcasmo del que fui posible —. Pero si no hay peligro alguno, ¿por qué Edythe me mandó a Florida el fin de semana?

Archie rodó los ojos.

—¿Aún no te has dado cuenta de que mi hermana es un poquito exagerada? — hizo un gesto de sostener algo muy pequeño entre el pulgar y el índice —. En lo que se refiere a tu seguridad es una maldita histérica. Mira que enviarte con una loba... —resopló con desaprobación —. Pero ya que estamos, estoy empezando a sentirme muy ofendido. Pensé que eras mi amigo —reclamó con una mirada de reproche.

—¿Por viajar con Julie? —pregunté confundido.

—No, Beau. Porque sigues preocupado, como si no confiaras en mí. No me gusta.

Empecé a sentirme más tranquilo mientras hablábamos hasta que comprendí que era Jessamine haciendo lo suyo. Me dio igual, necesitaba relajarme un poco, los hombros me dolían con la tensión, pero todo el estrés volvió en cuanto Edythe y yo salimos de la habitación.

Así que de eso se trataba por ahora, en confiar en que mi familia de vampiros acabara con el problema antes de que el problema acabara conmigo.

—Si quieres me quedo —me recordó Edythe esa noche cuando por fin me acosté para tratar de dormir.

Archie no veía nada de acción para el fin de semana en cuánto a Victor se refería, así que le insistí a Edythe en que saliera a cazar con sus hermanos. Sus ojos llevaban días de color negro y sabía cuánto le hacía sufrir la sed, sobre todo estando tan cerca de ella.

—No, ve y diviértete. Caza unos cuantos pumas por mí —contesté besándole la frente.

Archie había cazado dos días antes para quedarse vigilando, así que, en teoría, no tenía nada de qué preocuparme. A la mañana siguiente cuando desperté encontré una nota en mi almohada.

"Volveré tan pronto que no tendrás tiempo de extrañarme. Cuida de mi corazón... Lo he dejado contigo".

Y había dibujado un pequeño corazón anatómicamente perfecto, de forma que su silueta pareciera un corazón de los que solía dibujar la gente normal. Guardé la nota en el cajón de la mesita de noche y me alisté para trabajar en la tienda. Tenía el turno de la mañana y luego en la tarde iría a casa de Allen a ayudarle con las tarjetas de invitación para la graduación. Si salía temprano podría aprovechar e ir al gimnasio. Sabía que Archie me vigilaría todo el tiempo de cerca.

Eclipse (Versión Vida y Muerte)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora