Espiando como y con Afrodita (parte I)

3.5K 206 13
                                    

¡Regresamos al campamento! (Nótese mi sarcasmo)
Bueno aunque hubiera querido estar algún tiempo más alejada de los traumas y el estrés de los dioses (igual me siguen a todos lado) y del trajín del campamento, tuvimos que regresar.
El carro del sol aterrizó en el claro que está al lado de la casa grande.
Al poner un pie en el campamento, y viendo Apolo que nadie le hacía caso ya que todos los campistas estaban preocupados por nosotros y no por él, se fue. Sin antes despedirse de mí y de sus hijos.
Irella fue la última en bajar del carro del sol, y cuando estuvo en tierra, toda la cabaña de Apolo vino directo hacia ella. La abrazaron y le preguntaban tantas cosas que la pobre no podía ni respirar.
-Chicos, basta. La van a dejar sin aire-tuve que intervenir
-Nos alegra que hayas vuelto Ire!!!-corearon todos de la cabaña de Apolo
-¿Y Jack? ¿Adam?-pregunta buscando a alguien con la mirada
Si Irella no me hubiera contado su historia durante el vuelo, mataría a la persona que se llamara Jack. Y Adam
Su historia es un poco graciosa, no me imagino que los hermanos (medios hermanos) tengan algo en común: la misma chica que les llamó la atención.
Cuando me contó, al principio no le creí. Aunque Ire no sea de las que inventan historias. Pero al ver los semblantes serosa de Irella y a Apolo, les creí.
Su historia trate de que ella es hija de Apolo, pero tiene un hermano que es hijo de Ares tiene un hermano mayor que es hijo de Hermes. Gracioso ¿no?
Hace cinco años que se convirtió en cazadora, cuando su hermano tenía 12, y el mayor 16. Jack tiene 17 y es el co-comandante después de Clarisse de la cabaña de Ares, y Adam tiene 21 y es la mano derecha de Chris, el segundo al mando, y se encarga de supervisar que los Stolls (los líderes de la cabaña, no sé como) no hagan de la cabaña un desastre.
(Esto me va a servir para chantajear o a Ares o a Apolo o a Hermes)
Un chico alto, musculoso, no lo niego guapo, cabello negro, ojos negro azabache y una sonrisa cautivadora... Y otro igual de alto, guapo, con ciertos rasgos infantiles que es característico de los hijos de Hermes, con ojos color chocolate...Me estoy saliendo del tema. Llegan a donde está Irella y la abrazan.
Alguno de los nuevos campistas los quedan mirando boquiabiertos.
-Mi solecito no me viene a visitar...
-Jack, tú sabes que estoy con las cazadoras
Adam la despeina
-Te extrañé hermanita
-No, yo más-refuta Jack
-¿Jack? ¿Adam? ¿Verdad?-interrumpo
(Que malota. Interrumpiendo conversaciones entre hermanos)
-Diosa Aria
Me dice Adam. No Jack. Los hijos de Ares son más malotes.
-Qué no me digas diosa Aria. ¿No escuchaste lo que le pasó a Percy y a Jason por decirme así?
-Pensé que eso fue por que te estaban molestando con Apolo-dice Jack
Adam le codea
-También por eso
Irella se ríe
-¿Por qué te ríes?-preguntamos a coro
-Nada...-dice guiñándome un ojo
-Los dejo para que sigan su charla de hermanos... Ya que esta en conversación no podría salir bien-murmuro la última parte.
Me alejo de ellos para dirigirme a ver al resto de los semidioses preguntando lo que había pasado con Ortro.
Haciendo una pausa. ¿Les conté que a Riley y a Sydney Artemisa les propuso para ser cazadoras?
No. Bueno, igual no lo aceptaron.
Si mi hermana hubiera aceptado, estaría con ella por la eternidad sin preocuparme que un chico le rompa el corazón (alguien me está contagiando ejem Percy ejem). Y si Riley hubiera aceptado, podría estar con mi mejor amiga por siempre, le pediría a Artemisa unirme a la caza (tampoco tampoco) pero podría estar con ellas. En todo este tiempo que la conozco, aunque sea poco, Riley se a convertido en una hermana para mí. Como Anabeth y Piper, al igual que Julie.
Cuando conozco a una persona, siento que la hubiera conocido más tiempo. Esa es una de mis cualidades. Siento su aura positiva, no como con otras personas que al conocerlas ya te dan ganas de estrangularlas.
Siendo menos emotiva, al caminar hacia el resto de los campistas preocupados, me fijo en algo no muy agradable para mí. Butch está abrazando a mi hermana.
¡Butch está abrazando a mi hermana! ¡Qué se ha crecido este hijo de Iris!
Busco a Percy con la mirada para ir a decirle toda su vida. Lo encuentro llenado para donde están. Pero antes de poder dar un paso, alguien me detiene.
-¡¿Aria?!
-Pero... Al menos Percy lo va a hacer por mí
Paro de hablar por que veo que Anabeth detiene a Percy antes de que él logre llegar a su objetivo, y lo trae de la oreja.
-¡Auch!
-Misión cumplida-dice Anabeth chocando los cinco con Clarisse
-¡Están apoyando a Afrodita!-me quejo
-¡Y estamos en contra de ella!
-Lo siento Prissy-dice Clarisse en tono burlón
-¡Que no me llamo Prissy!
-¿De cuándo acá ustedes trabajan juntas?-interrumpo
Si los dejaba que siguieran, se iba armar una. Que ni siquiera yo Anabeth podría detener.
-Desde cuando supe que era familia cercana de la listilla...
-Clarisse...-suspira-eso lo arreglaremos más tarde.
-¡¿Y por qué nos detuvieron?!
-Le iba a dar su merecido-digo
-Pobre Butch. Ya le basta con tener a un dios en su contra, para que tenga a otra diosa solo porque es muy sobreprotectora-dice Anabeth
-¿Pe-pero?
-¿Qué ocurriría en nuestro caso Percy?
-Es diferente...-la guerra y la sabiduría niegan rotundamente
Nunca he visto trabajar así a Ares y a Atenea. Deberían seguir el ejemplo de sus hijas.
-O en tu caso Aria...-me dice Clarisse
-Somos dioses...
-Además creo que ya está muy advertido-dice Percy
Le pego en el estómago
-¿Por qué todas las chicas me quieren usar como su saco de boxeo?
Nos reímos
-Ustedes no entienden...-reclaman Anabeth
-Prissy ya te está contagiando los sesos de alga que tiene, Aria.
-¡Por Zeus!-exclamo
-¿Alguien me llamaba?
-Yo y mi bocota-susurro
Volteo
Al medio de todos los semidioses se encuentra mi diosa favorita y el menos favorito. ¿Adivinen quién? Nada más y nada menos que el dios de los molesto... Digo de los rayos.
-¿Qué quieres dios de los moles...?-trato de decir ante unos sorprendidos y asustados semidioses.
Me cayo y no es porque quiera. Sino es que una rama de vid me tapa la boca. Me la quito de una sola.
-Para que quede claro, solo estaba dirigido para el "rey de los dioses"-digo haciendo comillas con mis manos.
Veo a Atenea que tarta de no reírse. Ella si me comprende
-¡Padre! ¡Qué bueno verte en el campamento! ¿Vienes a quitarme el castigo?-dice Dionisio
-No-respondió secamente ganándose una risita por parte mía y de Atenea-vine a ver a mi sobrina
Entrando en estado de shock y apunto de desmayarme. ¿Cómo que viene a verme? Debe ser algo urgente. Ya que sino me hubiera llamado al Olimpo.
Pero la palabra "sobrina" lo dijo como si hubiera tragado ácido. Atenea solo me miraba con compasión.
Y salgo de mi estado de shock a estar realmente furiosa. Lo miré furiosa
Me devolvió la mirada, aún peor.
Por suerte o para la suerte de Zeus, Quirón interrumpió nuestra guerra de miradas.
-¡Campistas regresen a sus actividad Esta!
Me quedé sin moverme con las manos hechas puños. Sentía Percy llegar a mi lado.
-Percy, creo que debemos irnos...-murmuró Anabeth
-No voy a dejar a mi hermana sola!
Seguí sin moverme por la cólera de la actitud del rey de los dioses.
-Percy...-dice Quirón en un tono calmado
Mi hermano suspira
-Está bien. Pero si algo le pasa a mi hermana...-dice en un tono amenazador
-¿Me estás amenazando?-dice Zeus con un aire de autosuficiencia
-Depende de cuán inteligente sea el dios que lo interprete-dice Percy para luego dar la espalda al dios gruñón.
(Golpe bajo ¡Toma eso Zeus!)
Quirón, Percy y Anabeth se retiran. Sin antes caer un rayo al lado de Percy haciendo que mi hermano se sobresaltara.
-Hola Atenea, gracias por venir a visitarme. Puedes decir a tu chofer que se vaya-digo en el tono más amable que puedo
-Muchacha insolente ¿cómo te atreves a dirigirte de esa manera al rey de los dioses?
El cielo se oscureció como ocurre antes de una tormenta
Me río sarcásticamente
-Cuando dejes de engañar a mi madre con mortales. Recién ahí dejaré de comportarme de esta manera.
Aumentó el viento. Las ramas de los árboles se movían. Escuché un trueno, buenos varios truenos.
-Ella me engañó con mi hermano! ¡Se acostó con Poseidón!-dice furiosamente
-¡Ella no lo hizo!-digo sin pensar,o
Los dos dioses me miran extrañados
-¿Qué?-preguntan confundidos
Para ser sinceras, no se de dónde saqué eso. Si mi madre no lo hizo... ¿Cómo he nacido? ¿Acaso Hera no es mi madre? Parece como si una parte de mi cerebro hubiera hecho click y haya dicho información que no puedo acordarme.
-Este... No nada. No sé de dónde salió eso.
-Bueno siguiendo con el porqué hemos venido...-interrumpió Atenea
Para mi suerte, ya que Zeus me miraba con una cara de ¿WTF?
El rostro de Zeus pasó de confusión a "soy el rey de los dioses y lo que hago es gruñir, gruñir y gruñir"
-¿Y para qué ha venido este dios?-digo aún molesta
-Mejor los dejo los dos solos... Padre, Aria-dice Atenea para luego irse
-¡Gracias Atenea!-digo sarcásticamente
Los vientos se clamaron, el cielo se aclaró un poco. Miro a Zeus que ya no tiene esa cara de arrogante presumido.
-¿Y?-pregunto
-¿Y qué?
-Tú has venido a interrumpir mi paz y tranquilidad...
-Necesitotuayuda
-¿Qué?
(Para aclarar, si le entendí. Pero quiero que sufra)
-Necesito... Tu... Ayuda-dice arrastrando las palabras
-No te he escuchado
-¡Qué necesito tu ayuda!
-Ajá. Okey. Pero esta vez más fuerte
Me mira con odio. Un rayo cae en un árbol carbonizándolo por completo
-Ya dije lo que quería. ¿Sí o no?
-Tú eres el que necesita mi ayuda, no al revés. Así que...
-¡NECESITO TU AYUDA!-grita con voz potente que se pudo haber escuchado incluso en Japón
-¿En qué quiere mi ayuda el "rey de los dioses"?-digo burlonamente
-ParareconciliarmeconHera
-No hablo idioma Zeusiano
-Necesito tu ayuda para reconciliarme con Hera. ¿Quieres hacerme perder la paciencia?
-Eso ya lo perdiste hace tiempo...
Otro rayo cae en otro árbol.
¡Pobres árboles! Son carbonizados injustamente
-¿Me vas a ayudar?
(¡¿Cuánto le habrá costado perderme eso?! Epic moment)
Mala suerte la mía de no haber tenido mi cámara para grabar esto
-¿Por qué no le has pedido a Afrodita? Me parece que es la más indicada en esto
-Sí lo hice. Pero dijo que te pidiera a ti también-dice tragándose su orgullo
-¿Dúo con Afrodita?-preguntó incrédula-Sí acepto y no es por ti, sino por mi madre que no me gusta verla sufrir.
-Empiezas desde este momento-dice para luego desaparecer
-¡Zeus!
El cielo se despeja y me viene un aroma a rosas.
-¡La diosa del amor reportándose!
-Afrodita-digo con desgano
-Junto contigo a cumplir la misión más importante del Olimpo.
-Sí, ya vamos...
Afrodita se cruza de brazos
-¿Qué?
-Eso mismo pregunto
-¿Antes puedo descansar?
-Está bien-dice Afrodita para luego aparecer en la cabaña 3
Entro a bañar. Al salir salto a mi cama y me quedo dormida. Depués de todo el viaje, merezco un sueño reparador.
(...)
Un consejo, de un conejo. Nunca en su vida, vayan a dormir tranquilas con Afrodita a su lado.
Después de media hora de siesta, calculo...
Me levanto de la cama, y veo Afrodita con una sonrisa que parece al gato de Alicia en el país de las maravillas.
-Oh no...
Busco un espejo rápidamente y me doy cuenta de mi aspecto. Llevo puesto una falda short (yo la llamo skirt) negra mini, para colmo, con una blusa blanca muy escotada sin mangas con encaje, medias panties color neutro de diseño y unos zapatos de taco 5 negros. Mi cara está bien maquillada, con el cabello recogido a un lado y... ¡Unas mechas azules!
Trato de calmarme
-¿Te gusta?-me pregunta la diosa del amor
-¡Afrodita! ¡¿Quien te has crecido para cambiarme el look?!
-Te queda muy bien...
-Demasiado diría yo
-Ya estamos listas para nuestra misión... Solo falta pedirle permiso a Dionisio para que sepa que te vas a quedar en el Olimpo por unos días.
-¡¿Quieres que vaya por TODO el campamento con esta ropa?!
-No podemos ir volando, así que andando.
Intento sacarme el polo, Afrodita me detiene. Estamos en un tira y afloja hasta que alguien nos interrumpe.
-¿Y ustedes qué hacen?-pregunta mi hermano mientras trato de bajarme la blusa que me intentaba sacar.
-No es lo que tu piensas...-en eso veo entrar a Anabeth- ¿Y qué hacen ustedes dos?
-Este nada... No me cambies de tema
-Es obvio, Aria-me dice Afrodita haciendo sonrojar a Anabeth-Más bien hay que irnos...
-¿Cómo que es obvio?-pregunto mientras soy jalada por Afrodita hacia la salida.
-¿Y esa ropa? ¡Te me cambias inmediatamente!
Mi lado romántico hace contacto-¡Awwww! ¡Hermanito!
Es lo último que digo ya que Afrodita cierra la puerta después de que salimos.
-¿Piensas lo mismo que yo?-me pregunta
-Sí. Has tu magia...
Le hace unos arreglos a la puerta con su magia y luego nos dirigimos hacia la casa grande.
En el camino, Afrodita me deja ya que primero tenía que hacer algo en no sé donde.
-Digna hija de Afrodita
Volteo
-¿Aria?-me pregunta Mauro
-No, tu abuela...-digo sarcásticamente
Veo a un grupo de chicos en el lado izquierdo al costado de un árbol
-¿Una apuesta?
-Sí
-¿Saliste primero?
-Sí
-¿De verdad pensaron que era una hija de Afrodita?
-Sí. Te vimos con Afrodita
-Larga historia...
-Ya, me tengo que ir... A ser humillado
-Lo que te pasa por estar coqueteando con cada chica-gritó ya que Mauro estaba lejos para oírme si hablaba despacio.
Pobre mi hijastro, tiene la cara roja de vergüenza... ¡¿Dije hijastro?! Obvien la palabra. Si tengo hijos con Apolo (más adelante claro) ¿vendrían a ser hermanos de los hijos de Apolo y hermanos de mis hijos? (Claro que voy a tener hijos... Con Apolo y... Lo veré más adelante)
Seguí caminando hacia la casa grande. Creo que si camino más rápido, llego en menos tiempo. Y si llego más rápido, menos tiempo paseo con esta ropa por el campamento.
¡Afrodita me la va a pagar!
Veo a Riley, Irella y sus hermanos caminando hacia mí.
-¡¿Qué te pasó!?-me dice Riley
La miro
-Afrodita-respondemos Irella y yo al mismo tiempo
-Me gusta el estilo-dice Adam haciendo que me sonroje
-Ehh... Gracias...
-Te recuerdo hermano, que Aria tiene novio
-Y es tu padre hermanita-añade Jack en un tono burlón
-Tu padre tampoco se queda atrás...-insinúa Riley
-¿¡Mi padre!?-exclama Jack
-¡No me gusta Ares!
-Pero sí Apolo
-¡Obvio!
-Babeas por él...
-Cállate Jack-dice Irella a su hermano
-Y por eso te has puesto así...-empieza Adam
-Para que disfrute-sigue Jack
-¿Mi padre?-termina Irella-¡estás hablando de mi padre!
-¡Exacto!-digo indignada-Y esto es culpa de Afrodita...
Riley solo ríe
-¡¿Y cómo es eso que disfrute?!-pregunto exaltada
-Ya tú sabes... ¡Auch!-dice Jack pero Riley le da un codazo. Últimamente los he visto coquetearse entre sí (no seré Afrodita pero eso se nota a leguas). Antes yo la había visto con Jack y se siente el amor en el aire.
Los miro. Si las miradas mataran, Jack se hubiera ido con mi tío Hades tres veces.
-Disculpa-dice levantando las mano
-Por las hormonas-murmura Adam
Nos reímos menos Jack.
-Me tengo que ir. Afrodita me dejó sola a propósito-digo despidiéndome de los chicos.
Ciertamente andar por todos el campamento con una mini falda-short y una blusa muy escotada, no te lo recomiendo, para nada. Luego no podré volver a mirar a la cara a los chicos.
Para ser sinceras, me salve de mi hermano, gracias al "momento" y Adrodita haciendo su trabajo.
(...)
Gracias a los dioses que por fin llegué a la casa grande. Al entrar me encontré a Quirón y Dionisio hablando con Afrodita. La muy hija de Urano...
-¡Ya llegaste! Pero te demoraste un poquito
-Sí... Seguro ya sabes por qué...-digo alargando las palabras
-Pudiste aparecer. Como lo hizo Afrodita.-dice secamente Dionisio ¿acaso todo el mundo apesta para él?
-¿No se te ocurrió?-me pregunta Quirón
¡Por qué Hades no se me ocurrió eso! Este... Lo siento tío...
-Y así dice que es inteligente...-dice burlonamente el dios del vino
-¡Cállate DD!
-¡No me llamo así, diosecilla del...!-sus lindas palabras (noten mi sarcasmo) fueron interrumpidas por un vaso de coca-cola light explotando en su cara
-Gracias padre-murmuro por lo bajo
-¡Poseidón!-grita el tipo del vino mirando al techo
-Mejor nos vamos...-dice cautelosamente Afrodita
-Yo tengo que ir a... Algún lugar...-dice nerviosamente Quirón
<Hija, mejor salgan. Esto se va a poner feo>habla mi padre en mi cabeza
Ni corta ni perezosa, jalo a Afrodita y a Quirón y salimos como Tánatos que lleva un alma. A una distancia prudencial, nos detenemos y volteamos, solo para ver a ríos de coca-cola light salir de la casa grande y a un furioso dios del vino todo empapado.
-¡Qué pasa!-grita Clarisse, luego mira a la casa grande y se encuentra con el desastre-Ahhhh... Aria ¿me prestas tu celular?
-¡Qué! ¡Celulares en el campamento!-grita Quirón
-No-decimos Clarisse y yo al unísono
-¡TODA LA CABAÑA DE HERMES A ESCONDERSE!
-¡FUIMOS DESCUBIERTOS!-gritan los Stolls
Se armó un alboroto en todo el campamento.
-Hora de irnos-me dice la diosa para luego aparecer en el Olimpo.
Llegamos a la sala de tronos, donde solo Zeus estaba sentado en su respectivo trono. (¡Qué solo! No le digan que he dicho eso)
-Doble A reportándose para la misión-dice enérgicamente Afrodita
-¿Por qué doble A?
-Afrodita y Aria
-Sí Afrodita grita más alto para que todo el Olimpo te escuche-dice Zeus malgeniado, aunque siempre es así.
-Ay ya señor gruñón-replica Afrodita
-¡¿Que me has dicho?!
-Si se siguen comportando como niños, yo me voy-advierto
-¡No!-dicen los dos dioses
-¿Entonces podemos empezar ya?
-Sí. Hera está en los jardines...
-Conste que solo lo hago para que mi madre este feliz
-Y yo porque amo hacer estas cosas
-Ya sabemos...-decimos Zeus y yo
Salimos de la sala de tronos y nos dirigimos hacia los jardines. Ciertamente allí esta mi madre regando los jardines.
Al sentirnos llegar, voltea.
-¿A que los ha mandado Zeus?
-¿Uh?
-No-dice Afrodita levantando las manos
-Es el único a quien se le ocurriría a poner a Afrodita para reconciliarse con otra persona
(Punto para mi madre)
-Sí quieren me voy...
-Sí, sería de mucha ayuda-decimos mi madre y yo a coro
-No pensé que se lo tomaran en serio-dice la diosa a regañadientes mientras se retira
-¿Podemos conversar?
Hera suspira y nos sentamos en una banca.
-¿Por qué estoy enojada con Zeus?
-No, eso todo el mundo sabe, y pues hay sus razones...
Nos reímos, y se escucha un trueno.
-¿Seguro que es el dios de los molestosos? Porque le caería a la perfección ese título-digo
Otro trueno se escucha
-¡Ay por ti! Estoy tratando de hacer lo que tú tendrías que hacer. ¡Así que déjame trabajar!-grito
-Él siempre es tan dramático
-Pero aún así lo amas...
-Sí...
-Con todos y sus defectos
-Sí
-¿Y por qué te peleaste?
-Por lo mismo de siempre
-No me digas que...
-No, no es eso
-Dos vidas no arruinadas, aunque tú también te pasas con eso-me mira fijamente-pero claro, tienes tus razones-asiente.
-Pero hay que atarlo con correa, y con cartones a los lados para que no se desvíe la mirada...
-Madre, así son los hombres... Y peor si estamos hablando de un dios.
-Tienes razón...
-Vamos
-¿A dónde?
-A que Zeus te pida disculpas
-¿Crees que lo haga?
-De una vez. Para que no moleste en vidas ajenas
-Pero me lo tiene que pedir de rodillas
-Sí lo hará, tengo mis métodos-digo para hacernos aparecer en la sala de tronos
-Listo. Te toca tu parte
-¡¿Yo!?
-No te hagas el orgulloso, que se nota que te estás muriendo por hacerlo-dice mi madre
(Hera: 2 Zeus: 0)
-Disculpa amor-dice tragándose por completo su orgullo o lo que le quedaba
-¿Y...?-digo (a que soy mala)
-No lo volveré a hacer...
-Algo mas realista, Zeus. Que todos sabemos por qué pie cojeas
-Bueno, trataré de no hacerlo
-Te perdono
Zeus se acerca y abraza a mi madre
Afrodita aparece aplaudiendo y haciéndose la que llora
-Lindo, hermoso
En eso aparece mi padre
-Zeus este...-me mira-¡Afrodita que le has hecho a mi hija!
Mi madre me examina mejor
-¡¿Qué es eso?! Semejante escote... Y ¡esa falda!
-Afrodita... Mejor corre-le susurro
-¡Mi hija nunca va a ser como tú!
-¡Nunca!-recalca mi madre roja de la furia perdono tanto como mi padre
-Aria, tienes razón...-me susurra-Yo me voy... Adiós
-¡No te vayas!-gritan mis padres a una sola voz
Lo que le espera a Afrodita

Una nueva diosa en el OlimpoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora