❝─BeomGyu jamás admitiría que un niño de apariencia femenina era quien le hacía morder las sábanas por las noches─❞
#2 En HueningKaitop 14/09/23
#2 En BeomGyubottom 15/09/23
#7 En KaiGyu 15/09/23
#1 En HueningKaitop 12/10/23
#3 En Top 19/11/23
#2 En...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
── llevo corriendo en esta clase de eventos desde que tengo memoria, mi padre era un viejo motociclista qué tuvo un amorío con una mujer de alta alcurnia en esos tiempos,de ese amor nací yo, y digamos que mi padre tuvo que dejar de hacer lo que le gustaba por nosotros, aunque, nunca hubo problema con ello, aún así el abandono de mi madre fue complicado, mi padre cuando cumplí talvez unos quince años me regaló su vieja moto, la que utilizaba cuando conoció a mi madre, me dijo que podía seguir su camino por que después de todo, siempre demostré mi gusto hacia las motos y las carreras, me la dio y la fui te modelando con el tiempo, es la que uso ahora mismo, se ve bastante moderna pero, créeme que, no lo es, aunque aún sigue siendo bastante veloz ── BeomGyu le contó a la femenina la cual lo miró con interés debido a que su historia se escuchaba bastante interesante, el menor había tenido una vida complicada, su padre era un hombre mayor pero que jamás lo abandono inclsuo después de haberse separado de su madre, seguía estando con él hasta el final de las consecuencias, su madre, bueno, era una señora con mucho dinero por lo que actualmente talvez vivía en alguna parte de él mundo, no lo sabía, BeomGyu pudo haber crecido con ella, pero su padre no permitió eso, se lo quedó, la mujer, simplemente no hizo nada más que irse una noche con un besito en su frente, desde ahí no supo más nada de ella, tampoco le interesaba, después de todo, no fue una buena madre, o al menos no la consideraba por mi siquiera buscarlo aun después de la insistencia de su padre, por lo que ahora no le importaba en lo más mínimo que había sido de ella durante todo ese tiempo, después de que conoció a HueningKai,BeomGyu verdaderamente dejó de tomar le tanta importancia a la enorme ausencia de su madre en su vida, debido a que HueningKai había logrado llenar ese enorme vacío faltan re en su corazón con su sola existencia, talvez por eso se había enamorado de él con el tiempo ── si, digamos que una moto tan antigua como esa es capaz de superar a una actual, pero, créeme que no fue fácil, aún la tengo en constante revisión por que no quiero que le pase nada, es el tesoro más preciado de mi padre, y mía, posiblemente de mis hijos pero tomando en cuenta de que actualmente solo me gusta mi pareja digamos que tener hijos va a ser algo complicado la verdad, pero, también supongo que la moto se mi padre es mágica debido a que, gracias a ella, conocí a mi pareja, y mi padre conoció a mi mamá de igual forma, así que, digamos que, es muy valiosa.
── Vaya, creo que tu moto llega a tener una historia bastante interesante qué me gustaría escuchar más ampliamente en otro momento, debido a que me has hablado tentó sobre tu moto qué me encantaría de gran manera el como se ve, ¿la trajiste contigo? ── pregunto la chica de cabello corto a la misma vez en la que de levantaba de el taburete en donde estaba sentada, acomodando su chaqueta de cuero al instante, el mayor asintió con una sonrisa antes de mostrar las llaves de su moto winter sonrió un poco antes de mostrar sus propias llaves las cuales también tenían un colgante, pero el de ella era un zorro, algo interesante de lo cuál BeomGyu preguntaría más adelante ── Yo también traje mi moto, esta en el estacionamiento, así la vemos ambos, no es tan nueva lleva algunos años conmigo así que, si la vez algo desgasta es que se a llevado algunos golpes de la vida, literalmente.
BeomGyu carcajeo un poco antes de asentir y comenzar a caminar al lado de la chica en cuestión, a algunos cuantos metros lejanos a los dos chicos antes mencionados, JungWon fue capaz de visualizar a su hyung en compañía de alguien a quien no conocía pero que a HueningKai no le dio para nada buena espina, por lo cual seguirlos se volvió su enorme y desesperada necesidad ahora que los había encontrado, finalmente.