bemaste ; c. romero (en edición)

0017 || no me voy a ir

AGUSTINA
córdoba

cristian y su pareja miran mi  reencuentro con valen, el morocho estaba en 'shock' y ella solo observaba. le susurra algo a cristian en el oído y se va por la puerta por la que recién entro.

el se acerca a mi, y me agarra del brazo fuertemente; llevándome hacia una de las habitaciones.

— soltala, no quiere – dice valentín viniendo hacia nosotros, yo niego la cabeza rogándole que no venga.

si quería que todo salga bien y nadie peleé tenía que ir con cristian,  cuando llegamos a la habitación el me suelta fuertemente haciendo que caiga sobre la cama.

— ¡ay, nene!, despacio. – digo levantándome.

— ¿por qué haces ésto? – dice mirándome con enojo.

— ¿hacer qué?

— venir así, de la nada, y con él. ¿porque no me avisaste? – dice el mirandome a los ojos, no logro descifrarlo aún.

— no me respondías los mensajes, me los dejaste en visto a todos. ¿que querés que piense?, lo primero que voy a pensar claramente es que algo le pasó. – respondo a su pregunta y el mira confundido.

— ¿que mensajes agustina? vos no mandaste ningún mensaje, ¿que flasheas? – dice él haciendo un montoncito.

— ¿que? yo si te mandé mensajes, mira .– agarro el teléfono y abro su chat. – ves, vos estás loco y no te acordás.

— yo no leí eso, ¿querés que te lo muestre?, no aparecen en mi celular.

me muestra su teléfono y es verdad, no hay nada ahí. algo raro está pasando acá, y yo no sé que es.

— perdón, entonces ¿por qué no los tenes? te los habrán borrado.

— no sé, agus. – el silencio llenó la habitación por unos segundos. – ¿te lo vas a llevar?

— no sé, déjame pensarlo. – le doy una sonrisa cálida y el me abraza, me quedo estática en mi lugar y cuando me suelta vuelvo hacia el comedor.

antes de pasar por la puerta cristian me llama nuevamente, me doy vuelta y el me hace pasar de nuevo.

— ¿que pasa? – pregunto.

— ¿estás con el? – pregunta él.

— ¿a qué viene todo esto, cris? – pregunto de nuevo yo.

— no me respondas con otra pregunta, respóndeme. – dice el mirandome fijamente.

— si, cristian. estamos juntos.

— ¿por qué?

— porque nos gustamos y el me quiere, no me miente. – digo yo.

— ¿te vas a ir con valentino?– cambia el tema.

— no me voy a ir, por ahora. – ahora sí salí de la habitación.

ahí estaba mi hijo durmiendo en los brazos de valentin, el cuando me ve sonríe y me hace una seña con la cabeza de que vaya con él. voy y me siento a su lado apoyando mi cabeza en su hombro, el besa está misma.

— ¿todo bien? – me pregunta bajito.

— sip, por ahora. – nos quedamos en silencio unos segundos. – ¿paseamos? los tres.

— eu sii, vamos a algún lago o algo. – dice el sonriendo tratando de no despertar a valen.

— vamos con valen, así cristian se libera. está medio estresado. – digo levantándome, agarro a valen y lo despierto.

lo cambio y dejo que valentín se cambie en la habitación que anteriormente mi ex suegra nos dió, busco a cristian con mi hijo en brazos. estaba en el mismo lugar que antes pero está vez sentado en la cama, parecía estar pensando.

me siento a su lado dejando a valen en medio de los dos, el cuando nos ve sonríe y abraza a el menor de los tres.

— vamos a ir a pasear con valen, vamos a conocer un poco. – le digo a el y el esboza una risa.

—¿vas a conocer de nuevo el lugar donde te criaste? – niego y el se pone a jugar con valen. – ¿venís a refresgarmelo en la cara?

río y lo miro raro. – no, vengo a avisarte para que descanses o que salgas con tu chica. yo no haría eso aparte.

— bueno, vayan. – deja a valen en el suelo y le da un beso en su coronilla. – pásenla lindo.

— gracias, cris. – agarro a valen de la mano y saluda a su papá.

salimos y valentín nos esperaba en el living, cuando nos ve sonríe y abre los brazos ya que mi hijo fue hacia él.

— hola bellos, ¿ya estan? – dice el cargando en sus brazos a valen y mirándome a mi.

— sipi, ya estamos. – respondo – fui a avisarle a cristian, para que descanse.

el asiente y agarra mi cartera, salimos y nos subimos al auto. valen venía upa mío en el asiento de copiloto, como era un viaje corto no era necesario que esté en la sillas, mientras jugaba con mi celu.

— ¿vamos al cerro? – pregunta el mientras enciende el auto.

— si, ¿sabes cómo ir? – el niega. – ¿me das tu celu? así me fijo.

— sisi, toma. – se saca el teléfono del bolsillo de su pantalón y me lo da.

— ¿la contraseña?

— tu cumpleaños, agus. – dice él.

yo sonrió y busco en el gps como ir, pongo el teléfono en su pierna para que el se vaya fijando. el agarra mi mano y la pone en su nuca, empezé a hacerle mimitos mientras él manejaba y con la otra sostenía a mi hijo.

— llegamoss – dice apagando el auto y alargando la 's'

— valen, mira donde estamos. – digo mientras salimos del auto. el festeja y pide ir al piso.

caminamos de la mano por el lugar, llegando al lago que estaba entre las cierras. nos sentamos en la orilla a remojar los pies, valen pide meterse.

— no hijo, no traje la ropa para mí. – le hablo a mi hijo, el ya estaba empezando a ponerse nervioso.

— ahí vengo, esperen acá. – dice valentín levantándose de la roca en la que estaba.

cinco minutos más tarde viene vestido para meterse, es decir que con ropa para el agua, y en la mano para valen. mi hijo, al verlo, sonríe y empieza a estirarle los brazos para meterse.

— estás loquito vos, le dije que no. – digo riéndome.

— pero dale, déjalo. – dice el mirandome y haciendo ojitos junto a mi hijo.

— dale, anda a cambiarlo. – digo y ellos sonríen.

menos de dos minutos más tarde, ambos ya estaban metidos en el agua. jugaban juntos, valentín le enseñaba a nadar y a flotar. los demás deben pensar que somos una familia.