El Efimero Sempiterno

XIV 피 Baño de sangre

Jungkook Pov

Pensé en múltiples torturas para culminar mi experimento, no surgían ideas en mi imaginación; ya había pasado dos meses desde que el alma del castaño fue secuestrada por mí. Ya no sabía qué hacer con él, todo lo que imaginé conlleva una muerte dolorosa y no quería que mi perrito muriera. Debía hacerlo pagar por su malas palabras.

Entorno a lo de Jieun, no fue difícil quitarle mis pertenecías, puso algo de resistencia, pero Yoongi no se dejó intimidar. Creo que me altere por algo que se podía resolver fácilmente. Aunque debía estar preparado para cualquier idiotez que tratara de hacer la mujer. De pronto recibí una llamada de mi jefe que aún trabaja en la empresa de incógnito.

–Ya tengo indicaciones Jk, la mano derecha de Jin Young es Bangchan, tiene una esposa con un embarazo de siete meses, investiga todo lo que puedas, necesito subir aún más de puesto, ya sabes que hacer– Cortó la llamada.

Como amo a mi jefe, es tan cariñoso y dulce con sus palabras, quizá aún se encuentra enojado conmigo por entregarse a Park, pero yo no tengo la culpa, tan solo soy una fantástica alma realizando su trabajo. Salí de mi cabaña para dirigirme con Yoongi, toqué su puerta demasiadas veces y se escucharon sus pisadas cerca.

–Hola Kook.

–Gi, ya sabemos quién es la mano derecha de J.Y.P en la noche vendré por todo.

Le extiendo una carpeta que SiHyuk me mandó, estaba la foto del chico y su currículo, Yoongi la tomó entre sus manos dando una hojeada rápida a todo. Asintió con la cabeza y alzó si mano en forma de saludo militar.

–Entendido Jk, lo veré en la noche– Habló haciéndome reír.

–Perfecto Suga, haces un trabajo muy impecable.

Yoongi cerró la puerta para iniciar, yo caminé fuera de la entrada, vivimos en un bosque y a mí me encanta la naturaleza, seguí caminando sintiendo el fantástico aroma de la tierra mojada, eso me ayudaría a pensar en mi próxima tortura.

Taehyung ya requería un nivel mayor de atrocidad, mis torturas físicas ya no tenían un buen resultado además de su forma altanera de hablarme, mi perrito había aumentado su aguante y sus sollozos eran inexistentes. Lo que significa que mi nivel de sadismo debe aumentar, todo va de acuerdo a mi plan, el cual se atrasó un poco por el remordimiento de lo ocurrido con Jieun.

Me recosté en una zona boscosa, se oía el repiqueteo de las aves, el viento creaba sonidos de tranquilidad, me quedé hasta el anochecer, la luna llena brillaba hermoso. Volví a la casa de Yoongi y este ya tenía todo.

–Encontré una mina de oro Kook.

– ¿Cuál?

–Bangchan tiene a su esposa Yeji con siete meses de embarazo y la engaña con su secretario Changbin– Se burló.

– Eso ya lo sabía, Si Hyuk me lo comentó  ¿Tienes su agenda? – Pregunto preparado.

–Obvio y las de ambos.

–Prepara el auto, mañana vamos a hacer una linda visita– Le ordeno.

– ¿Qué lugar de tortura quieres que prepare? ¿En Gangpae? ¿La casa de Busan? ¿Aquí mismo? – Me llena de preguntas.

Una grata idea surgió en mi idear, si lo físico ya no brinda resultados hay que utilizar lo psicológico para destruir la mente humana. Si jugamos con la mente habrá un punto en que no la podamos controlar, al final esta nos va a jugar en contra.

–Vamos a darle un lindo espectáculo a mi perrito, trae aquí a Yeji– Le ordene.

– ¿No crees que ese pobre chico pueda ser un problema en un futuro? – Me cuestionó. –Digo, lo estas lastimando mucho, es mejor sacarlo del juego para que no te quiera matar en un futuro, él no es nada tonto. A parte te conté lo que trató de hacer, pronto se saldrá de control y....-.