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Las personas son como puzzles, cada pieza está regada , hasta que llega alguien y las acomoda para formar una figura perfecta.
Yo no era así , miles de piezas de mí puzzle habían desaparecido y era imposible encontrarlas . Las había tirado yo mismo, con intenciones de que nadie nunca pudiera dar con ellas.Escondía muy bien mis emociones, sentimientos y sobre todo mis pensamientos.La lluvia caía como el reflejo gélido de una realidad recurrente.
Las pisadas avanzaban, los latidos aumentaban con cada paso. Los múltiples engranajes de mi cerebro me advertían que la diversión se encontraba cerca.Y valla que si..
Unos gritos hicieron detener mis pasos y agudizar mis oídos. Eran casi susurros, imperceptibles a los demás, pero yo si podía sentirlos.
- No lo hagas papá.
Los sollozos de ambos niños hicieron que continuara mis pasos hasta detenerme justo frente a una puerta entreabierta.
La cara asustadiza de uno de los niños me recibió, sus ojos me analizaron brevemente antes de salir corriendo , una niña justo detrás de él con la ropa ensangrentada siguió sus pasos dejando la puerta completamente abierta.De no ser porque estoy acostumbrado a ver cosas peores me hubiera aterrorizado ante la escena presente. El hombre sostenía a su esposa por el cabello , la mejilla derecha de la mujer portaba un corte profundo y poco profesional, una de sus manos solo tenía tres dedos, los otros estaban justo en su boca . Su vestido se hallaba cubierto de sangre y de este sobresalía un corte en la parte baja del estómago.
El hombre sonreía sin notar mi presencia , obligaba a la mujer a masticar los dedos dentro de su boca.Me sentí asqueado.
Palpé mi bolsillo y sonreí de manera siniestra . Los ojos de la mujer recayeron en mi presencia y acto seguido su esposo se volteo para someterse a una mirada oscura y perturbadora.
- Te gusta lo que ves? - una sonrisa en el rostro de el hombre mostraba la escasez de varios de sus dientes, sus pupilas estaban dilatadas, efecto de alguna droga probablemente.
- Puedes unirte a la fiesta.
Siguió sonriendo de manera sádica mirando a su mujer.
De un momento a otro se giró hacia mi apuntándome con el cuchillo que sostenía en su mano.- ¿Sabes que ? Pensándolo mejor ya no quiero que te unas prefiero verte morir.
A medida que se iba acercando podía sentir la adrenalina recorriendo mi cuerpo. Del bolsillo saqué un cuchillo mucho más grande que el suyo. El hombre me miró fijamente y siguió caminando.
Sin miedo.. así me gusta.
Dejé que se acercara y cuando creyó que me tenía le lancé un manotazo logrando que su cuchillo cayera a un lado de la mesa. Sus ojos miraban hacia todos lados desorbitados , buscando una posible solución. Sin darle tiempo a nada corté una de sus manos sin mucho esfuerzo , sus quejidos resonaban por todo el salón.
Calló arrodillado suplicando.- Ya no somos tan valientes.
Mi mirada se cernía de burla y desprecio.- Po - por favor , ten piedad- el miraba mis pies suplicantes mientras los comenzaba a besar.
<Patético >
- Eso es algo que no tengo .
Bajé la mirada al mismo tiempo que mi mano, apuñalé su espalda viendo como la sangre comenzaba a brotar y bañar el piso.Sus quejidos y súplicas aumentaban , se dejó vencer fácilmente, sin ni siquiera intentar luchar por su vida.
Me comenzaba a aburrir asi que caminé en dirección a la mujer que estaba retorciéndose en el piso .La levante con brusquedad, poco me importaba, la acomodé frente a su esposo y le tendí el cuchillo con el que la habían torturado. Salí caminado con pasos lentos, antes de llegar a la puerta volteé para ver como la mujer bañada en llanto apuñalaba de manera constante a su marido.Al salir vi como un par de ojos azules se intentaban camuflajear en la oscuridad .
Podía sentir su respiración agitada, y el miedo que emanaba su cuerpo se podía olfatear a la distancia, la sentí ahogar un grito.Sonreí.
Caminé en dirección a ella, pero el ruido de unas sirenas me distrajo por un momento. Vi a los niños descender de una patrulla y caminar en dirección a la casa , cuando me voltee vi la silueta de la pequeña detective correr en la oscuridad.
La seguí con una sonrisa en el rostro, me encantaba cazar , dejar que pensaran que estaban a salvo y cuando menos lo esperaban un cuchillo se apoderaba de todo su mundo.
Continúe el camino pensando en la manera en la que torturaría a mi nueva víctima. Desapareció de mi vista para luego sentir una puerta ser azotada con fuerza .Te encontré cerezita.
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IRIDISCENCIA EN EL MAR ✓[Corrigiendo]
Teen Fiction¿Era un monstruo? ¿Crees en los monstruos?... pues deberías... Ella, escapando de su cruda realidad. Él, toda una incógnita, era todo aquello que no debía ser permitido, algo que venía con advertencia de peligro .. Un asesinato...