LUNA OCULTA " la redención "

19. Forzada.

En un hermoso lago en la manada de Cork un par de lobos Alfas se enfrentan a muerte, el lobo negro a mordido el cuello del cobrizo y luego viceversa; también sus patas y lomo, pero ninguno se queja y aunque hay sangre de por medio; ellos no descansan prácticamente esto es una pelea a muerte; pero este par de lobos son fuertes y no se dejan vencer...

La Delta aún asustada va en busca de Declan quien podría hacer algo para separar a este par de lobos, lo peor es que han llegado miembros de la manada de Waterford como el próximo Beta y otros más, prácticamente si no se separan se iniciará una guerra.

— Declan por favor separénlos.— le pide Livana rogándole a Declan pues no quería que su Amor saliera lastimado.

Declan habla con el Beta de Waterford y acuerdan separarse y salir de la manada sin problemas, mientras retenián a sus Alfas, pero lo que los miembros de la manada de Waterford es que si próximo Alfa pelea por su Luna o la perderá para siempre pues el Alfa de Cork la estaba reclamando como suya.

En cuestión de minutos unos muy cansados lobos son retenidos por sus betas y guerreros y estos ya exsautos se intentan retirar, se calman un poco y Kenneth le dice al Alfa de Waterford ya convertido nuevamente en humano.

— La marca que salga primero por bendición de la Diosa en su cuello se quedará con ella, pero está noche mi Luna será mía.— Livana entiende que desea hacer su Alfa e intenta transformarse pero Kenneth lo prevee y la toma de sus muñecas, y la carga en su hombro, y la lleva a dentro de la mansión; mientras un desolado Alfa ve con impotencia como un maldito Alfa abusara de su Luna, su Amor;  su vida.

El Alfa de Waterford no lo soporta y sale corriendo a lo espeso del bosque y se escuchan los aullidos melancólicos por su amor...

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Livana

Luego de hablar con Declan examine la habitación pude salir por la ventana y pasar a otra habitación y luego a la mía donde me puse ropa digna, luego salí de casa, pues Oscar me informo que Reigan estaba llegando a Cork, quise verlo.

Lo interzecte en la plaza y lo lleve al lago, estaba besándonos y acariciándome; estar con Reigan era genial, mi corazón estaba al máximo, amo a este hombre de manera increíble; y deseo pasar mi vida con el; se que la Diosa bendecirá mi unión y saldrá nuestra marca y podré darle cachorros.

Pero estoy muy entretenida dándole besos en su cuello cuando Reigan se tensa y no es por menos pues mi Alfa Kenneth estaba llegando.

— Alfa Kenneth; pensé que nuestra audiencia sería en la tarde, no aquí en el lago.— le dice mi amor a el, al Alfa Kenneth.

— Que haces con mi Delta, tocandola y besándola como tuya...— miro a Reigan quien sonríe.

— Es mía, mi mujer y será mi Luna, la luna de Waterford; ya le he marcado.— yo solo lo veo.

— Ella no te pertenece tiene dueño y piensa reclamarla, y la besara cada parte de su cuerpo hasta borrar todas tus huellas.— pero yo niego; me da escalofrío de pensar que otro hombro me toque, abrazo a Reigan y le pido no lo permita, el Alfa desea dañarme, siempre me ha odiado.

—Mi amor por favor Reigan no lo permitas ...— .

— Entregalá Reigan ella no es tuya y jamás se irá de Cork, aquí es donde pertenece, búscate otra luna, ella es mía.—

Pero mi Alfa Reigan enfurece cuando esté lobo me reclama; se le lanza en ataque.

Estoy muy asustada llevan rato peleando a muerte y están lastimados, lo peor es que atacan sus cuellos, veo a Declan y le pido ayuda, de un momento a otro noto como los guerreros sostienen a los Alfas y se calman un poco.

Noto como Kenneth se convierte en humano y solo se pone unos pantalones, de manera rápida;

— La marca que salga primero por bendición de la Diosa en su cuello se quedará con ella, pero está noche mi Luna será mía.— le dice Kenneth a mi Alfa; Reigan y me espantó e intento correr, pero Kenneth es muy rápido y me toma de mis muñeca y me sostiene fuerte; me sube a su hombro y me lleva a dentro de la mansión, el es el Alfa y su poder es insuperable, todos nos ven; estoy asustada, no se que pretende exactamente el Alfa conmigo.

— Alfa por favor déjeme ir con el, yo nunca le he hecho nada malo, solo servirle.— le pido estés entra en la misma habitación que estaba y me deposita en la cama, pero esa vez lo hace suave, pensé que me aventaría a la pared o algo así.

Estoy asustada y el lo nota; camina de un lado a otro; tratando de calmarse, tiene sangre seca en su pecho.

Luego de unos segundos se sienta a mi lado pero por instinto me cortó y esto a el le molesta.

Ve mi Manilla e intenta romperla, pero no lo permito y escondo mi mano.
Pero luego deceso escucho un gruñido fuerte, volteo a verlo directo a sus ojos, y este intenta besarme, pero lo esquivo rápido.

— Alfa por favor. No. Su Luna. — le recuerdo pero no sé que pasa o digo por qué se enfurece más...

— Esa eres tu.— Toma mi mano, y con su otra mano arranca la Manilla de protección al vínculo y al mismo tiempo se me va encima y me besa a la fuerza, ahora es peor mi olor está intensificado y el está enloquescido.

— Alfa; no por favor....( Lloro) — con una mano tiene mis brazos y con la otra toca mi cuerpo.

Es muy rápido y ha roto con sus garras mi chaqueta y también mis pantalones; estoy asustada está desnudandome;  ahora besa mi pecho y en cuestión de segundos ha roto mi brasiel, solo me divide mis bragas y sus pantalones; pero se los quita en un segundo.

— Por favor, Alfa NO...( Estoy llorando no quiero..) — Kenneth solo me besa y muerde un poco mis pechos, llena su mano a centro y lo toca por encima de mis bragas, y luego mete su mano y me toca.

— No, por favor; no no quiero Alfa...por favor...— saca su mano de mi intimidad; había intentado un dedo en mi.

— Ohh mi Luna estás seca.— me dice besando mi cuerpo. Sostiene aún mis brazos y con una mano rompe mis bragas, puedo ver su miembro grueso y grande...

Baja un instante a mi centro y lo humedese,  con su lengua.

— Sabes delicioso; princesa.— y vuelve a besarme.

Estoy llorando, desesperada.  Logro soltarme de las manos; pero el está encima de mi, prácticamente refriega su miembro en mi entrada; lloro, pero con mi última esperanza lo tomo de su rostro y hago que me vea a mis ojos.

— Por favor Kenneth así no ..  por favor. — le digo pero el toma mi rostro y pasa su dedo por mis labios; y me dice.

— Lo siento mi amor, are que me ames...

Y de una sola embestida me penetra; lloro y grito, por la instrucción; espera unos segundos a qué me acostumbre mientras, me besa, y empieza con sus movimientos fuertes y duros, lloro, el jadea y respira fuerte.

— Ohhh mi princesa estar contigo es estar en el cielo, mi amor...— da tantas embestidas como puede... Besa mis labios, cuello y pechos, y luego siento como se calienta y sus calambres se está corriendo; me aprieta a el y toma mi cuello fuerte y lo muerde.

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