—suficiente. No voy a gastar saliva contigo.— camine fuera del edificio
—¿adonde vas Hoshi?— pregunto a lo lejos Eijiro, Bakugou se quedó a su lado sin moverse
—voy a ayudar a los demás.— lo vi sobre mi hombro— No quiero que nadie salga herido por mi culpa.
—¡¿Tu culpa?!— volvió a gritar el rubio idiota— ¡No están aquí por ti, para ellos solo eres la hija de all migth. No causes más problemas porque si vas solo serás un peón! — me quede en silencio ante sus palabras, en un punto que muy en el fondo de mi sabía que era correcto.—¡así que no te pongas en peligro!
Lo mire por unos segundos, tenía razón pero no voy a hacer lo que él quiera ¡es un idiota!
Seguí mi camino, no me entregaría ni nada por el estilo. Observaría de lejos. Podría ser de ayuda pues mi quirk lo podía a usar en larga distancia
—¡Vuelve aquí idiota!— Que tarado ¿enserio me cree tan tonta?
—¿¡Bakugou!?— estaba por atacarme, o eso creía Eijiro.
Deje que la explosión llegara. No me daría a mi, estaba destinada a el villano invisible que se abalanzaba sobre mi.
—me sorprende que se lleven mal siempre y en combate sean tan confiados de el otro..— pensó Eijiro, era muy confuso la situación que tenían sus amigos ¿como pueden tener esa confianza odiándose.— ¡son geniales!
—Vámonos ya. — Bakugou camino y los otros dos lo siguieron
Aunque la rubia tenía en cuenta que debía estar calmada, le preocupaba mucho su padre. Era imposible estar tranquila cuando un hombre tan tenebroso hubiera dicho que lo asesinaria, sumando que tenía su lesión y que su tiempo era limitado estaba preocupada
—¡quita esa maldita cara!— me sorprendí un poco que se diera cuenta de mi preocupación— Confía en tu padre, él no es un inútil. Que tú lo seas no significa que él igual.— ¡idiota!... pero logró tranquilizar mis nervios.
—Lo se.
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—¡Aizawa-sensei!— active mi don evitando que el nomu le diera otro golpe. Estire mi mano a él para que tuviera más concentración ¡es demasiado fuerte!
Mire a aizawa, quería que hablara con él
—vete de aquí.
—No lo dejare, no voy a quedarme de brazos cruzados
—te prohibí que pelees ¡largo!
—Más entrometidos..— el hombre con manos por todo su cuerpo empezó a rascarse su cuello con desesperación. Fue muy rápido.. se abalanzó sobre mi tratando de tocarme ¡haz algo ya!— ¿que es esto?— preguntó extrañado al ver que su mano se detuvo pocos centímetros lejos de mi cara
¡No podré aguantar más! El nomu es muy fuerte y tengo mucho miedo ¡no puedo pensar bien!
—que niña tan molesta.— seguía sin poder mover su mano, solo un poco porque ya me estaba debilitando.
—¡Largo!— sentí que desgarre mi garganta por el esfuerzo que hice al tomar el control de su cuerpo lanzándolo lejos. Pero no duró mucho pues un portal lo regresó a donde estaba antes de atacarme.
—Tal vez si..— me dejó de prestar atención y se dirigió a Tsuyu y mydoria
