𝐇𝐄𝐍𝐊𝐎━━━𝐁𝐚𝐤𝐮𝐠𝐨𝐮 𝐊𝐚𝐭𝐬𝐮𝐤𝐢

056

La semana pasó con su trabajo en la agencia de Mirko claro.

Llego temprano a los dormitorios así que decidió darse una ducha para bajar a cenar; tardo un buen rato hasta que se sintió limpia y empezó a cambiarse

Mientras cosía una costura rota de una camisa suya la aguja llegó a hacer contacto con su pulgar haciendo un corte diminuto pero la sangre brotó con escándalo.

Eso no fue lo que alarmó a la chica, si no el color de esta.

— ¿Sangre negra?— se preguntó a sí misma con terror, pronto las palabras de su madre llegaron a su mente

"Solo necesitas un poco de mi sangre y con el tiempo serás pura"

No recuerda mucho lo que pasó después de eso, estaba débil y recordaba esas palabras con dificultad. ¿Acaso cuando se desmayó le hizo una transfusión sanguínea?

No, imposible. No tenía el equipo en esos momentos..

¿Debería decírselo a alguien?

—Mejor me duermo; no tengo hambre.— se dijo a sí misma para undirse entre las sábanas de su cama.

No tardo mucho para logras su cometido, entró en un sueño profundo tal vez de no ser por sus pesadillas hubiera sido un buen descanso

Pero no fue así; las pesadillas se manifestaron como cada noche haciéndola sudar y llorar; eran demasiado reales.

Así pasó la noche entre quejidos y lágrimas mientras su cuerpo estaba entre una lucha interna para poder soportar esa nueva mutación en su sangre; la sangre negra era demasiado peligrosa para su mecanismo podría incluso llámerse veneno

¿la razón de que Ume le regalara un poco de su sangre?

Necesitaba despertar el Kontorōu no se trataba de que no lo pudiera hacer sin ser sangre pura pero su cuerpo no lo resistiría.

Tenía que ser fuerte físicamente y la única forma de hacerlo era convirtiéndola en una Kimura.. ¿Pura?

Sus compañeros recién se habían subido a dormir por lo que no era tan noche; su cuerpo empezó a doler fuertemente interrumpiendo su sueño

Se levantó a paso lento; su boca la sentía seca y deseaba un vaso de agua con ansias.

Sus párpados estaban morados y sus ojos cristalinos, estaba más pálida de lo normal y sudaba horrores el frío la hacía sentir escalofríos en todo su cuerpo y la fiebre no era normal.

El cambio en su sangre se estaba manifestando de manera dolorosa y asquerosa.

Y así fue hasta que sintió un líquido caliente bajar por su nariz llegando a sus labios; sangre.

Escucho la puerta principal siendo abierta, alguien había entrado.

Los tres la observaron con preocupación y el primero en actuar fue un rubio con ojos rubí.

—¡Hoshi!— exclamó mientras soltaba sus cosas dejándola en el suelo para acudir a su ayuda; se veía realmente mal. Una vez llegó a ella su cuerpo falló dejándose caer en los brazos de Katsuki.

—¡Llama a el profesor!— dijo con desesperación a alguno de sus acompañantes; siendo Shoto quien tecleó el número de su profesor con rapidez

Izuku observaba con preocupación a la chica entre los brazos de Bakugou; él la tomó con fuerza llevándola a el sillón de la sala. Ninguno entendía lo que estaba pasando y estaban asustados

—Ya vienen.— dijo Shoto mientras se incaba de la misma forma que Katsuki.— está hirviendo.— comentó a el sentir su frente.

—¿!Que carajos te paso!?— el rubio tomó las mejillas calientes de Hoshi para verla mejor pero su mirada era perdida y