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JUNGKOOK POV.

El hospital huele a desinfectante y medicina. Me encuentro acostado en una camilla con la mirada fija en el techo blanco conforme resiento siento el ardor en el hombro, producto de la bala que rozó mi piel. Las luces fluorescentes parpadean ligeramente añadiendo un toque de incomodidad al ambiente ya de por sí es tenso y frío. Una enfermera pasa a mi lado revisando mis signos vitales y asegurándose de que el vendaje esté en su lugar. Respiro con dificultad, sintiendo cómo el dolor late en mi hombro con cada latido de mi corazón.

Clara envió a unos hombres por mí que me trajeron de inmediato y me dejaron la noche pasada. Desconozco cuándo pueden darme de alta o cuándo vendrán a verme, no he recibido comunicación desde entonces y tanto tiempo a solas me ha dejado con más dudas que respuestas.

Lo ocurrido en aquella iglesia, orfanato... ¿qué carajos fue eso? Me siento en la necesidad de hablar con Yoongi, pero aún no me siento listo para brindar respuestas. Todo esto es una mierda.

El sonido de mi celular vibrando en la mesilla junto a mí me saca de mi ensimismamiento. Estiro el brazo sano aún sintiendo el pinchazo del suero en el otro y tomo el dispositivo con mal mirar. Un mensaje de un número desconocido parpadea en la pantalla: "Necesito verte. Hotel Majestic, habitación 405. Es urgente."

Frunzo el ceño, tratando de recordar si conozco a alguien que podría enviar un mensaje así. ¿Forcraft? ¿Yoongi?

A menos que.

No, no sería posible, ¿o sí?

No.

¿Sí?

Desconecto el suero y me incorporo pese a que el dolor me hace jadear. Ignoro las protestas de mi cuerpo para mantenerme acostado y me visto rápidamente asegurándome de que el vendaje esté bien colocado. Salgo de la habitación a paso veloz procurando esconderme de las enfermeras y personal que se encuentran al mínimo. Normal de un hospital tan poco recurrido como este en medio de esta pequeña ciudad en medio de la nada.

Resiento la tensión en mis músculos con cada movimiento al salir tras procurar pasar desapercibido y por fortuna, lo logro. Solo espero que no revisen las cámaras de seguridad y respecto al pago, bah, que la mafia se haga cargo.

Las calles se encuentran iluminadas por las luces de los faroles y el aire fresco de la noche me golpea el rostro, despejando un poco mi mente. Detengo un taxi montándome en él con el semblante fruncido y las manos sudando. En definitiva esto no pinta bien.

— Al hotel Majestic —murmuro con tono bajo.

Él asiente y se lanza por la avenida sin decir mucho al respecto. Yo me hago pequeño sobre el asiento mordiéndome la uña con la cabeza yendo a mil por hora y esperando lo peor. No tengo nada con qué defenderme, podría ser una estupidez ir, pero confío en mi instinto.

Llego al Hotel Majestic y subo por el ascensor hasta la habitación 405 tras cruzar la pequeña recepción. Mi corazón late con fuerza y no sé si es por la adrenalina o el dolor que sigue pulsando en mi hombro. Toco la puerta y espero, pero poco antes de perder la paciencia la luz rojiza se torna verde permitiendo el ingreso.

Frunzo el ceño.

Empujo la puerta ingresando en silencio. Todo está oscuro y nadie ha venido. Esto se siente como una jodida trampa, pero tampoco puedo mostrar signos de vulnerabilidad.

— ¿Forcraft? —Llamo vacilante dando un pie al interior—. ¿Yoongi? Mierda, donde esto sea una jodida broma...

Ingreso cerrando la puerta detrás mío. Silencio.

INNOCENT 2 ; YOONMIN : +21 ( CORREGIDA )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora