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Pasaron dos días antes de que Charlie le permitiera salir del penthouse. Vaggie se negó a interceder en su nombre; aparentemente, el demonio había sido aún más estricto con su recuperación, lo cual no era una comparación justa, pero ninguna de sus novias parecía interesada en reconocer ese punto. Independientemente, Lute finalmente demostró que era más que capaz de regresar al trabajo.
ーRealmente no tienes que hacer estoー dijo Charlie, mordiéndose el labio inferior con un colmillo.
ーRealmente creo que síー respondió Lute, alisándose el uniforme.
Sorprendentemente, mientras tanto no había ocurrido nada demasiado catastrófico, aunque hubo varios acontecimientos con los que el trío tuvo que lidiar ahora que estaban de regreso en sus respectivas posiciones.
Vox se había… adaptado a estar en el hotel. No estaba particularmente feliz por eso, pero se mantuvo receloso ante la perspectiva de regresar a la torre Vee para recoger sus pertenencias. O romper oficialmente los lazos con los otros Vees.
Personalmente no tenía nada en contra de Velvette, para gran desconcierto de Vaggie, pero no quería toparse con Valentino. Angel estuvo de acuerdo en que una ruptura limpia le vendría bien. Alastor había estado... curiosamente ausente de la conversación pero al menos no había empeorado las cosas.
ーRealmente no lo hacesー Vaggie levantó la vista de su cuaderno y suspiró. ーPero lo harás de todos modos, ¿verdad?
ーExactamente.
ーPor supuesto.
Lute descubrió que también había perdido algunas llamadas de Zestial. Después de cierta frustración inicial, algo de angustia y algunos viajes de ida y vuelta a través de las cinco etapas del duelo, Adam se había calmado lo suficiente como para disculparse con Carmilla por explotar con ella inicialmente.
Carmilla tomó la disculpa con calma y le dio un trabajo probando armas en una de sus fábricas. Un pase gratuito para promulgar violencia inofensiva junto con dinero que podría gastar en más jodidas alas atómicas había reparado completamente su ánimo y Adam estaba listo para pasar el rato con Lute y charlar con algunas de las caídas.
Zestial, por supuesto, ya había oído hablar de las recién caídas a sus hijos adoptivos. En el lío, nadie les había informado que Adam ahora era un pecador, pero Righty y Boobs se hicieron cargo de escoltarlo hasta el octavo anillo para reunirse con ‘sus chicas’
