No juegues con mis sentimientos.

Capítulo 1: Un final y una repetición.

Un estresado Armin se encontraba en el aula junto a su gemelo, Alexy hacia todo lo posible para tratar de calmarlo, Armin no era de los que se estresaba rápidamente, solo cuando un videojuego se congelaba o el lag en las partidas en línea, pero era raro verlo así por algo de la vida real. Armin quería pasar algo de tiempo con su novio, si, novio, Lysandro. Lysandro había logrado que Armin perdiera el interés en las chicas 2D que traían muerto a Armin, solo para llevarlo al lado oscuro según el gamer. Llevaban juntos casi cuatro meses, todo el mundo lo sabía, menos sus padres que apenas y lograron aceptar la homosexualidad de Alexy. De Armin solo esperan que pudiera mantenerse, claro que si él era capaz de darles nietos sería lo mejor. Claro que como están las cosas no sería posible.

El más alto de los dos era el que más dedicado se veía en la relación, no era que Armin no fuera cariñoso, pero el moreno era inexperto en esas cosas y parecía que los genes de lo romántico los tenía más Alexy. Claro estaba que Armin también ponía de su parte para que su relación funcionara y lo demostraba más claramente ese día. Por algún motivo, Lysandro se estaba comportando más afectuoso de lo normal, no era algo que molestara a Armin en particular pero sentía que debería ser el quien lo invitara aunque sea una vez.

-Por última vez, no harecosplay de maid o esas cosas ¡Soy un hombre!- Se levantó enojado Armin de su lugar.-

-¿Tienes una mejor idea? No quieres invitarlo a la paya, no quieres ir de día de campo con él, no quieres prepararle una cena. Hombre, eres más complicado que una chica.- Se quejó su hermano.

-Tanto tú como él son conscientes que no me gusta estar al aire libre, y no se cocinar. No voy a darle a Lysandro algo no comestible y quemado.-

-Buen punto.- Armin volvió a su lugar, los gemelos se quedaron un rato en silencio hasta que Alexy pensó en alguien.- ¿Y si le preguntas a Castiel? Es su mejor amigo, puede darte una idea.-

-Puedo intentar.- Se volvió a levantar de su lugar mientras deseaba que no estuviera en el jardín.-

Gracias a que Lysandro era su novio, logro entablar amistad con Castiel. Claro, Armin al principio estaba enojado porque el pelirrojo se burló de él cuando se organizó un concierto. Eso ya estaba en el pasado, se había hecho buenos amigos los cinco, Castiel, Nathaniel (novio de Castiel), Alexy, Lysandro y Armin. Esperando que Nathaniel le facilitara la búsqueda, se dirigió a la sala de delegados. Toco una vez pero no abrieron, toco otras dos veces más y volvieron a ignorarlo. Se quedó parado esperando si se animaban a abrirle, de la mente no se le iba la posibilidad de que estuviera vacía la sala, entonces estaría como idiota parado esperando por una respuesta así que tomo la perilla y abrió lentamente para ver el interior del lugar. Deseo con todas sus fuerzas no haber hecho eso.

Dentro de la sala estaba Nathaniel sin su saco gris, la camisa la tenía hasta arriba y se sujetaba fuerte mente de los brazos de la persona que estaba frente a él. Por otro lado, el chico de ropaje oscuro no traía puesta su chaqueta, su blusa estaba levemente abierta y su boca estaba completamente entretenida jugando con los pezones del rubio. Armin no sabía que hacer así que cerró la puerta para que nadie se diera cuenta, con la mano aun en la perilla de la puerta se quedó pensado, no podía ni parpadear, dejo la puerta y comenzó a caminar hacia el gimnasio.

-Oi.- Saludo Castiel que iba entrando al edificio, Armin lo ignoro completamente, no le dio mucha importancia, el siguió su camino hasta la sala de delegados para ver a "Su rubia" y molestarlo mientras trabaja.-Nathaniel.- Dijo Castiel mientras abría la puerta sin tocar, presenciando una escena un poco más fuerte que la que presencio Armin.

Y como no quedarse paralizado ante esa escena, su mejor amigo y su novio lo estaban traicionando, no podían alegar que era un mal entendido, como lo dijo una vez su ex novia. Lysandro se encontraba sobre el delegado, acorralándolo en una mesa con la camisa abierta y a mitad de su espalda sin mencionar que la bragueta estaba abierta igual, mientras el delegado que estaba solo con su camisa tenía sus brazos alrededor del cuello del más alto y sus piernas en las caderas. Ahora entendía la seriedad de Armin, lo probable es que también los viera y no dijera nada, pero es no era Armin, él era de armas tomar. Mostrando su claro enojo y decepción, se lanzó contra su amigo dándole un fuerte golpe en el rostro, lo suficiente para que cayera. Pero no era suficiente, volvió a ir hasta el ignorando los constantes gritos de Nathaniel diciéndole que se detenga. Aun así siguió golpeando a Lysandro que trataba de cubrirse de los golpes de Castiel, en un instante Lysandro comenzó a defenderse hasta que Nathaniel, ya vestido, se puso en medio pero recibió un golpe de Castiel.

-Mi novio y mi mejor amigo, ¿Quién lo diría? -Castiel trato de calmarse pero era imposible.- ¿Sabes lo arrepentido que estaba por no creerte cuando me dijiste que no tratabas de quitarme a Debrah? ¡¿Lo sabes Nathaniel?! ¡No! Tal vez Lysandro si lo sabe, el me apoyo en eso momentos difíciles para mí. Sabias lo arrepentido que estaba por dudar de Nathaniel, me dolía más que mi separación la tipa esa. Te conté todo Lysandro, solo tu sabias lo idiota que estaba por Nathaniel. ¡Eras como mi hermano carajo!-

-Castiel. . .yo.-

-¡Cállate mierda! ¿Qué planeas decirme? ¿Lo siento? Conmigo no es con quien tienes que disculparte, es con Armin. Tal vez él te perdone, por ahora tengo que pensarlo. En cuanto a ti Nathaniel, si durante un tiempo fingí tenerte odio, ahora lo tienes de verdad. Ni tu hermana caería tan bajo.-

Castiel dejo ese lugar antes de que la furia volviera a apoderarse de él, tenía que estar solo pero también estaba Armin y conociéndolo no le diría a su hermano ya que Alexy tenía a todas las chicas de su lado listas para atacar si lo lastimaban a él o al gamer. Recordó que lo vio salir del edificio y como era imposible que estuviera en el jardín o el patio, fue a buscarlo al gimnasio. A esa hora no había clases en al gimnasio, casi todos los salones estaban en clases y casi nadie le gustaba perder tiempo en ese lugar teniendo un jardín y un patio.