Sexología || HYUNHO ||

Capítulo Octavo

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El timbre sonó, los alumnos guardaron los cuadernos y lapiceras en su mochila, uno a uno fueron retirándose luego de despedirse del mayor, que en lugar de lograr corresponder su gesto de amabilidad solo limitó su rostros  sonreír de nervios, el aparato vibrante en sus adentros se retorcía sin control, sus ojos aguados pedían e imploran piedad, Chan se paró en frente de él a devolver el informe de participaciones con las marcas en azul de cada compañero.  Minho lo tomó sin verlo demás.

— Tenga buenas- … profesor, si aún le duele podemos llevarlo a la enfermería, ¿necesita ayuda? — su cortesía no le permitió brindarle la confianza suficiente, era menor y el secreto escondido en sus pantalones ya lo tenía en cuenta alguien.

— Ya se me está pasando, no te preocupes — lo calmó, aun así Chan lo miró con duda pero igualmente salió del salón de clase dejando finalmente al castaño con el último estudiante al que se le ocurría ahorcar.

Se acercó, sacó de su bolsillo el dispositivo de su celular, bajando la intensidad al ritmo menos tortuoso, el profesor soltó un suspiro largo de alivio, abriendo sus labios para sacar aquella carga que contuvo esas pocas horas, el ruido de desahogo y confusión cuando sintió la presencia del más alto detrás de él, Hyunjin rió bajito, sus manos se colocaron encima de sus hombros y ejercieron presión para otorgar en su piel un leve masaje, movimientos que lo hicieron gemir en disfrute, cerró sus ojos aun con la piel erizada como el de una gallina.

Sin embargo, era un distractor, Hyunjin solo quería evitar tocar el tema de su "sermón" por actuar así, olvidar las réplicas para divertirse con el calor de la situación. Sus párpados cerrados le impidieron ver la manera húmeda en la que los labios del menor se juntaron en su cuello, un poco más abajo de su oído, un hormigueo y cosquilleo al mismo tiempo fundiéndose en chupones largos, la lengua acariciando cada espacio de aquel lugar.

— ... ¿Mucho trabajo profesor Lee?, ¿le gustaría desestresarse un poco? …

— ¿L-la puerta está cerrada? — no respondió, lo hizo a un lado con su antebrazo mirando si había una rendija por la puerta por si alguien pudiera verlos, era un riesgo más a la lista — en otro momento te atiendo y en cuanto a esta cosa … — hizo referencia al vibrador — quítamela, está muy arraigado al fondo — se quejó viéndolo a los ojos en una expresión de ruego — está doliendo mucho.

— No resistes nada kitty — dijo decepcionado, tomó el dispositivo en el aplicativo y lo apagó con la boca en una línea desanimada — Ahora, hazme el favor de quedarte quieto — el tono ronco lo hipnotiza unos instantes, obedeció luego — no quiero que te muevas — al principio Lee lució desconcertado e intrigado, algo asustado por el hecho de sentir la mano contraria descender hasta quedarse entre sus piernas y desabrochar su correa con un ágil movimiento que lo dejó perplejo.

Esa mano se escudriñó por debajo de su rompa interior para introducirse gentilmente entre sus labios vaginales, halló entre ellos esa común humedad, su vagina estaba suave, recientemente estimulada, sus labios no estaban cerrados dándole el acceso correcto para que con sus dígitos pudiera excavar y extraer ese aparato, lo retiró recibiendo un jadeo como respuesta, Minho inclinó su cabeza a un lado, su mejilla se pegó al rostro de Hyunjin quien tenía sus cejas fruncidas por la concentración, pudo respirar mejor ahora que su cuerpo no estaba reteniendo ningún clamor por libertad.

— Si me disculpas, iré a lavar esto, nos vemos luego kitty — avisó, una sonrisa ladina y una vuelta para marcharse, escuchó como abrió la puerta y como sus pasos se alejaban chocando con el piso en eco.