Un legado oscuro de un deseo prohibido Severus snape

Chapter 12 el inicio de una oscura obsesión🔞

𝐴𝑉𝐼𝑆𝑂 𝐴𝐿𝐸𝑅𝑇𝐴 𝐷𝐸 𝐶𝑂𝑁𝑇𝐸𝑁𝐼𝐷𝑂 +18 𝑌𝐴 𝐸𝑀𝑃𝐸𝑍𝐴𝑀𝑂𝑆 𝐶𝑂𝑁 𝐿𝑂 𝐹𝑈𝐸𝑅𝑇𝐸 𝑌 𝐸𝑋𝑃𝐿𝐼𝐶𝐼𝑇𝑂 𝐻𝐴𝐵𝑅𝐴 𝑀𝐴𝑆 𝐶𝐴𝑃𝐼́𝑇𝑈𝐿𝑂𝑆 𝐶𝑂𝑁 𝑇𝐸𝑀𝐴𝑆 𝐸𝑋𝑃𝐿𝐼́𝐶𝐼𝑇𝑂𝑆 𝐴𝑆𝐼 𝑄𝑈𝐸 𝐿𝐸𝐸 𝐵𝐴𝐽𝑂 𝑇𝑈 𝑃𝑅𝑂𝑃𝐼𝐴 𝑅𝐸𝑆𝑃𝑂𝑁𝑆𝐴𝐵𝐼𝐿𝐼𝐷𝐴𝐷

Severus Snape se sentó en su escritorio en el salón de clases poco iluminado, una mezcla de ingredientes de poción y pergaminos esparcidos al azar ante él. Su mirada penetrante se fijó en la tarea en cuestión, sin embargo, sus pensamientos se desviaron donde no deberían, hacia cierta joven estudiante que había captado su atención de maneras que no podía comprender del todo.
Cuando se retiró a su habitación y se acostó en su cama esa noche,
la imagen de Ashley Brigit permaneció en la mente de Severus, negándose a ser desterrada. Su inocencia y pureza parecían chocar con los oscuros deseos que se arremolinaban dentro de él, una contradicción que tanto lo intrigó como lo asustó.

girando en su cama, Severus rembató en voz alta: "Tal vez ella esté esperando su tiempo, esperando para desatar su oscuridad oculta. O tal vez, ella realmente es tan modesta y pura como parece". La incertidumbre lo roíó, agitando una mezcla de emociones enterradas en el pasado que luchó por contener.

En las profundidades de la noche, mientras las sombras bailaban a través de la habitación, Severus se encontró atrapado en una red de deseos conflictivos. Su fascinación por Ashley Brigit rozaba la obsesión y posesión, un territorio peligroso del que sabía que debía alejarse. Sin embargo, la atracción de su inocencia, junto con el enigmática aura que la rodeaba, fue una tentación que no podía descartar fácilmente.
Con un suspiro,
Severus puso sus manos en su cara, el peso de sus pensamientos oscuros se volvía como una nube sofocante. "Debo mantener mi distancia", se susurró a sí mismo, con una nota de desesperación atando su voz. Lo último que necesitaba era estar enredado en asuntos del corazón y tonterías del amor o relaciones íntimas o tener pareja, especialmente con una estudiante tan pura inocente que no se dejaría tentar por la oscuridad que se aferraba a él como una sombra.
Cuando el sueño finalmente lo reclamó, Severus soñó con sombras y luz, con la inocencia de Ashley,
La imagen de Ashley Brigit, con sus ojos conmovedores y su comportamiento amable, persiguió sus sueños, dejándolo con una sensación de anhelo que no se atreviera a reconocer.

En el silencio de la noche, Severus Snape luchó con sus demonios internos, luchando por resistir el encanto prohibido de un deseo que amenazaba con consumirlos a ambos.

A mitad de la noche, Severus se levantó de su cama, sudoroso, agitado y excitado. El sueño que lo atormentó se desvaneció rápidamente, dejándolo sintiéndose sucio y repulsivo. Aunque se había despertado a mitad de la noche, teniendo una erección, Severus se negó a satisfacerla, aunque sus partes más bajas estaban llenas de tensión y anhelo.

Sacudiendo la cabeza, Severus caminó hacia la ventana de su habitación, respirando profundamente, tratando de calmar sus ansias. Una ráfaga de aire fresco golpeó su cara, limpiándolo de la humedad de sudor, dejándolo sintiéndose frío y vacío.

"Estúpido sueño", murmuró Severus, frotándose las manos por la cara, "No sé por qué ella tiene tanto poder sobre mí. No sé qué hacer".
Con un suspiro, Severus observó la luna brillando en el cielo, sintiendo una pizca de anhelo. Las estrellas parecían burlarse de él,
brillando cegadoramente, mientras sus pensamientos se hundían en la oscuridad, donde la luz nunca alcanzaría.

Después de una eternidad, Severus finalmente cerró la ventana y regresó a la cama, pero no durmió en lo absoluto. Su mente estaba demasiado revuelta, pensando en la chica que no podía dejar atrás.

Cuando la luz del amanecer comenzó a colarse a través de la persiana de la ventana, Severus se dio cuenta de que ya no podía resistir el impulso de acercarse a Ashley Brigit, de tocarla y de besarla. Con la promesa de ayudarle a convertirse en una bruja excepcional, Severus se dio cuenta, aunque lo negara, que había estado perdidamente enamorado de Ashley Brigit,
su pecaminosa y pura alumna , desde el primer momento en que la vio.
El deseo creció dentro de él, convirtiéndose en una necesidad que no podía reprimir. Severus se preguntó si estaría dispuesto a correr el riesgo de perder su trabajo para poder estar con Ashley