¿Como no lo noté antes?

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¿Cuanto tiempo llevamos así?, ¿cuando se cansará de hacer esto?, mierda...

No pasó mucho dentro de la ducha y pasó aun menos tiempo en llegar a la cama apenas salió, aun corría algo de agua de su cuerpo cuando me desconectó de ese suero en mi mano y terminó por acomodarme en medio de la cama, apartó el montón de sábanas que me cubrían y me desnudó por completo entre gruñidos de frustración, pues aun con sus movimientos torpes por la desesperación, lo hizo con sumo cuidado 

Mi corazón no paró de latir con fuerza, pues su olor se extendió a mi al rededor y en cuestión de segundos, la habitación entró en un calor tan abrazador, que comencé a sudar aun con la hostilidad del clima 

— ¿Así que estuviste escuchándonos? — cuestionó apenas me abrió de piernas, — eso es muy descortés... — ronroneó de forma profunda y hasta con algo de picardía, sentí como restregó su rostro caliente contra mi pantorrilla y pasó su lengua por mi piel, mostrándome lo mucho que salivaba, pues sentí que la humedad recorrió desde esa zona, hasta la parte trasera de mi muslo, entré en desespero al oler sus feromonas, pero vamos, que he estado realmente frustrado y mis necesidades me han hecho desearle mas que a nada en el mundo, así que un poco de acercamiento carnal no me vendría nada mal 

Su lengua recorrió mi piel hasta llegar a mi entre pierna e inhaló profundamente cuando llegó ahí

— Ese tipo, ¿es el mismo que mencionaste esa noche?, ¿era su aroma el que te invadía? — cuestionó entre jadeos y terminó por besar mis bolas, eso se sintió, extrañamente bien, después fue su lengua la que comenzó a recorrerme y al final, llegó hasta mi verga, la cual metió en su boca sin cuidado alguno, comenzó a mamarlo con algo de intensidad y un jadeo se me escapó llamando su atención, pues se detuvo y sentí que se incorporó ligeramente para después, volver a lo suyo, — eso me molesta mucho — soltó después de una cuantas succiones, sentí mas movimiento que antes y noté que ponía una almohada debajo de mi cadera, me acomodó hasta que quedé alzado de mi parte inferior, sentí que fueron sus manos las que juguetearon con mis genitales, los acariciaba, me masturbó y un resoplido salió de mis labios cuando su dedo se deslizó hasta llegar a mi entrada, — quiero hacerte mío — soltó mientras que presionaba y retiraba sus dedos con delicadeza, hasta que lo sentí, esa sensación tan extraña volvía y algo de liquido salio de mi interior, alarmándome al instante

Gerald siguió presionando y sentí como uno de sus dedos comenzó a resbalarse en mi interior

— Puta madre... — jadeó cuando metió un poco mas de su dedo, gimoteé del placer y dolor, lo metió un poco mas y lo escuché resoplar impaciente, entonces lo metió por completo y puta madre, se sintió jodidamente bien, se acercó mas a mi cuerpo, presionó mi interior con su dedo y lo sacó por completo, he de aceptar que eso fue algo incómodo, quise desaparecer de la pena, pero mi cuerpo me imposibilitó mover un dedo siquiera

Después volvió a tocar donde mismo y note que la presión era mayor, entendí que ya no era uno, sino dos dedos los que intentaban entrar en mi, mi agujero se abrió un poco mas y me removí apenas comenzaron a entrar, Gerald los sacó y metió en un ritmo cuidadoso y pausado, pero yo no lo soportaba, aun con lo mucho que detestara admitirlo, necesitaba mas intensidad, mi pelvis se movió y sus dedos entraron por completo, mis labios se abrieron y mi respiración agitada se hizo aun mas evidente, parecía que comenzaba a entrar en si

Gerald se mantuvo quieto, parecía querer cerciorarse que todo estuviera en orden pues he de admitirlo, mi movimiento hizo que sus dedos entraran sin cuidado alguno, pero después, el chapoteo se presentó pues movió sus dedos con rapidez, tanto que el sonido de algo muy húmedo chocando contra algo aun mas húmedo inundó la habitación, mis gemidos comenzaron a emerger y mi ceño se frunció del placer conforme movía su mano 

Omega (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora