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𝟏𝟐 𝐝𝐞 𝐎𝐜𝐭𝐮𝐛𝐫𝐞 𝐝𝐞 𝟏𝟗𝟕𝟏 ᴅᴀɪʟʏ pagᴇ six
Me levanté con todos los ánimos del mundo. Creo que nos saltamos muchas cosas, mis padres me enviaron una carta diciendo que era la decepción de la familia por haber quedado en Gryffindor. Esta noticia me había entristecido profundamente, ya que siempre había buscado su aprobación. Sin embargo, a pesar de esta sombra sobre mi corazón, había encontrado en Hogwarts un lugar donde me sentía apreciada y comprendida.
Esa mañana fría de otoño, cuando recibí la carta, las hojas caían en el patio de Hogwarts y la brisa traía consigo el olor a humedad y a tierra mojada. Al abrir la carta, el tono desaprobador y las palabras duras me golpearon como un hechizo de Stupefy. Sentí una mezcla de ira y tristeza, preguntándome por qué no podían simplemente estar orgullosos de mí por estar en una de las casas más prestigiosas de Hogwarts.
—¿Qué pasa? —preguntó Mayalen al verme con la carta en la mano y los ojos llenos de lágrimas.
—Es mis padres. No están contentos con que esté en Gryffindor —le respondí, tratando de contener las lágrimas.
—No dejes que eso te afecte, eres una gran persona y una excelente amiga —dijo Cassiopeia, abrazándome—. No necesitas su aprobación para saberlo.
Con su apoyo, decidí concentrarme en las cosas positivas. Mis amigas Mayalen y Cassiopeia se habían convertido en mis mejores aliadas en este mundo mágico. Mayalen, con su carácter dulce y su pasión por los animales mágicos, siempre sabía cómo hacerme reír. Cassiopeia, por otro lado, era brillante en Encantamientos y tenía una determinación feroz que inspiraba a todos a su alrededor. Juntas, éramos un equipo imparable y nos apoyábamos mutuamente en cada desafío.
Además de ellas, mis mejores amigos James, Remus, Sirius y Peter también estaban ahí para mí. James, con su carácter despreocupado y su actitud de "todo lo sé", no dejaba de hablar de cuánto le gustaba Lily. Era evidente para todos en Gryffindor que James estaba completamente obsesionado con ella. A menudo lo veíamos intentar impresionarla con sus habilidades en clases de Quidditch o con sus constantes bromas. Sin embargo, Lily parecía más molesta que impresionada.
En la tarde, después de una intensa clase de Quidditch, James se acercó a nosotros mientras guardábamos nuestras escobas.
—¡Vaya, vaya, Es mi querida amiga Priscilla y sus dos chicles! —dijo con su típica sonrisa arrogante—. ¿Han visto a Lily? Quería mostrarle un nuevo truco.
—James, ¿no te cansas nunca? —dijo Mayalen con una sonrisa divertida.
—¿De impresionar a Lily? Nunca —respondió, guiñándonos un ojo.
Aunque sus intentos constantes por llamar la atención de Lily a veces eran irritantes, no podía negar que había algo entrañable en su perseverancia. Empezaba a ver más allá de su fachada arrogante y descubría a un joven valiente y leal, alguien que se preocupaba profundamente por sus amigos y que, a pesar de sus métodos cuestionables, tenía buenas intenciones. Estos sentimientos me confundían mas, ya que empezaba a sentir algo más profundo por James. No estaba segura de si era amor o simplemente una fuerte amistad, pero la confusión me mantenía pensativa.
Por otro lado, Remus, con su sabiduría tranquila y su naturaleza comprensiva, siempre tenía un consejo listo para cualquier situación. Sirius, con su sentido del humor contagioso y su lealtad inquebrantable, sabía cómo levantarme el ánimo en los peores momentos. Peter, aunque más reservado, siempre estaba dispuesto a ayudar y estaba seguro de que sacrificaria su vida por sus amigos, osea nosotros.
Una noche, mientras nos reuníamos todos en los dormitorios de los chicos. Remus y yo hablabamos sobre mis sentimientos repentinos hacia James.
Fue en ese momento cuando me di cuenta de cuánto significaba James para mí. No solo era mi amigo, sino mi familia en este mundo mágico y incluso para mi algo más.
—¿Sabes, Priscilla? —dijo Remus, mirándome con una sonrisa—. A veces, las cosas que más nos duelen son las que más nos enseñan.
Sus palabras resonaron en mi mente mientras me preparaba para dormir esa noche. Pensé en mis padres, en su desaprobación y en mi propio camino en Hogwarts. A pesar de la desaprobación de mis padres, había encontrado una familia en mis amigos y una fuerza dentro de mí que nunca había conocido. Hogwarts no solo era una escuela; era un hogar donde podía ser yo misma y aprender a enfrentar cualquier desafío que la vida me pusiera por delante.
Mientras me acomodaba en mi cama, pensé en James y en mis sentimientos confusos hacia él. No sabía qué deparaba el futuro, pero estaba segura de que con mis amigos a mi lado, podría enfrentar cualquier cosa
Pero no sabíamos que venía para el futuro y era algo muy gordo...
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STELLLA' NOTES
• capítulo corto porque solo es un flashback importante para el siguiente cap
