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𝟏 𝐝𝐞 𝐣𝐮𝐧𝐢𝐨 𝐝𝐞𝐥 𝟏𝟗𝟕𝟏 ᴅɪᴀʀʏ ᴘᴀɢᴇ ᴛᴇɴ
El final del primer año en Hogwarts estaba lleno de emociones y un poco de tristeza. Los estudiantes se preparaban para regresar a sus hogares para las vacaciones de verano, y los Merodeadores no querían dejar pasar la oportunidad de hacer una última travesura antes de partir. Decidieron que una broma épica sería la manera perfecta de despedirse del año.
Una noche antes de la ceremonia de clausura, James, Sirius, Remus, Peter y Priscilla se reunieron en la sala común de Gryffindor para ultimar los detalles de su plan. Habían estado trabajando en una poción que haría que las túnicas de todos los estudiantes cambiaran de colores brillantes al azar durante el desayuno.
—¿Todos listos? —preguntó James, sosteniendo una pequeña botella de la poción multicolor.
—Listos y emocionados —respondió Sirius con una sonrisa traviesa—. Esto va a ser legendario.
— Esta va a ser una de nuestras mejores bromas los profesores quedarán perplejos— Dijo Priscilla emocionada
—Asegúrense de no derramar ni una gota hasta que lleguemos al Gran Comedor —advirtió Remus, siempre el más prudente.
Priscilla asintió, su corazón latiendo con emoción. Sabía que esta broma sería recordada durante mucho tiempo.
— Si mami tendremos cuidado— dijo burlón Sirius
A la mañana siguiente, justo antes de que comenzara el desayuno, los Merodeadores se escabulleron al Gran Comedor y vertieron la poción en las jarras de jugo de calabaza. Luego, se sentaron en sus lugares, tratando de parecer inocentes mientras esperaban a que comenzara la magia.
Cuando los estudiantes comenzaron a beber el jugo, sus túnicas empezaron a cambiar de color de forma espectacular. Algunos se sorprendieron, otros se quedaron perplejos, otros rieron, y pronto el Gran Comedor estaba lleno de exclamaciones y risas. Las túnicas pasaban de un color brillante a otro, creando un espectáculo caleidoscópico.
—¡Esto es increíble! —dijo Peter, observando el caos con una sonrisa de satisfacción.
—Definitivamente uno de nuestros mejores trabajos —añadió Remus, sin poder ocultar su propia risa.
— Travesura realizada chicos— dijo Priscilla con una sonrisa
Incluso los profesores, aunque inicialmente sorprendidos, no pudieron evitar reírse de la situación. Dumbledore en particular parecía disfrutar del espectáculo, sus ojos brillando con humor.
Después de la ceremonia de clausura, Hagrid el guardabosques que habia ayudado a los Merodeadores en unas cuantas bromas se acercó a Priscilla con un regalo especial. La enorme figura de Hagrid se agachó para estar a la altura de la joven, entregándole un libro de recuerdos envuelto en papel marrón.
—Hola, Priscilla. Tengo algo para ti —dijo Hagrid con una sonrisa cálida—. Es un libro de recuerdos. Pensé que te gustaría tener un lugar para guardar todas las fotos y recuerdos que has hecho y harás con tus amigos.
Priscilla, conmovida, aceptó el regalo con una sonrisa.
—Muchas gracias, Hagrid. Esto significa mucho para mí.
—De nada, querida. Los años en Hogwarts son especiales. Espero que llenes este libro con muchos buenos momentos —dijo Hagrid, sonrojándose ligeramente.
Todos entraron al tren, Priscilla se despidió de Cassiopeia y Mayalen las cuales se iban a sentar en otro vagón junto con las demás chicas.
En el tren de regreso a Londres, los Merodeadores se acomodaron en su compartimento, disfrutando de los últimos momentos juntos antes de las vacaciones.
—Es extraño volver a casa, ¿no lo creen? —dijo Sirius, mirando por la ventana mientras el tren comenzaba su viaje.
Priscilla sonrió y miró a sus amigos.
—No iré a casa. Estoy en ella —dijo, refiriéndose a Hogwarts.
James, Remus y Peter asintieron, comprendiendo perfectamente el sentimiento. Para ellos, Hogwarts era más que una escuela; era un lugar donde habían encontrado a su segunda familia.
—Eso es cierto —dijo James—. Hogwarts siempre será nuestro hogar.
—Y nosotros, siempre seremos los Merodeadores —añadió Remus, levantando su vaso de jugo de calabaza.
El viaje en tren estuvo lleno de risas y recuerdos mientras los Merodeadores reflexionaban sobre el año que habían pasado juntos y las aventuras que les esperaban. Al llegar a la estación de King's Cross, se despidieron con abrazos y promesas de mantenerse en contacto durante el verano.
Cuando Priscilla salió del tren, vio a su hermano Harry ya esperándola en el andén con una expresión mezquina en su rostro.
—Mira quién decidió aparecer —dijo Harry, burlón—. ¿Cómo te fue con tus amiguitos, Priscilla?
Priscilla suspiró, ya preparándose para un verano difícil. Harry había sido seleccionado para Slytherin y desde entonces no había perdido oportunidad de molestarla.
—Lo pasé bien, Harry. ¿Y tú? ¿Hiciste muchos amigos en Slytherin? —respondió con un tono de aparente indiferencia.
Antes de que Harry pudiera responder, sus padres, Elizabeth y Dylan Prince, se acercaron. Ellos no se veían para nada contentos y Priscilla estaba segura de que la pasaría realmente mal. Elizabeth y Dylan Prince no entendían del todo a su hija, especialmente desde que descubrieron su vampirismo.
—Hola, Niños —dijo Elizabeth, mirando a Priscilla con una mirada de desaprobación—. Es hora de irnos a casa.
Priscilla asintió, manteniendo la mirada baja para evitar el juicio en los ojos de sus padres.
—Sí, madre —respondió, su voz apenas un susurro.
Dylan Prince miró a su hija con decepción evidente.
—Nos preguntamos cómo un miembro de nuestra familia pudo terminar en Gryffindor —dijo con amargura—. Definitivamente no es lo que esperábamos, eres una asquerosa traidora a nuestra sangre
— No estamos para nada contentos te daremos una lección cuando lleguemos a casa— Dijo sería
— Si debes aprender que eres una Prince y debes comportarte como tal nos llegaron muchas cartas sobre tu comportamiento mediocre— añadio Dylan
Priscilla tragó saliva, reprimiendo las lágrimas que amenazaban con caer. Sabía que sus padres nunca la aceptarían por lo que era, y el desprecio en sus palabras solo lo confirmaba.
Con una última mirada a la estación y una promesa silenciosa de regresar a su verdadero hogar, Priscilla se dirigió a casa con su "familia", lista para enfrentar lo que viniera a continuación. Sabía que, pase lo que pase, siempre tendría a los Merodeadores a su lado y Hogwarts esperando su regreso.
Pero talvez el destino no tenía esos planes...
✩*⢄⢁✧ --------- ✧⡈⡠*✩ STELLA' NOTES
• terminó el primer año estoy muy emocionada ya quiero seguir escribiendo
• Y si estas leyendo esto te agradecería un montón si me regalas una estrellita y me dejas un lindo comentario
