The Bridgerton; Colin Bridgerton

Una llegada inesperada...

La temporada social de Londres estaba en pleno apogeo. Los carruajes recorrían las calles adoquinadas, llevando a damas y caballeros elegantemente vestidos a las más exquisitas fiestas y bailes de la alta sociedad. La residencia Bridgerton, con sus imponentes muros de ladrillo rojo y sus jardines meticulosamente cuidados, se preparaba para otra noche de gala.

Daphne Bridgerton, recién casada y ahora duquesa de Hastings, ayudaba a sus hermanos menores a vestirse para la velada. Mientras tanto, en el salón principal, Lady Violet Bridgerton daba los últimos toques a la decoración. La familia Bridgerton siempre era la anfitriona perfecta, y esta noche no sería la excepción.

-¡Madre, llegaron noticias del puerto!- exclamó Benedict Bridgerton al entrar al salón con una carta en mano.

-¿Noticias?- preguntó Lady Violet, levantando una ceja. -¿Y qué noticias podrían ser tan importantes como para interrumpir mis preparativos?

-Una nueva joven ha llegado a Londres desde París. Su nombre es Hazel Clark, y parece que su presencia ha causado un gran revuelo entre la nobleza. Se dice que es hija de un comerciante adinerado y que busca establecerse en la sociedad inglesa.

Lady Violet sonrió con picardía.
-Interesante. Me pregunto qué sorpresas nos deparará esta señorita Clark.

Esa misma noche, la mansión de los Bridgerton se llenó de luces y música mientras los invitados llegaban en una sucesión interminable de carruajes. Daphne, deslumbrante en un vestido azul cielo, se movía entre los invitados, saludando a conocidos y presentando a sus hermanos más jóvenes a posibles pretendientes.

En medio del bullicio, una joven apareció en la puerta principal. Hazel Clark, con su cabello rubio y ojos verdes, vestía un elegante traje de seda blanca que resaltaba su belleza natural. Su porte y gracia al entrar en la sala atrajeron inmediatamente la atención de todos los presentes.

Colin Bridgerton, quien acababa de regresar de sus viajes por el continente, observaba desde un rincón, intrigado por la nueva figura. Se acercó a su hermana mayor, Daphne, quien estaba ocupada con otros invitados. -¿Quién es ella?- preguntó Colin, sin apartar la vista de Hazel.

-Esa debe ser la señorita Clark de quien Benedict hablaba-respondió Daphne, con una sonrisa. -Voy a presentarte.

Daphne llevó a Colin hacia Hazel, quien estaba rodeada por un pequeño grupo de curiosos. -Señorita Clark, permítame presentarle a mi hermano, Colin Bridgerton.

Hazel hizo una elegante reverencia.
-Es un placer conocerle, señor Bridgerton.

-El placer es mío, señorita Clark- respondió Colin, tomando su mano y besando ligeramente el dorso. -Espero que esté disfrutando de la velada.

-La encuentro encantadora- dijo Hazel, con una sonrisa que iluminó su rostro.
-Londres es incluso más impresionante de lo que imaginaba.

A medida que la noche avanzaba, Hazel se convirtió en el centro de atención. Sus historias sobre París y su elegante porte cautivaron a todos. Colin, especialmente, se sintió atraído por su inteligencia y encanto. Sin embargo, también comenzaron a surgir susurros y miradas de desconfianza. Lady Whistledown, siempre atenta a cualquier novedad, ya estaba tomando nota para su próxima columna.

Mientras tanto, en un rincón apartado del salón, Eloise Bridgerton observaba a Hazel con una mezcla de curiosidad y escepticismo. -¿Qué piensas de nuestra nueva invitada?- le preguntó a Benedict, quien estaba a su lado.

-Es ciertamente intrigante-respondió Benedict, con una sonrisa.-Pero me pregunto qué secretos esconderá detrás de esa sonrisa encantadora.

Esa noche, mientras la música y las risas llenaban la residencia Bridgerton, una cosa quedó clara: Hazel Clark no era una joven común y corriente, y su llegada a Londres prometía cambiar el curso de la temporada social de manera inesperada, especialmente para Colin Bridgerton.