¿Quienes son las nuevas guardianas? #2 Miraculous

15

-Marinette-

Me había despertado temprano hoy; había clases y no tenía ningún deseo de salir de mi cuarto. Solo quería llorar, pero tuve que salir igualmente.

—Vámonos, Tikki —dije sin ganas.

—Marinette, por favor, no estés mal... —la interrumpí.

—Ya lo sé, no puedo sentir emociones negativas, pero soy humana. Tengo derecho a sentirme mal —dije mientras tomaba unas galletas y me vestía al mismo tiempo.

—Lo siento, Marinette. Sé que sufres, pero eres muy fuerte.

—No pasa nada, Tikki, estas cosas ocurren.

Salí de mi habitación temprano y me dirigí a los vestuarios para dejar mis cosas. No pude evitar soltar unas lágrimas, pero rápidamente me las sequé. No podía permitir que alguien me viera llorar. Ya tengo suficiente con Adrien.

Después de guardar mis cosas, continué mi camino hacia el baño para lavarme la cara y desahogarme. Una chica castaña entró al baño con una sonrisa perversa.

—Hola, Marinette —dijo la chica con voz suave.

Tragué saliva; quería salir corriendo. De todas las personas, tenía que ser ella.

—H-hola —dije con voz entrecortada—. Ya me voy, a-adiós.

Una mano agarró mi muñeca.

—Marinette, espera —tragué de nuevo saliva y me preparé para lo peor.

—¿Ocurre algo? —dije con miedo.

—Sí, ocurre algo —me respondió con una cara seria.

—Suéltame, tengo prisa —contesté con frialdad.

—Adrien me robó un collar. Te lo voy a enseñar. —Me llevó arrastrada hasta los vestuarios y me mostró la taquilla de Adrien abierta.

—¿Qué quieres? —pregunté.

—¿Cómo que qué quiero? Adrien, tu mejor amigo, me robó un collar que me dio mi madre por mi cumpleaños —comenzó a llorar dramáticamente. Me solté del agarre.

—Lila, la verdad no estoy de humor para aguantar a nadie. Con tu permiso, me voy a retirar —dije.

De repente, Adrien entró para dejar sus cosas y me saludó.

—Hola —le dije y continué mi camino.

—Espera, Marinette —me agarró de nuevo la muñeca, esta vez con más fuerza—. Por favor, recupera mi collar —dijo llorando nuevamente.

Compañeros de nuestra clase aparecieron y vieron lo que hacía Lila.

—Por favor, recupera mi collar. Sé que Adrien me lo robó —dijo entre lágrimas.

—¡¡¿CÓMO QUE ADRIEN TE ROBÓ TU COLLAR?!! —dijo una morena enfurecida.

—¡Qué, Adrien hizo qué! —preguntaron los demás.